Especialistas en desigualdad resaltaron que la corrupción reduce las oportunidades para salir de la pobreza a 55.3 millones de personas. ¿Cómo se produce este impacto?
Ciudad de México, 21 de abril (SinEmbargo).- La corrupción reduce las posibilidades de cada ciudadano para mejorar su calidad de vida, apuntaron expertos del Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY). Esta práctica impacta en la salud, educación y protección social, pilares necesarios para romper con la pobreza.
“Es como un gran nube que se mete en todos los rincones, una bruma maloliente. Todos estamos necesitados de resolver este tema”, dijo Enrique Cárdenas, director del CEEY, quien también forma partes de los ciudadanos dentro de las discusiones del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) que se realizan en el Senado.
El director apuntó que la corrupción es un impedimento para la movilidad social, un concepto que engloba la capacidad de los ciudadanos para tener bienestar económico sin importar el estrato social en el que nacieron, altera los servicios básicos.
“La corrupción afecta lo que necesitas para entrar a una buena escuela. Los recursos se están desviando cuando deberían de ir a mejorarlas”, dijo a SinEmbargo.
Esto, sumado a las condiciones de pobreza que los padres heredan a sus hijos, termina por reducir las oportunidades de salir de la precariedad, expone el CEEY.
“Los niños entre los 6 y 12 años que vienen de hogares en pobreza enfrentan situaciones de muy mala calidad educativa. Entran sin un sistema público con las condiciones que esperaríamos. No hay maestros que hayan tenido las mejores calificaciones en las pruebas”, expuso Rodolfo de la Torre García, director del Programa de Desarrollo Social con Equidad de la institución.
Otros datos de la Encuesta de Movilidad Social 2011 arrojan que en México el 49 por ciento de los niños entre tres y cinco años provenientes de familias en pobreza extrema no asisten a la escuela. Y a la edad de 15 y 19 años, este porcentaje aumenta a 60 por ciento.
El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) refirió en el 2014 que el número de mexicanos en pobreza extrema es de 11.4 millones.
Por otra parte, el acceso a la salud también se hereda en México. Un análisis del centro que dividió los estratos económicos en cinco niveles encontró que el 79 por ciento de las personas en el quintil más pobre no cuentan con servicio médico. En tanto, en el más rico, sólo el 39 por ciento carecía de este servicio.
CORRUPCIÓN FISCAL
De acuerdo con el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO), la corrupción le cuesta 165 pesos al día a cada mexicano, especialmente en sobornos y acceso a servicios básicos. Estos últimos podrían ser mejores de no ser por la corrupción que afecta las iniciativas de recaudación fiscal, dijo Cárdenas.
“Vemos que juega un papel importante. Si no se resuelve este tema seguirá afectando la forma en que se impone la base gravable, la gente dice ‘cómo me vas a cobrar impuestos si todo se lo van a robar'”, añadió.
México es uno de los 34 países que conforman la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) con menor recaudación fiscal, con un porcentaje de 10.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
En el país hay 30 millones de personas que laboran en la informalidad, según Eduardo Osuna director de BBVA Bancomer, quien dio una conferencia reciente sobre los obstáculos para el acceso al crédito.
Cárdenas refirió que una base gravable reducida es señal de pocas personas con servicios de protección social: “Lo que debe haber es una política de la Hacienda Pública que tiene que ser equitativa. Yo no veo cómo se vaya a resolver si no se amplía la base gravable por ejemplo. Y no necesariamente los más pobres están en el sector informal”.
Marcelo Delajera, director del Programa de Crecimiento Económico y Mercado Laboral del CEEY sostuvo que hasta ahora la administración del Presidente Enrique Peña Nieto ha carecido de incentivos que libren a los ciudadanos de la informalidad y en cambio sí se ha centrado en programas sociales.
“En vez de mejorar la protección social, se empezaron a dar estos programas y resulta que la informalidad no decrece. Entonces se generan estas desigualdades enormes en términos de salud y educación, que no terminan de solucionarse porque estas familias están asociadas a la desigualdad”, opinó.
El último informe del Coneval [El Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social] detalló el año pasado que los pobres en México aumentaron al pasar de 53.3 millones en 2012 a 55.3 millones en 2014: situación que se agrava con las gestiones del Gobierno refirieron los expertos del CEEY.
De acuerdo con el Banco de México (Banxico), en el 2015 la corrupción le costó a México el 9 por ciento del PIB. En su exposición los especialistas recomendaron a las autoridades: “Que eliminen los sesgos en la impartición de justicia y la discriminación, y que permitan al Estado contar con un financiamiento sostenible y equitativo para brindar sus servicios de manera eficaz y sin corrupción”.
MALA ADMINISTRACIÓN
Además de la corrupción, la administración del Presidente Enrique Peña Nieto se ha visto incapaz de hacer una administración del gasto con sentido humano, apuntaron los expertos del CEEY.
“Sin duda pensamos que el gasto está creciendo y no se está destinando de la mejor manera. Vemos unas políticas que tratan de mejorar la economía, y otras que incentivas la informalidad. El destino nos alcanzó en el tema del petróleo, y del gasto, sobre todo los pasivos laborales de Pemex y del Seguro Social””, dijo Cárdenas.
El pasivo laboral de Petróleos Mexicanos (Pemex) era al término del 2014 de un billón 473 mil millones de pesos. Y en octubre el Presidente Peña Nieto afirmó que el pasivo del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ascendió a los 2.8 billones de pesos.
Por otra parte, Roberto Vélez Grajales, director del Programa de Movilidad Social del CEEY, apuntó que los recortes del Gobierno, el último anunciado el 17 de febrero y por un monto de 132 mil millones de pesos, no han tenido una vocación social.
“Necesitamos una política social con enfoque de ciclo de vida, y que pase por cuestiones más macro. El tema de la deuda estatal, endeudamiento federal, así como los hogares los costos por enfermedad se heredan intergeneracionalmente”, sostuvo Vélez.
