Para Concepcion Calvillo Alonso viuda de Nava.

 

Cómo cuidar la luz

del paisaje

que habitamos;

en la batalla diaria

por inventar la realidad.

Este frenesí que descalabra

la mínima

pretensión

de prudencia;

el tiempo succionado

del día a día.

La pérdida de la estancia,

del paso,

que dimos

para estar aquí.

La ausencia de esa memoria,

el olvido perenne

de nuestro lugar.

Se trata

de saber tocar la eternidad,

cuando los años,

desde el inicio de toda cuenta

son unos cuantos segundos:

las últimas gotas

• de oro ciertamente

que conservan

lo impredecible del mañana –

la lluvia torrencial

que se retira y abandona

su colección de espejos de agua;

esos ayeres sumergidos,

parpadeante lámpara

de las velas rotas de los sueños.

La vigilia que apunta

al centro del corazón;

su espiral

que desmenuza

anhelos y dolores,

el absorto estar sin más:

el llamado fuego interior.

La fertilidad ígnea,

el ancla del alma:

donde no hay triunfo

ni derrota,

solo la conciencia.

La sucesión de instantes

que son el velo de la eternidad.

Comparto la siguiente propuesta que subraya el ejemplar valor de una mujer que, a sus 105 años, inspira con su lucidez, su extraordinario carácter resumido en su consejo, que repite como un mantra, alumbrando el camino: no rendirse. Gracias Conchita por ser quien eres.

Medalla Belisario Domínguez 2022

Concepción Calvillo Alonso viuda de Nava

A punto de cumplir 105 años de vida (Noviembre de 1917), Concepción Calvillo Alonso, viuda del Doctor Salvador Nava Martínez, con una lucidez y fortaleza envidiables, no ha dejado de ser una fuente de inspiración y ejemplo de congruencia para su comunidad por su participación activa en la vida política, su compromiso con las causas sociales, su continua lucha por la democracia, la defensa de la dignidad de las personas y su desinteresado servicio a favor de los demás.

 

No te rindas, es su consejo con el que resume su experiencia de vida. Desde aquellos difíciles y dolorosos años de persecución, encarcelamiento y tortura que experimentó la población potosina cuando dio sus primeras batallas democráticas en las décadas de los 50s y 60s del siglo pasado.

Desde 1958, junto a su esposo y compañero de vida y lucha, Salvador Nava Martínez, se convirtió en un referente del levantamiento cívico que desmontó el cacicazgo en San Luis Potosí e inició la modernización política en la entidad potosina. Su participación decidida en la promoción del voto de las mujeres, la exigencia de procesos electorales limpios y la defensa de los resultados electorales junto a miles de potosinos dejó una huella imborrable en la memoria colectiva como dechado de resistencia civil pacífica. Ahí están esas imágenes donde exige el respeto a la voluntad popular expresada en la libertad de votar, ante la presencia militar y la imposición autoritaria.

Siempre que la amenaza del autoritarismo, la corrupción, la violencia y la gestación de un cacicazgo se ha posado sobre San Luis Potosí, Concepción Calvillo ha acompañado a quienes se organizan para combatirlos. Durante los años 1961-1967 (de la represión gubernamental local) trabajó con grupos de mujeres en diversas colonias de la ciudad y municipios cercanos mediante la Asociación Civil Fomento de Bienestar Social en varios programas de desarrollo social y comunitario.

En la década de los 80s, la exigencia de ciudadanizar los organismos electorales recobró nueva fuerza y la figura de Concepción Calvillo fue fundamental para alcanzar este fin y la reorganización del movimiento navista que, a través del Frente Cívico Potosino (FCP), llevó al Doctor Salvador Nava Martínez a convertirse en presidente municipal de San Luis Potosí por segunda ocasión en los años de 1983-1985. Gracias a su sentido social, producto del contacto honesto y cercano con la ciudadanía –que aún mantiene- durante su gestión al frente del DIF municipal se materializaron programas sociales, se conformaron cooperativas en las colonias, se ofertó por primera vez la educación preescolar de manera gratuita, se benefició a madres trabajadoras con guarderías, se implementaron desayunos escolares y se impulsó la promoción cultural.

En 1991, luego de un proceso electoral por la gubernatura del estado plagado de irregularidades, el Doctor Salvador Nava Martínez encabezó la «Marcha de la Dignidad», una caminata hacia la Ciudad de México con el propósito de denunciar el fraude electoral y exigir que se respetara la voluntad de la ciudadanía.

