Ciudad de México, 12 de mayo (SinEmbargo).- Por cuestiones de programación o por error, ciertos productos tecnológicos no se encuentran disponibles para todo público. Sin embargo, aunque en ocasiones esta limitación responde a cuestiones legales, la verdad es que muchas otras veces se trata de caprichos incomprensibles de las compañías. Actualmente existen dos ejemplos claros de esto, y Nintendo y Microsoft son los protagonistas.
Nintendo en particular dejó en claro que no incluiría el matrimonio homosexual en su “simulador de vida” Tomodachi Life, algo que habla mal de una compañía que atraviesa por una pesadilla de ventas protagonizada por WiiU.
Después de un comunicado de prensa que empeoró las cosas, en donde aclararon que no usarían sus juegos como plataforma de un comentario social, la compañía publicó está mañana en su sitio oficial el por qué no darán seguimiento al matrimonio (virtual) homosexual, publicó el sitio The Lazercast.
“Nos disculpamos por decepcionar a tantas personas al no incluir relaciones entre personas del mismo sexo en Tomodachi Life. Desafortunadamente, no es posible para nosotros cambiar el diseño del juego, y un cambio en el desarrollo tan importante no se puede lograr con un parche posterior al lanzamiento” publicó la compañía nipona para justificarse, aunque no por ello silenció las críticas.
Por su parte, Nintendo prometió arreglar la situación en un futuro. Sin embargo, en las redes sociales surgió una fuerte campaña bajo la etiqueta #Miiquality para que el gigante del entretenimiento digital sea más incluyente.
“Nos comprometemos a que si creamos una nueva entrega de la serie Tomodachi, nos esforzaremos para diseñar una experiencia de juego más inclusiva desde el principio, y que represente mejor a todos los jugadores”, agregó la empresa en el comunicado.
Para los fans de Nintendo fue bueno saber que la compañía se ahorró el discurso de relaciones publicas y respondió con sinceridad. Sin embargo, el episodio sirvió como recordatorio de que esta compañía siempre ha sido catalogado como caprichosa por parte de aquellos que no comulgan con su concepto de compañía dedicada al “entretenimiento familiar”.
CORTANA NO HABLA CON NIÑOS
En otra variante selectiva también se encuentra el caso de Microsoft, que hace poco más de un mes anunció que su nuevo teléfono contaría con Cortana como su asistente digital.
Sin embargo, a pesar de la expectativa que levanyó este nuevo gadget, lo cierto es que en este momento se encuentra en fase beta de su desarrollo y no puede hablar con nadie menor de 13 años. Lo que provocó algunos cuestionamientos, incluso algunos disparatados.
No obstante, la verdadera razón es que Cortana está diseñada para recopilar información y de esta manera brindar un sevicio y atencion personalizado a los usuarios. Esta información recopilada se manda a Microsoft por lo que entra bajo COPPA (Children´s Online Privacy Protection Act).
COPPA se encarga de limitar la información que los niños pueden compartir en Internet o la información que pueda ser recopilada de ellos sin permiso de sus padres. En pocas palabras es para evitar la violación de COPPA y una posible demanda.
Hasta ahora Cortana no tiene los controles parentales necesarios, y se encuentra todavía en fase beta así que Microsoft tiene tiempo para poder resolver todos los problemas que encuentre.
