Jerusalén, 16 Sep (Notimex).- La devastada Franja de Gaza ahora afronta la falta de electricidad a raíz de la última ofensiva israelí contra el enclave costero, que costó la vida a dos mil 100 palestinos y otros 11 mil resultaron heridos.
La crisis energética se agravó en Gaza después que la única central que proporciona electricidad en el territorio palestino se quedó fuera de servicio por un ataque israelí a finales de julio.
Según las autoridades palestinas la región densamente poblada de Gaza está sin electricidad durante 18 horas al día, lo que pone a las personas en dificultad constante, reportó el canal iraní de noticias Press TV.
Los residentes Gaza señalan que de las pocas horas que tienen electricidad el servicio no es estable, lo que daña su vida y sus negocios.
Durante la reciente ofensiva israelí contra Hamás que se prolongó por 50 días antes de la tregua pactada entre el Movimiento de Resistencia Islámico e Israel, los trabajadores de la compañía eléctrica de Gaza pusieron en riesgo sus vidas para reparar las líneas eléctricas.
“Hemos perdido a muchos de nuestros compañeros mientras estábamos arreglando lo que el ejército israelí destruyó durante la invasión y ataques aéreos”, señaló un trabajador.
Mientras tanto, la gente en Gaza dice que las fuerzas israelíes destruyeron deliberadamente las líneas eléctricas y la infraestructura deteriorando la situación humanitaria durante y después de la guerra.
Israel comenzó su ofensiva el 8 de julio y las partes acordaron el 26 de agosto una tregua bajo la mediación de Egipto.
Según el Consejo Económico Palestino el costo de la reconstrucción ascenderá a mil 800 millones de dólares.
Según Naciones Unidas, durante la guerra quedaron destruidas unas 17 mil casas, afectando a unas 100 mil personas, además de 141 escuelas, 29 hospitales, decenas de fábricas y vastas extensiones de tierras cultivadas.
