Luego de que Javier Duarte de Ochoa pidiera licencia de su cargo como Gobernador de Veracruz, el Congreso local designó a Flavino Ríos Alvarado, quien ocupará el puesto hasta que el Gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares tome posesión. Sin embargo, ninguno de los anteriores personajes dan esperanza ni inspiran confianza a los habitantes de la entidad.
Veracruz (México), 13 oct (EFE).- Los habitantes de Veracruz amanecieron hoy con un Gobernador interino después de que Javier Duarte pidiera licencia para enfrentar las acusaciones de corrupción en su contra, pero escépticos de que la situación vaya a mejorar en ese estado.
El Congreso de Veracruz designó la noche de este miércoles como Gobernador interino a Flavino Ríos Alvarado, quien se venía desempeñando como Secretario de Gobierno, tras aprobar la solicitud de licencia que Duarte presentó temprano ese mismo día.
Para el empresario de la construcción Alberto Martínez, de la ciudad de Xalapa, la salida de Duarte fue tardía, pues si la intención era limpiar su nombre debió hacerlo meses o años atrás.
“Si realmente son las cosas como las está diciendo, que es muy improbable, que es inocente de todos los cargos, lo hubiera hecho desde antes. Considero que este daño que se le ha causado al estado es muy grande”, dijo Martínez a Efe.
Añadió que el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que en septiembre pasado suspendió los derechos de Duarte como militante, “debió actuar mucho antes para tener esa credibilidad que ha venido perdiendo”.
Sobre el Gobernador electo Miguel Ángel Yunes, del conservador Partido Acción Nacional (PAN), consideró que cuando asuma la administración estatal el 1 de diciembre tendrá oportunidad de demostrar que quiere hacer bien las cosas después de buscar la gubernatura durante tres sexenios, aunque reconoció que “se ve difícil”.
El ama de casa Carmen Pérez, quien vive en el municipio de Minatitlán, aseguró a Efe que la gestión de Duarte (2010-2016) es la peor que ha vivido esa región del sur de Veracruz, sumida en la violencia y la criminalidad.
“Llevo viviendo en Minatitlán más de 20 años y la de Duarte ha sido la peor época. No me causa ninguna afectación ni ningún problema (la licencia al gobernador), pero me gustaría que realmente se hiciera cumplir la ley y que no hubiera mucho delincuente. Y si tiene que ir a la cárcel que sea por como deja a la zona sur, en un estado deplorable”, añadió.
Del Gobernador electo dijo que no votó por él pues no le inspiró confianza por el pasado que tiene -ha sido señalado como supuesto participante de una red de pederastas-, por lo que descartó “que vaya a mejorar la situación”.
El trabajador petrolero Fernando Salazar, residente de Coatzacoalcos, aseguró que Duarte saldrá libre de todas las acusaciones en su contra. “Seguro que las instrucciones las dio de manera verbal y nunca comprometió a su persona al solicitar desvío de recursos del erario”, manifestó.
“La ley está hecha para las personas que tienen dinero. La misma ley va a amparar a Duarte mientras no exista documento que él haya firmado. Hábilmente movió sus piezas y va a salir bien librado, y yo creo que pidió licencia para poder salir del estado y del país; a lo mejor hay pacto”, dijo a Efe.
De Yunes aseguró que se trata de un “enfermo” de poder y de sus pasiones, pues recordó la investigación de la periodista Lydia Cacho que lo involucró en la red de pederastas.
“Si es cierto es lamentable que llegue al poder y que tenga a sus espaldas una acusación de pederastia. En manos de quién vamos a estar, de un persona enferma”, añadió.
El pequeño empresario César Gutiérrez, con negocios en diversas regiones del estado, dijo que en nada beneficia que Duarte se haya ido, “porque deja un estado en quiebra financiera y sumido en la inseguridad”.
“Tuvo que haberse quedado para entregar el Gobierno y va a pasar que se va a largar con todo el dinero que robaron y no se le va a hacer nada. Lo amparan el PRI y el Gobierno (federal)”, expuso.
Entrevistado por Efe, recordó que Yunes ganó las elecciones de junio pasado porque prometió encarcelar a Duarte, pero dijo que el Gobernador electo “es un político viejo que igual ha robado, pero que no ha estado en los últimos años en un cargo y ojalá haga las cosas como lo prometió”.
Este jueves, Miguel Ángel Yunes dijo haber pedido al presidente Enrique Peña Nieto una intervención “urgente” del Gobierno federal en Veracruz, estado sumido en una profunda crisis de seguridad y financiera.
“Hay un colapso financiero en Veracruz, hoy las calles están llenas de personas demandando pagos: empresarios, maestros, pensionados”, apuntó el político a la cadena Televisa.
Es “imposible pagar una deuda que puede rebasar los 100 mil millones de pesos”, afirmó Yunes, quien consideró “indispensable” una colaboración estrecha con el Gobierno federal para sacar adelante uno de los estados más importantes del país.
En plena campaña rumbo a las elecciones del 5 de junio y como candidato del PAN y el izquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), Yunes interpuso en abril una denuncia ante la Fiscalía estatal contra Duarte y otros funcionarios por lavado de dinero y evasión fiscal.
La Procuraduría General de la República (fiscalía nacional) asumió en septiembre pasado las investigaciones contra el entonces Gobernador por enriquecimiento ilícito, peculado e incumplimiento del deber legal.
