La violencia ha vuelto a Acapulco obligando a empresarios a cerrar sus negocios. Una ola de inseguridad sacude desde hace varios meses a esta ciudad mexicana de la costa del Pacífico, que alguna vez fue sitio predilecto de actores como Johnny Weismüller o Brigitte Bardot. El secretario técnico de la Cámara Nacional de Comerciantes y Prestadores de Servicios Turísticos (Canaco-Servytur) en Acapulco, Raúl Iracheta Montoya, pidió apoyo económico para los negocios afectados por la inseguridad.

Ciudad de México, 24 de mayo (SinEmbargo).– A mediados de mayo un grupo de personas armadas irrumpió en un restaurante a 500 metros de la Base Naval en la zona turística de Acapulco, Guerrero y mató a tres camareros. Y unos días antes un sicario llegó a la playa en jet-ski, mató a una persona y huyó desafiando las olas.

La violencia ha vuelto a Acapulco obligando a empresarios a cerrar sus negocios. Una ola de inseguridad sacude desde hace varios meses a esta ciudad mexicana de la costa del Pacífico, que alguna vez fue sitio predilecto de actores como Johnny Weismüller o Brigitte Bardot.

“En las noches Acapulco ya no es lo que antes era. Casi no hay vida nocturna, la gente que vive aquí o que viene de fuera tiene miedo de salir. Ya no tenemos la misma cantidad de visitantes extranjeros y el combate por parte de los Gobiernos hacia el tema de violencia no ha dado resultados”, contó a la agencia de noticias dpa la comerciante y promotora de la paz Laura Caballero Rodríguez.

De tener 17 negocios en la costera Miguel Alemán, la principal avenida de la ciudad, Caballero pasó a quedarse sin un solo establecimiento, a raíz de las extorsiones, intentos de secuestro y otras actividades de grupos delictivos.

Desde 2007 la violencia empezó a aumentar. Hubo un rebrote en 2012 y ahora una nueva etapa de inseguridad está afectando severamente la vida social y turística. Hubo momentos en que hasta las escuelas tuvieron que cerrar.

“No siempre hemos vivido como ahorita. Acapulco ha tenido abundancia, hemos visto al puerto en sus mejores momentos”, lamentó Caballero.

Según datos de la asociación civil mexicana Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal, Acapulco es la ciudad más violenta de todo México y la cuarta nivel mundial, exceptuando países en guerra.

Esta ciudad, ubicada a 400 kilómetros al sur de la capital del país, tiene una tasa 104 mil 73 asesinatos por cada 100 mil habitantes.

La violencia al principio tenía como fondo una guerra entre grupos del narcotráfico por el negocio de venta de drogas. Ahora los grupos delictivos buscan como principal fuente de ingresos actos como secuestros y extorsiones a pequeñas, medianas y grandes empresas.

“Son alrededor de 50 bandas criminales las que han causado el rebrote de la violencia en Acapulco”, manifestó el Fiscal del estado de Guerrero, Xavier Olea Peláez.

La Fiscalía General del Estado dio a conocer que en Acapulco operan grupos como La Barredora y el CIDA (Cártel Independiente de Acapulco) que mantienen una constante disputa por la zona turística de la ciudad.

“El problema principal de los empresarios y comerciantes es que llega un grupo y te pide dinero por el derecho de piso, pero luego llega otro y también te pide lo mismo y, si no les pagas, pues te matan”, dijo Caballero.

Los turistas nacionales, que son los que más visitan la ciudad, se alejan cuando hay brotes de violencia. Y Acapulco vive, sobre todo, del turismo.

“El problema se llama violencia y las causas que generan la violencia”, dijo el Alcalde de Acapulco, Evodio Velázquez Aguirre.

El Alcalde afirma que es necesaria una estrategia integral que permita la recuperación de la ciudad, con la coordinación de esfuerzos gubernamentales y privados, para reactivar la economía local, sanar el tejido social y hacer obras de infraestructura.

Acapulco se ha convertido en la nueva Ciudad Juárez, que fue la ciudad más violenta de México de 2008 a 2010. Un plan integral denominado “Todos somos Juárez” ayudó a reducir la inseguridad en esa localidad de la frontera con Estados Unidos.

“Acapulco debe buscar un tratamiento similar a como se dio en otros momento en otras ciudades”, dijo Velázquez.

Desde enero las autoridades estatales y federales han reforzado en al menos tres ocasiones los operativos de seguridad. Durante la temporada de Semana Santa, 13 mil militares y marinos se sumaron a las labores.

Según la Secretaría de Seguridad y el Grupo de Coordinación Guerrero, actualmente se encuentran más de 6 mil elementos de la Policía Federal realizando labores de “blindaje” al puerto, más policías municipales, estatales y efectivos del Ejército que custodian escuelas.

