Ciudad de México, 23 de junio (SinEmbargo).– El desarrollo entre las diferentes regiones que conforman el país presenta contrastes dramáticos, alertó el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) y esto no es algo que no se sepa.
La cúpula empresarial planteó que si en la última década todos los estados hubieran crecido como Querétaro o Quintana Roo, el Producto Interno Bruto (PIB) per cápita por año superaría los 18 mil dólares; es decir, casi el 80 por ciento más del actual. Y esto tampoco es algo novedoso.
Y es que las condiciones de cada estado no son las mismas. La situación de Aguascalientes, por ejemplo, que ha llegado a superar el crecimiento de China, no se compara en nada con los secuestros, fosas y ataques que se ven casi todos los días en Guerrero, donde apenas ayer dos grandes empresas (Volkswagen y FEMSA) decidieron minimizar su actividad en la zona por la inseguridad.
El CCE no descubrió el hilo negro, pero sí reconoció que se ha fracasado en articular una estrategia y políticas de desarrollo sólidas. Mientras eso no se logre, las entidades con más crecimientos irán rezagando a las más pobres, que casi siempre son las del sur y sureste del país.




