Managua, 22 jul (dpa) – Las autoridades de Nicaragua vigilaban hoy la situación en el volcán San Cristóbal, en el noroeste del país, y no descartan que ocurran nuevas expulsiones de humo y cenizas.
Armando Saballos, vulcanólogo del Instituto de Estudios Territoriales (Ineter), dijo a la oficialista Radio Primerísima que el cono incrementó su tremor desde la noche del lunes.
El pasado sábado, el coloso de 1.745 metros de altura emanó columnas de humo y arrojó cenizas que cayeron sobre varias comunidades ubicadas en sus faldas y laderas.
Aunque las explosiones no fueron severas y el volcán regresó a la normalidad, el lunes “comenzó a incrementar su actividad”, señaló Saballos.
Explicó que el tremor volcánico (movimiento sísmico) es provocado por la salida abrupta de gases desde el cráter. Indicó que otras obstrucciones al interior del cono podrían generar más explosiones.
El especialista destacó que el Ineter mantiene vigilancia permanente sobre el volcán, en coordinación con las autoridades comunitarias, de la Defensa Civil, adscrita al Ejército, y del Sistema de Atención y Prevención de Desastres (Sinapred).
Tras las explosiones del fin de semana, el San Cristóbal lanzó arena y cenizas sobre las comarcas La Grecia, La Joya, Mocorón y Las Hamacas # 4, en las faldas del volcán, y sobre la ciudad de El Viejo, todas ubicadas en la provincia de Chinandega.
La actividad más reciente en el volcán ocurrió en febrero pasado, cuando registró una actividad sísmica moderada y expulsó cenizas en columnas de 200 metros de altura.
El San Cristóbal, situado sobre la cordillera de Los Maribios, es el volcán más alto de Nicaragua. Su primera erupción registrada fue en 1685 y la última en diciembre de 2012, con fuertes emisiones de gases y cenizas.
