A diferencia de OHL, escándalos de corrupción no merman acciones de Grupo México

10/06/2015 - 12:03 am
Las acciones de Grupo México en la BMV no se han visto afectadas por los escándalos de corrupción en España, ni por las protestas en Perú en su contra. Foto: EFE
Las acciones de Grupo México en la BMV no se han visto afectadas por los escándalos de corrupción en España, ni por las protestas de trabajadores mineros en Perú. Foto: EFE

Ciudad de México, 10 de junio (SinEmbargo).– El escándalo de corrupción que involucró a altos ejecutivos de la empresa española OHL y a funcionarios del Estado de México le costó en 25 días de mayo pasado pérdidas de hasta 50 por ciento en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) y de hasta 33 por ciento en la Bolsa de Madrid. Sin embargo, Grupo México, que actualmente está acusado de sobornos en la Península Ibérica por supuestos sobornos para conseguir permisos de operación y, además, mantiene un violento conflicto laboral en una de sus subsidiarias en Perú, que ya ha originado muertos, no ha tenido ninguna afectación en el valor de sus acciones.

El consorcio español OHL ha resentido en su país los señalamientos por presuntos sobornos a magistrados y políticos del Edomex, que protagonizó su filial mexicana. Desde el pasado 7 de mayo y hasta el 2 de junio, la cotización de las acciones de la filial de la firma –OHL México– habían caído en la Bolsa de Madrid un 33 por ciento. Mientras, la controladora OHL registró un 16.6 por ciento de retroceso, también en el mercado español.

El año pasado, luego del derrame de ácidos registrado el 6 de agosto en los ríos Sonora y Bacanuchi, provenientes de la mina Buenavista del Cobre, y ante la presión de la sociedad civil porque se le retirara esa concesión, Grupo México registró las únicas bajas en la comercialización de sus acciones, pero no al nivel que OHL ha alcanzado en España hasta el momento.

Gerardo Esquivel Hernández, académico del Colegio de México (Colmex), consideró que las acciones de OHL han sufrido pérdidas significativas debido a que “México es muy importante, así como el flujo de efectivo que se genera aquí. Por eso se volvió muy significativo [en España], porque éste es un lugar específico en el mundo donde tiene una gran cantidad de actividades. Aunado a que el caso [en México] va más allá de acusaciones, aquí salió una grabación donde funcionarios de la empresa estaban prácticamente confesando la acción ilegal. Mientras que en España [Grupo México] está esperando a ver qué pasa, qué procede”.

El maestro Oliver Ambía, director del Departamento del Finanzas del Tecnológico de Monterrey, campus Santa Fe, coincidió en que las acciones de OHL han registrado casi el 50 por ciento de minusvalía. Sin embargo consideró que mientras el caso no llegue a un tribunal, y no afecte la oportunidad de que la empresa siga operando sus concesiones, “no hay una razón financiera para poder justificar las pérdidas”.

Recordó que dos de los riesgos que pueden afectar a las empresas se refieren tanto al futuro de sus concesiones, luego de casos como lo sucedido en el Río Sonora en agosto de 2014, como por su reputación o riesgo moral. Comentó que en el caso de Grupo México, con lo que está sucediendo en España, no ha existido ese riesgo hasta ahora.

PÉRDIDAS EN ESPAÑA

El Diario.es reportó que OHL vio reducida su capitalización, durante el periodo del 7 mayo al 2 de junio, en unos 335 millones de euros. Destacó además que el panorama más adverso para los accionistas es que la tendencia a la baja de la firma se encuentra en el nivel más alto de su historia.

Incluso, al inicio de esta semana, los analistas españoles especularon que durante la reunión del Comité Asesor Técnico de la Bolsa de Madrid sacarían a OHL del Ibex 35 –el principal índice bursátil de referencia del mercado de valores español–, conformado por las 35 firmas con mayor liquidez.

Sin embargo, ayer luego de la reunión donde se anunciaron las dos empresas que fueron retiradas del indicador, también se conoció que la firma constructora continuaría en ese grupo sin ser castigada.

El medio digital detalló también que las acciones de OHL se encuentra en manos de especuladores quienes las venden cuando empiezan a bajar, y luego esperan a que el precio caiga aún más para comprarlas de nuevo y ganar con la diferencia. A principios de junio, casi un 25 por ciento de los títulos de OHL que no pertenecen a grandes accionistas estaban en manos de estos especuladores.

El pasado viernes, los títulos de OHL cerraron la jornada con una ganancia del 2.14 por ciento. Pero de nuevo, ayer, registraron un retroceso del 1.20 por ciento. Lo que significa que se comercializaron en 15.99 euros por título. Cuando hace un año, en junio de 2014, se comercializaban en poco más de 30 euros. Incluso su nivel más alto fue de 34.16 euros, el 18 de junio del año pasado. En 2015, la ganancia más alta la registró el 22 de febrero, cuando sus acciones se comercializaron en 24.80 euros cada una.

