Ciudad de México, 17 de agosto (SinEmbargo).- Mario Armando Ramírez Treviño, alias “El Pelón” o “X-20”, líder del Cártel del Golfo, fue detenido cerca de las 10:00 de la mañana en un operativo conjunto entre la Marina y militares en Río Bravo, Tamaulipas, el Ejército verifica la identidad del capturado.
Según las primeras versiones, el hombre fue arrestado en un puesto de control vehícular cuando viajaba en posesión de armas de fuego, en una donde acción participaron elementos en tierra, apoyados por más de 10 helicópteros de la Marina y del Ejército.
A la par se inició una movilización militar en los municipios de Reynosa, Matamoros y Río Bravo, en Tamaulipas, para evitar reacciones de la delincuencia organizada, de acuerdo con Milenio.
Ramírez Treviño asumió el liderazgo del grupo delictivo luego de que Eduardo Costilla, alias “El Coss”, fuera capturado en septiembre del 2012 y será trasladado a la Ciudad de México para ser interrogado; se espera que este domingo sea presentado por las autoridades.
QUIÉN ES EL “X-20”
En el año 2000, Ramírez Treviño trabajaba como un hombre cercano a Jaime González Durán (alias “El Hummer”), uno de los fundadores de Los Zetas, otra organización criminal mexicana con base en el norte del país.
En el 2008, éste fue arrestado y sentenciado a 35 años en prisión. Dos años más tarde, Los Zetas, quienes fungían como el brazo armado del Cártel del Golfo, consiguieron su independencia, causando una guerra entre ambos bandos.
Ramírez Treviño, sin embargo, se mantuvo en las filas del Cártel del Golfo. Bajo el mando de Samuel Flores Borrego (alias El Metro 3), trabajó como el segundo del cártel en la ciudad de Reynosa, Tamaulipas. Tras una aparente traición dentro de la organización, Flores Borrego fue asesinado en septiembre de 2011 y Ramírez Treviño retomó su lugar en Reynosa.
Con la muerte de su jefe, varios integrantes dentro del Cártel del Golfo se declararon la guerra. Para finales del 2012, las Fuerzas Armadas arrestaron a Mario Cárdenas Guillén y a Jorge Eduardo Costilla Sánchez, dos de los líderes más poderosos del cártel en su momento.
Tras sus ausencias, Ramírez Treviño mandó asesinar a El Metro 4, Miguel “El Gringo” Villarreal, y otros líderes de la organización que se oponían a su liderato, convirtiéndose así el líder máximo del Cártel del Golfo.
La Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA) ofrecía hasta 5 millones de dólares en recompensa por la captura de Ramírez Treviño, mientras que la PGR ofertaba hasta 40 millones de pesos por él.
