El Jefe de las Fuerzas Armadas de Birmania, Min Aung Hlaing, fue acusado por la ONU de ser responsable del genocidio que cometió hace un año contra los rohinyá, etnia musulmana que ha vivido una serie de violaciones contra sus derechos humanos.
Rangún (Birmania), 27 de agosto (EFE).- La compañía Facebook anunció hoy que ha bloqueado la cuenta del jefe de las Fuerzas Armadas de Birmania (Myanmar), Min Aung Hlaing, y de otras personas o entidades para prevenir la incitación al odio y las noticias falsas.
“Hoy, estamos tomando más medidas en Myanmar: estamos eliminando un total de 18 cuentas de Facebook, una cuenta de Instagram y 52 páginas de Facebook, seguidas por casi 12 millones de personas. Estamos conservando datos sobre las cuentas y páginas que hemos eliminado”, informó la empresa en un comunicado.
Facebook señaló que un informe de una investigación de la ONU encontró pruebas de que “muchas de estas personas y organizaciones cometieron o permitieron violaciones graves de los derechos humanos”.
“Queremos evitar que usen nuestro servicio para aumentar las tensiones étnicas y religiosas”, añadió Facebook.
Entre los afectados destacan, además del general Min Aung Hlaing, la cadena de televisión de los militares birmanos, Myawady.
La Misión Internacional de Investigación de la ONU señaló hoy en un informe presentado en Ginebra que existen elementos de “genocidio intencional” en la operación militar lanzada hace un año en el estado birmano de Rakáin (oeste) contra la minoría rohinyá.
La misión condenó al Gobierno de la nobel de la paz Aung San Suu Kyi por no haber hecho los suficiente para sofocar la violencia y recomendó la creación de un tribunal internacional que investigue y juzgue a los supuestos responsables de las Fuerzas Armadas.
En concreto, aconsejó que se procese al general Min Aung Hlaing, a su segundo, Soe Win, y otros cuatro cargos del Ejército.
La presentación del informe se produce al cumplirse un año de los ataques de insurgente a varios puestos de seguridad en Rakáin y la desproporcionada respuesta del Ejército birmano que desencadenó el éxodo de 700 mil rohinyás a la vecina Bangladesh.
Los rohinyás son una etnia mayoritariamente musulmana que Birmania no reconoce, les trata en general como emigrantes bangladeshíes y les impone numerosas restricciones, como la libertad de movimientos.