En un discurso ante un gran número de sus seguidores en la ciudad de Al Yanina, capital de la provincia de Darfur del Oeste y fronteriza con Chad, el mandatario añadió que quiere que “Darfur se convierta en una tierra de convivencia pacífica”.

Además, se comprometió a transformar las cinco provincias de esta región conflictiva en una zona libre de rebelión y de los conflictos tribales.

“Después de establecer la seguridad, no queremos desplazados ni refugiados. Queremos que vuelvan a sus zonas para que vivan como ciudadanos de primera clase”, añadió.

Asimismo, elogió el éxito las fuerzas conjuntas desplegadas en la frontera entre su país y Chad para evitar que los rebeldes se infiltren en el país.

El mes pasado, el gobernante Partido del Congreso Nacional presentó oficialmente ante la comisión electoral a Al Bashir como su candidato para las elecciones presidenciales que se celebrarán los próximos días 13, 14 y 15 de abril, al mismo tiempo que los comicios legislativos.

El pasado 19 de febrero, la Oficina para Asuntos Humanitarios de la ONU en Sudán informó de que más de 40.000 civiles huyeron de sus casas desde finales de diciembre de 2014 por los choques entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes en Darfur.

Está región es escenario de un conflicto entre movimientos rebeldes y el Ejército sudanés que ha causado más de 300.000 muertos y ha obligado a 2.700.000 personas a abandonar sus comunidades de origen, según datos de la ONU.

Además, el pasado domingo, Al Bashir también prometió que, si renueva su mandato presidencial, llevará la paz a las regiones conflictivas de Kordofán del Sur y Nilo Azul, donde fuerzas gubernamentales y rebeldes se enfrentan desde hace tres años. EFE