Ataviado con su uniforme de Policía Municipal de Mazatlán ayudó a cruzar en una zona de semáforo a una persona en silla de ruedas, sin saber que era grabado con un teléfono celular, y su acción se volvería viral en la redes sociales.
Por Fernanda Magallanes
Ciudad de México, 5 de abril (SinEmbargo/Noroeste).– Su acción lo hizo ver como “un fuera de serie”, en una profesión cada vez más cuestionada por los ciudadanos. Javier Omar Castro Guillén no sabía lo que haría, pero lo que hizo, le nació del alma.
Ataviado con su uniforme de Policía Municipal de Mazatlán ayudó a cruzar en una zona de semáforo a una persona en silla de ruedas, sin saber que era grabado con un teléfono celular, y su acción se volvería viral en la redes sociales.
A sus 26 años y con el deseo de convertirse en comandante de la corporación preventiva, Javier recorre Mazatlán a bordo de una motocicleta motopatrulla en la que hace sus rondines diarios. Está asignado a la sección 2, que comprende la Avenida Ejército Mexicano.
“Me fijé en la persona que era y que no tenía pies, y yo veía que nadie lo ayudaba, incluso, quería cruzar la avenida, pero él venía por una subida y yo me regresé con la motocicleta, me crucé y lo ayudé”, declaró.
“‘Eres el único policía que me ayuda, gracias y que te bendiga Dios’, me respondió con una sonrisa en el rostro’”, menciona Javier.
Él quiere demostrar a los mazatlecos que aún se puede confiar en la Policía Municipal.
“El mensaje que les doy es que aunque no seamos de la corporación, nos tiene que nacer, si vemos a la persona, hay que ayudarla, no hay que dejarla ahí sola que batalle, menos si es un inválido que no puede, menos señoras de la tercera edad, incluso a cualquier persona”, comenta.
“Muchas de las personas nos tienen mala fama (a los policías), pero en realidad no, estamos para servirles, para ayudarlos, para que se acerquen ante nosotros y nos expliquen sus problemas”, dice.
Hijo de comerciantes, está agradecido con su familia por la persona que es, sin vicios ni problemas que lo lleven por un camino incorrecto.Y en ese tono, Javier se ve por muchos años sirviendo a los mazatlecos.
“Me gusta la Policía, más que nada la carrera que lleva por defender y proteger a la ciudadanía, son uno de los principios que más me gustan, y porque me gusta estar aquí”.
“Muchas de las personas nos tienen mala fama (a los policías), pero en realidad no, estamos para servirles, para ayudarlos, para que se acerquen ante nosotros y nos expliquen sus problemas”.
