Después de que un video donde Francisco ofrece de una manera bastante original sus empanadas a un par de turistas se volviera en un fenómeno viral, Arturo Elías Ayub expresó su deseo por contratar al muchacho.
Ciudad de México, 26 de octubre (SinEmbargo).– El talento de Francisco Orihuela Ramírez para vender sus empanadas entre las personas que visitan las playas de Acapulco ha llamado la atención de muchas personas quienes han expresado su intención de sumar al joven a su equipo de trabajo, entre ellas, se encuentra el empresario Arturo Elías Ayub.
“Si alguien sabe cómo localizarlo se los agradecería, me lo quiero traer a chambear conmigo YA”, escribió en su cuenta de Twitter el empresario, quien actualmente se desempeña como ejecutivo de América Móvil y como director de Uno TV.
Mientras que en su perfil de Facebook indicó que quiere “aprender de él, meterlo a acabar sus estudios y a chambear”, y pidió ayuda para encontrarlo y “ver si a él le late”.
Los usuarios de redes sociales han iniciado una campaña para dar con su paradero.
Francisco Orihuela Ramírez, un joven de 15 años originario de la ciudad de Acapulco, Guerrero, se volvió bastante popular en redes sociales gracias a su talento para vender empanadas entre los turistas que acuden a las playas del puerto.
“Se le plantea garantía previa de la venta para posteriormente poder cerrar un trato convincente de las dos partes de que si usted degustar la calidad de esta empanada y no es lo suficientemente buena para satisfacer las necesidades de sus paladares a continuación habría una devolución total e inmediata de su dinero. Partiendo desde ahí no le parecería conveniente ceder el beneficio de la duda y poder degustar la calidad de la empanada y dar una crítica constructiva si es que la hay”, menciona el joven a un par de turistas a quienes se les acercó para ofrecerles su producto.
El joven sorprendió en redes porque a pesar de su corta edad cuenta con un lenguaje bastante amplio y por la capacidad que tiene para desenvolverse con los clientes, quienes la mayoría de las veces terminan completamente convencidos de comprar una orden de empanadas.
