París, 27 ago (dpa) – El nuevo gobierno socialista de Francia mantuvo hoy su primera reunión de trabajo, un día después de que el presidente Francois Hollande y el primer ministro Manuel Valls purgaran el gabinete de los rebeldes antiausteridad.
Los ministros críticos de los programas de recorte del ejecutivo fueron reemplazados por leales al presidente francés, entre ellos Emmanuel Macron, uno de los bastiones principales de Hollande.
Macron, de 36 años, asumirá el Ministerio de Economía e Industria, del que surgieron las duras críticas a las políticas de ahorro que derivaron en el reemplazo en varias carteras.
El ex banquero de Rothschild y ex asesor económico de Hollande sucede a Arnaud Montebourg, quien desafió públicamente el programa de reducción del déficit de Francia y de Europa el fin de semana, acusándolos de ahogar el crecimiento y la creación de empleo.
Posteriormente, Montebourg se vio obligado a renunciar a su puesto en el gabinete.
Al asumir el cargo Macron pidió que se lo midiera por su trabajo, en alusión a las críticas provenientes del ala izquierda del partido Socialista gobernante por la nominación del banquero de inversión.
El flamante ministro aseguró que iba a trabajar para mejorar la situación de las empresas, los empleadores, los trabajadores e incluso “a veces de los banqueros”.
Por su parte, Hollande espera del nuevo gobierno “unidad de acción, respeto y solidaridad.”
El nuevo gobierno, dirigido al igual que el anterior por el primer ministro Manuel Valls, tiene 16 ministros, ocho hombres y ocho mujeres. En tanto, mantuvieron sus carteras los ministros de Finanzas Michel Sapin, de Relaciones Exteriores Laurent Fabius, de Defensa Jean-Yves Le Drian, además de la ex pareja de Hollande, Segolene Royal como ministra de Medio Ambiente y Energía y la ministra de Justicia Christiane Taubira.
Los antiguos ministros de Educación (Benoît Hamon) y Cultura (Aurélie Filippetti), también críticos acérrimos de los recortes, quedaron fuera del gabinete.
El Ministerio de Educación, complejo y vapuleado, será asumido por Najat Vallaud-Belkacem, anteriormente a cargo del Ministerio de la Mujer.
Quien preside el Partido Radical de Izquierda (PRG, por sus siglas en francés), Jean-Michel Baylet, tampoco pasará a integrar el gabinete, con lo cual la colaboración entre socialistas y el PRG se limitará por el momento a la ministra de la Construcción, Sylvia Pinel.
Muchos miembros del ala izquierda de los socialistas comparten las preocupaciones de Montebourg, en particular en momentos en que hasta entidades internacionales como el Fondo Monetario Internacional o el Banco Central Europeo instaron a Francia a aplicar políticas menos duras a nivel económico.
Entretanto, la Comisión Europea pidió al nuevo gobierno realizar reformas con el fin de estimular la economía y crear puestos de trabajo.
“No hay tiempo que perder”, dijo un portavoz en Bruselas.
