Nueva Delhi, 20 ago (EFE).- El gurú del yoga B.K.S. Iyengar, fundador de una de las ramas más extendidas en Occidente de esta disciplina física y mental, murió hoy en la India a los 95 años de edad.
La fundación Iyengar informó de que el laureado instructor de yoga y autor de varios libros sobre la materia falleció en la ciudad de Pune, en el oeste de la India, a las 3.15 hora local (21.45 de ayer GMT) a causa de problemas cardíacos y renales.
Iyengar había sido hospitalizado la semana pasada aquejado de palpitaciones y dificultades respiratorias, pero no fue hasta hace dos días cuando comenzó a someterse a diálisis, después de que su estado de salud empeorase, dijo su doctora, Deepali Mande, a la agencia india PTI.
El gurú dio su nombre a una de las disciplinas de yoga más conocidas internacionalmente, una rama que hace especial hincapié en la precisión y alineación del cuerpo durante la realización de las diferentes posturas, conocidas como “asanas”.
El yoga, una ciencia oriental milenaria, tiene su origen en los antiguos “vedas” (palabra que significa “sabiduría”), las escrituras hindúes que datan del 1.500 A.C. y forman la base de la religión hindú.
B.K.S. Iyengar plasmó sus conocimientos sobre esta disciplina en 14 libros, de entre los cuales nació la conocida como “Biblia del yoga”, obra que fue traducida a 17 idiomas.
El Gobierno indio condecoró a Iyengar con dos de sus reconocimientos civiles más importantes, el Padma Shri y el Padma Vibhushan, que recibió en 1991 y 2014, respectivamente.
“El yoga nos enseña a curar lo que necesita ser superado y a superar lo que no puede ser curado”, sentenció el gurú en alguna ocasión.
