Ciudad de México, 13 de junio (SinEmbargo).- El gobierno de Miguel Ángel Mancera Espinosa debe abstenerse de estigmatizar a los 12 desaparecidos del bar Heaven y de criminalizar al barrio de Tepito, coincidieron especialistas de la Universidad Iberoamericana (UIA).
José Antonio Ibáñez, coordinador del Programa de Derechos de la UIA, dijo en la mesa de análisis “Los desaparecidos de Tepito… la punta del iceberg”, que las autoridades capitalinas se equivocan al informar, sin que se concluya la investigación, que los desaparecidos están relacionados con una venganza entre bandas del crimen organizado.
Hace unos días el Jefe de Gobierno dijo que se encontraban líneas de conducción entre el asesinato del presunto narcomenudista José Vite Ángel frene al bar Black en la colonia Condesa y las 12 personas sustraídas del Heaven.
En cuanto a la ejecución en el gimnasio Extreme Body en Tepito, Mancera dijo que aún no había elementos para relacionarlo con los otros dos casos, pero que se trataba de un ajuste de cuentas por rencillas y amenazas previas.
“La autoridad está obligada a esclarecer los hechos y evitar que se repitan. [Pero] ha dejado mucho que desear. Nos dicen que está relacionado indirectamente con las drogas, con un conflicto territorial entre delincuentes, sin que esté comprobado que tengan un vínculo directo con el narco. No hay que estigmatizar a las víctimas por el lugar de donde vienen ni generalizar la situación”, dijo el especialista.
Julio Hernández Barros, académico del Departamento de Derecho de la UIA y redactor de la Ley General de Víctimas, dijo que la legislación prohíbe la criminalización.
“La autoridad nos acababa de decir que no sabía si estaban desaparecidos o ausentes, cuando ya se aventuraban a decir que eran narcomenudistas por provenir de un barrio criminalizando”, indicó.
El abogado explicó que la legislación prohíbe la criminalización de las víctimas si no existen todas las pruebas.
“Nos dicen que es un ajuste de cuentas entre el cartel de los coreanos contra el de los tepiteños, sin que se concluya la investigación”, subrayó.
Hernández Barros dijo que el sistema de procuración de justicia en el Distrito Federal adolece de recursos y Agentes del Ministerio Público capacitados, pues en muchas ocasiones inician una averiguación cuando pasaron 72 horas de la desaparición.
“Hay una victimización secundaria, donde en el mejor de los casos se tardan 72 horas en empezar. Si una madre llega a denunciar que su hija no regresó a casa, le dicen ‘nombre no la secuestraron, su hija es una perdida que anda con el novio, vaya y búsquela en un motel de paso’, entonces los que denuncian también se convierten en víctimas”, detalló.
Según esta ley, tanto las víctimas primarias como las secundarias (en este caso los familiares de los desaparecidos) deben ser parte de la investigación, siempre y cuando esto no las ponga en riesgo, precisó Hernández. Añadió que la victimización secundaria se fortalece cuando los ciudadanos no obtienen atención inmediata en el Ministerio Público, que tarda 72 horas en iniciar la búsqueda de una persona desaparecida.
Pablo Monzalvo Pérez, académico del Diplomado en Seguridad Pública, agregó que la seguridad no se mide con la cantidad de policías, sino en su calidad y que no es suficiente contar con un buen papel operativo, si sus integrantes adolecen de vocación y formación.
El académico dijo que no existirá una policía de calidad mientras se utilice como una política de empleo que busque resolver la necesidad laboral de personas sin vocación.
QUIEREN “TAPAR EL SOL CON UN DEDO”
Julio Hernández Barros acusó al gobierno del DF de pretender “tapar el sol con un dedo” al sugerir que los hechos de las últimas semanas responden a eventos aislados.
La Ciudad de México tiene un largo historial en colonias conflictivas y una lista de desaparecidos bastante amplia, indicó.
“Es de las ciudades que más consume drogas y entonces quién la vende. Todos sabemos que en el Distrito Federal operan todas las bandas del crimen organizado. Los cárteles están infiltrados por todas partes; están en el gobierno, en los cuerpos policíacos”, dijo.
El especialista indicó que el gobierno de Mancera debe dar resultados pronto, pero no a partir de amenazar a sus gabinete, sino de invertir recursos en laboratorios de genética, antropólogos forenses, equipos de búsqueda especializados y en capacitación de los Agentes del Ministerio Público.
José Antonio Ibáñez opinó que el Jefe de Gobierno capitalino enfrentó con lentitud el caso de los desaparecidos y la ejecución del gimnasio de Tepito.
“Considero que Mancera empezó como cochi viejo, fue tomando velocidad y se fue ajustando, pero ya va tomando el paso. El DF necesita un Jefe de Estado y creo que Mancera inició como un procurador”, finalizó.