El 4 de mayo, tres días antes de que se dieran a conocer los primeros audios de conversaciones telefónicas entre directivos de OHL México y Apolinar Mena, hoy ex Secretario de Comunicaciones del Gobierno del Estado de México, en los que se exhibió un presunto caso de corrupción para inflar los precios de un tramo de una autopista de esa entidad mexicana, las acciones de OHL se comercializaban la bolsa madrileña en 20.17 euros. Mientras que el 7 de mayo, día en que se revelaron los videos, las acciones cerraron en 18.80 euros.

Hasta ahora, esa caída no ha cesado.

GRUPO MÉXICO SE MANTIENE ESTABLE

Pero a diferencia de OHL, en México los escándalos de corrupción no mermaron las acciones del consorcio minero propiedad del segundo hombre más rico del país, Germán Larrea Mota, en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), luego de que desde España se dieran a conocer acusaciones en su contra por “cohecho, tráfico de influencias y negociación ilegal”. Tampoco se han visto afectadas por su proyecto Tía María, en Perú, que ha convertido a la comunidad de Arequipa en una zona de disturbios que se han extendido a otras regiones del país hasta llegar a Lima, la capital. Estos disturbios ya han cobrado la vida de cuatro personas, mientras que se reportan decenas de heridos.

En Europa, el pasado 13 de mayo, la magistrada española Patricia Fernández ordenó suspender una concesión otorgada al consorcio formado por la mexicana Grupo México y la española Minorbis (filial de Magtel) ante una denuncia interpuesta por Emerita Resources, la otra empresa que concursó por la mina de Aználcollar, en Sevilla.

Fernández detalló que el consorcio no cumplía ni uno solo de los requisitos establecidos en el procedimiento de concesión “y, a pesar de eso, la Junta de Andalucía le otorgó el 16 de marzo los derechos de explotación de la mina por un periodo de 30 años”.

Luego del conflicto en España, las acciones de Grupo México en la BMV se posicionaron como las más negociadas. Sin embargo, la cotización se mantuvo en números rojos al cierre de la jornada del viernes 15 de mayo, cuando sus acciones se vendían en 49.80 pesos.

El 19 de mayo, el diario El Mundo dio a conocer que el Gobierno de Andalucía adjudicó los derechos de explotación de la mina de Aznalcóllar al grupo empresarial, a pesar de que en el proyecto ganador podía haber documentos falsificados, en concreto, los escritos con los que la adjudicataria acreditó su alianza con la multinacional mexicana que debía aportar la experiencia y la capacidad de la que la empresa española carece.

El pasado lunes, el mismo diario reveló que Grupo México dio a Grupo Magtel alrededor de un millón de euros para que interviniera a su favor en el concurso de adjudicación de la mina. De acuerdo con un documento en posesión del diario español, Grupo México pagó a Magtel por sus servicios en el concurso minero con acciones de la Minera Los Frailes.

Allá, se investiga a la firma Magnatel, especializado en infraestructura eléctrica y ferroviaria, telecomunicaciones y edificación, por tráfico de influencias con la Junta de Andalucía.

En Perú, el proyecto Tía María que Southern Copper, filial de Grupo México, planea construir al sur de ese país, ha desatado un conflicto desde el pasado 23 de marzo que hasta ahora ha dejado al menos 4 personas muertas y más de un centenar de heridos.

Los pobladores de Islay, dedicados básicamente a la agricultura, se oponen a que Southern Perú Cooper Corporation explote una mina cuprífera, por los daños ambientales que puede causar en las aguas de la zona.

El pasado 12 de mayo, las autoridades peruanas anunciaron que rompieron las conversaciones con la minera y exigieron que Germán Larrea se presentara en Lima para explicar las denuncias por extorsión a líderes opositores al proyecto Tía María. Mientras, el pasado 29 mayo una de las varios protestas que se han realizado en contra del consorcio minero, terminó en un choque entre manifestantes y policías en el centro de Lima.

Incluso en México, el 2 de junio mineros de la Sección 65 del Sindicato Minero, y pobladores de las comunidades aledañas al Río Sonora bloquearon las entradas a la mina Buenavista del Cobre, propiedad de Grupo México, y responsable del derrame de tóxicos en agosto de 2014 en ese afluente. Ese día, las acciones de Grupo México ganaron un 1.25 por ciento.

En este contexto nacional e internacional, las acciones del emporio de Germán Larrea no se han visto afectadas en México.

Incluso un día después del anuncio de presuntos sobornos en España, Grupo México cerró la jornada en la BMV con un alza de 0.8 por ciento. Sus títulos se comercializaron 47.23 pesos, y tocaron un máximo a lo largo del día de 47.65 pesos. El año pasado, se comercializaban en unos 42.82 pesos.

En los últimos meses, la empresa ha registrado un comportamiento estable, pues pese a que ha registrado días con pérdidas, como el pasado 18 de mayo, cuando cerró la jornada con una baja de 0.64 por ciento, no ha alcanzado niveles preocupantes.

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