Elementos de la Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán hicieron guardia junto al féretro del joven Raúl Adrián Cohuó, asesinado durante el cumplimiento de su deber.
Ciudad de México, 25 de julio (SinEmbargo).- El oficial Raúl Adrián Cohuó Aké, de 23 años de edad, marcó el alto a una banda de supuestos feminicidas en Mérida, Yucatán, y fue asesinado.
Fue el viernes 23 de julio cuando Raúl, motopatrullero, informó a sus jefes que seguía a un vehículo sospechoso. Sin saberlo, había localizado a tres personas, dos hombres y una mujer, todos originarios del Estado de México, que acababan de asesinar a una mujer identificada como Teresa Vega.
Cohuó Aké detuvo a los sospechosos y fue atacado. De acuerdo con la revista Proceso, los pasajeros del auto lo sometieron y desarmaron. Luego le dispararon y le provocaron la muerte.
“En ese momento se ignoraba que el trío acababa de matar a una joven madre, Teresa Aurora, en su vivienda del fraccionamiento Gran San Pedro Cholul, frente a su bebé, y que el auto Yaris en el que escapaban era de la víctima, a quien presuntamente su exesposo mandó a matar desde Morelos al parecer por la disputa legal que tenían por la custodia de sus hijos”, dice el semanario Proceso.
Autoridades de Yucatán localizaron más tarde el vehículo y lograron capturar a los perpetradores de los asesinatos de Raúl y Teresa.
La Secretaría de Seguridad Pública de Yucatán envió un mensaje solidario a los familiares y amigos de Raúl Adrián, quien ha sido calificado como héroe y fue despedido con honores.
“Nos invade la tristeza por la ausencia física de quien supo ser ejemplo de rectitud y profesionalismo. Un héroe, eso es Raúl Adrián para nosotros en la Secretaría de Seguridad Pública. Descanse en paz”, señaló la autoridad.
Policías hicieron guardia junto al féretro del joven el sábado durante su funeral. Miles de personas han enviado mensajes de apoyo para su familia.
