En el marco del Día Internacional de Reducción de Desastres, el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon, sostuvo que el conocimiento tradicional e indígena es la base de información más crucial para muchas sociedades que tratan de adaptarse a los fenómenos climáticos perturbadores.

“Reconozcamos los esfuerzos de las comunidades, grandes y pequeñas, que ponen su sabiduría para usar en la reducción del riesgo de desastres y en compartir sus ´conocimientos para la vida´”, señaló Ban en una declaración.

El Secretario General de la ONU recordó haberse reunido en marzo pasado con el Presidente de Vanuatu, Baldwin Lonsdale, el mismo día que la isla fue devastada por el ciclón Pam, una de las tormentas más fuertes que jamás haya azotado el Pacífico.

“La fuerza de la tormenta generó expectativas de que habría una gran pérdida de vidas. Afortunadamente, ese no fue el caso. Una de las razones fueron los refugios contra ciclones construidos en el estilo tradicional con materiales locales, los que salvaron muchas vidas”, añadió.

Asimismo destacó que en el caso de Camerún, el conocimiento local de baja tecnología heredado de generación en generación ayuda a los agricultores a lidiar con la sequía remojando las semillas de maíz y frijol antes de la siembra.

Como ejemplo adicional, mencionó que en la región del Ártico, se depende en gran medida del conocimiento local de los pueblos indígenas para comprender los impactos del cambio climático.

“Los cambios que afectan a la disponibilidad de fuentes de alimentos tradicionales destacan el reto que el cambio climático presenta para toda la humanidad, no sólo a las personas que viven en el Ártico”, indicó.

Asimismo señaló que el conocimiento local de los impactos de la urbanización, del crecimiento demográfico, del deterioro del ecosistema y de las emisiones de gases de efecto invernadero es importante en una época en que cada vez más los desastres están relacionados con el clima.