El 24 de abril tuvo lugar una de las balaceras más importantes de los últimos años en Acapulco. “Estuvieron casi dos horas correteándose los policías con los delincuentes y en la zona turística de Acapulco. Eso te habla de que la violencia no solamente se expande en los lugares de la periferia”, dijo Caballero.

NEGOCIOS CERRADOS

Ayer, el secretario técnico de la Cámara Nacional de Comerciantes y Prestadores de Servicios Turísticos (Canaco-Servytur) en Acapulco, Raúl Iracheta Montoya pidió apoyo económico para los negocios afectados por la inseguridad.

Comentó que son unas 300 pequeñas empresas las que cerraron y puntualizó que “no todas” cerraron por la inseguridad, pues también hubo algunas que no tuvieron suficientes ingresos.

Recordó que los integrantes de la mesa directiva de la Canaco-Servytur han insistido en la necesidad de establecer mesas de atención, no sólo en el aspecto de la seguridad, pues además se requiere de la intervención de un gabinete del sector económico para tener opciones para recuperar las empresas.

Indicó que después de la balacera del pasado 24 de abril y luego de la conferencia de prensa en la que denunciaron el cierre de negocios, no han cesado en su petición de un gabinete para el sector económico.

“Fue una petición que nosotros hicimos en su momento a los gobiernos de los tres niveles, no sólo es la cámara de comercio, son los mercados, los micro y pequeños negocios los que están sufriendo”, advirtió.

Señaló que se requieren de beneficios e incentivos económicos pues aclaró que no dejarán de pagar sus obligaciones fiscales. Sin embargo, pidió a las autoridades sensibilidad para que mediante la firma de convenios con diferentes dependencias como la Comisión Federal de Electricidad (CFE) o la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado del Municipio de Acapulco (CAPAMA) se puedan establecer periodos de pago por los servicios y que éstos no se suspendan.

“Los más afectados son los micro y pequeños negocios, habíamos hablado de 300, y esperamos que las cosas sean más positivas para el sector (…) una vez teniendo seguridad, habrá más visitantes y una mayor derrama económica”, expresó Raúl Iracheta.

Detalló que en el 2011 había 6 mil comercios afiliados a la Canaco-Servytur en Acapulco, cantidad que se redujo a 5 mil por “diferentes motivos”, no sólo por la inseguridad, también por el ambulantaje, e incluso mencionó que no hubo suficiente turismo.

“Otro tema que también provocó el cierre de negocios fue el ambulantaje”, el cual dijo que es una situción compleja, y mencionó la idea de tener mercados ambulantes, “a nosotros nos parece viable, porque se le da certeza jurídica a las personas que viven de esto”, esto en relación con una propuesta para reducir el número de vendedores ambulantes en el puerto.

Reiteró la necesidad de un gabinete económico formado por representantes de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y de la Secretaría de Economía (SE) para buscar opciones de créditos económicos para los micro y pequeños empresarios.

“En la pasada visita del Secretario de Gobernación (Miguel Ángel Osorio Chong), nosotros pedimos que se establezcan mesas de trabajo para que se evalúe la situación, porque hay que reconocer que también hemos tenido buena afluencia los fines de semana, pero necesitamos que estos registros sean permanentes”, comentó el empresario.

Invitó a los tres niveles de gobierno a que haya una reactivación económica de los micronegocios.

“Somos un órgano de consulta y de propuesta en aspectos de economía y seguridad, sí estuvimos con Osorio Chong y así como otras organizaciones hablan de inseguridad, nosotros pedimos que se abordara el tema de la economía”, indicó.

Además explicó que los cerca de 300 negocios que tenían riesgo de embargo porque no pagaron los créditos después de la tormenta Manuel, están abordando su problemática de manera individual ante las instituciones que les otorgaron los créditos.

“Estamos en pláticas también para que no haya este tipo de embargos y haya una negociación para reconvenir o reestructurar la deuda de los negocios”, aseguró.

Insistió también en que han mantenido la petición de que se reduzca el cobro en la Autopista del Sol al 50 por ciento y no el 25 por ciento que se mantiene desde diciembre pasado.

“Nosotros quisiéramos que no se cobre pero sabemos que existen gastos para la conservación de esta autopista y queremos que el gobierno de la República lo mantenga”, expresó.

Respecto al porcentaje de ocupación hotelera, informó que en promedio se registra entre el 50 y 60 por ciento durante los sábados y domingos, y añadió que el pasado fin de semana se alcanzó un 80 por ciento, lo que representa “un respiro” para los negocios.

–Con información de Alejandro Ortiz de dpa y Karla Galarce Sosa de El Sur