Fue retirado del arsenal ruso luego de que expiró su vida útil de 25 años, dijo Yan Nóvikov, director del consorcio en una conferencia de prensa celebrada en esta capital.

El Boeing 777 en la ruta Amsterdam-Kuala Lumpur con 298 personas a bordo, 198 de nacionalidad holandesa, cruzó la zona de conflicto entre tropas ucranianas y rebeldes prorrusos cuando fue derribado por dicho misil.

La declaración del fabricante ruso del sistema antiaéreo se dio a escasas horas de que la comisión holandesa que investiga el hecho difundiera sus propios resultados este mismo martes.

Los familiares de los pasajeros y tripulantes fueron informados de las conclusiones del reporte antes que la prensa.

Uno de ellos adelantó a la británica BBC que había escaso material nuevo sobre el responsable del disparo, que fue hecho por las tropas ucranianas o los rebeldes.

A pesar de que la certeza no es del cien por ciento, es muy probable que los viajeros no hayan sufrido por el impacto del misil, “lo que fue un descanso para el corazón de los familiares”, acotó.

Al respecto, el Primer Ministro de Ucrania,  Arseni Yatseniuk, aseguró no tener “ninguna duda de que ésta fue una operación de derribo del avión MH17 de la aerolínea malasia planificada por los servicios secretos rusos”.

En una junta de Gobierno, Ucrania acusó a los separatistas prorrusos de abatir al avión con un misil Buk, de fabricación rusa, algo que niegan tanto los insurgentes como Moscú, que acusan por su parte a Kiev de abatir el aparato con uno de sus cazas.