Mientras tanto, Concepción Calvillo, junto a cientos de mujeres, en un acto de resistencia civil pacífica sin precedentes en el estado, se apostaron frente a las puertas del Palacio de Gobierno para impedir el ingreso del gobernador designado por el viejo régimen quien, gracias a la decidida defensa de la democracia de miles de potosinas y potosinos, luego de catorce días en el cargo, se vio obligado a renunciar y fue sustituido por un gobernador interino. Hecho que marcó la historia de la lucha por la democracia en el país y dio paso a la Asamblea Democrática por el Sufragio Efectivo y a la conformación a nivel nacional del Movimiento Ciudadano por la Democracia (MCD).

En mayo de 1992 el Doctor Salvador Nava Martínez falleció y el movimiento navista se reagrupó en torno a Concepción Calvillo quien continuó exigiendo la ciudadanización de los organismos electorales e impulsando su formalización alejada de los intereses gubernamentales en turno. A través del Frente Antireeleccionista Nacional, el cual se conformó ante la creciente preocupación de

los intentos reeleccionistas a nivel federal y local que se dieron en los primeros años de la década de los 90s, se logró generar conciencia y un movimiento que impidió esa pretensión. En 1993 fue candidata al gobierno del estado de San Luis Potosí.

“A mis 104 años, la Patria me importa”

Esta nueva lucha por la democracia logró materializar una de sus principales exigencias: la ciudadanización y autonomía de los organismos electorales con la conformación del Consejo Estatal Electoral y de Participación Ciudadana (Ceepac) en San Luis Potosí, convirtiéndose en el primer organismo ciudadano en el país que, a su vez, dio paso a la creación de organismos homólogos en todos los estados de la República y dio vida al Instituto Federal Electoral (IFE), hoy llamado Instituto Nacional Electoral (INE).

Por distinguir en Concepción Calvillo a una luchadora incansable con sobrada solvencia moral y capacidad para escuchar y reconocer el valor de los otros, el entonces obispo emérito de San Cristóbal de las Casas, Samuel Ruiz García, la propuso para integrarse como interlocutora válida en la Comisión Nacional de Intermediación (CONAI) creada para mediar en el conflicto luego de la insurrección del Ejército Zapatista de Liberación Nacional en Chiapas en 1994. Concepción Calvillo participó junto a Juanita García Robles, Luis Villoro, Eraclio Zepeda, Pablo González Casanova, entre otros, en las mesas de diálogo de las que derivaron los Acuerdos de San Andrés Larráinzar en los que se establecieron compromisos con las comunidades y pueblos indígenas para la defensa de su cultura y sus derechos.

En el año 2011 recibió y acogió en San Luis Potosí a la Caravana del Consuelo en solidaridad con las miles de víctimas de la violencia en el país. Nueve años después refrendó su acompañamiento a esa larga lucha del Movimineto de Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) cuando envió una carta de apoyo a la marcha que emprendió el MPJD de la Ciudad de Cuernavaca al Palacio Nacional en la Ciudad de México, para impulsar la agenda de Justicia Transicional que el Gobierno comprometió implementar.

Desde hace años, ha mantenido una participación destacada en movimientos tales como la clausura del Confinamiento de Residuos Tóxicos de Guadalcazar, S.L.P y la defensa del Cerro de San Pedro en contra de la empresa transnacional Minera San Xavier, demostrando un verdadero compromiso con la defensa del medio ambiente y la ecología.

Conchita, cómo es popularmente conocida, inquebrantable y prudente a la vez, no ha dejado de escuchar a las mujeres de los barrios de su querido San Luis que cada semana conversan con ella, como lo hacen jóvenes, familiares, y diversas amistades que aprecian su decir anclado en la experiencia de vida de una mujer que ha vivido en carne propia los dolores y alegrías de un país que busca su destino sin traicionarse a sí mismo. Madre de cinco hijos y una hija, abuela de 18 nietos y con 36 bisnietos, sigue siendo el pilar indiscutible, ejemplo y base de su familia.

Conchita es un referente para quienes creen firmemente que San Luis Potosí, que México, deben ser la tierra de la dignidad ciudadana y de la democracia en su sentido pleno.

Es por ello que, cómo organizaciones de la sociedad civil, y ciudadanas y ciudadanos comprometidos con nuestro entorno y con las mejores causas de México, proponemos a la señora Concepcion Calvillo Alonso viuda de Nava como candidata a recibir la Medalla Belisario Domínguez que otorga el Senado de la República a ciudadanas y ciudadanos ejemplares y de gran valor para nuestro querido México.

“Ojalá que en la política nunca se olvide la palabra amor. Gracias a los que se atreven a seguir luchando por la dignidad.” Discurso en el 30 Aniversario luctuoso del Dr. Salvador Nava Martínez, 18 de mayo de 2022.

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