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Ciudad de México, 29 de mayo (SinEmbargo).- Ante la falta de transparencia en el manejo de los recursos estatales, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y el Senado acordaron el 18 de febrero de este año construir una Reforma Constitucional que regulará los niveles de endeudamiento de estados y municipios, con base en una consulta con gobernadores, alcaldes, bancos y expertos.
La Reforma fue aprobada por la Cámara Alta en abril, con esta legislación –que pasó a los Diputados– los gobiernos estatales no podrán contratar deuda seis meses antes de cambiar de administración.
Además, genera una serie de candados a nivel local y federal para evitar corruptelas o que alcaldes y gobernadores “hereden” compromisos a las nuevas administraciones, según explicó el presidente de la Comisión de Puntos Constitucionales, el priista Raúl Cervantes.
Los gobernadores emanados de la izquierda, tampoco están exentos de escándalos y sospechas de manejos poco transparentes durante sus gestiones. El Distrito Federal, después de 18 años en manos de jefes de gobierno emanados del Partido de la Revolución Democrática (PRD), es la entidad más endeudada del país.
Mientras que Chiapas y Michoacán también son objeto de los excesos y endeudamientos de sus ex gobernantes.
LA SALA DE JUEGOS DE SABINES
Hijo del ex Gobernador de Chiapas Juan Sabines Gutiérrez y sobrino del escritor Jaime Sabines, Juan Sabines Guerrero llegó a la gubernatura chiapaneca en 2006, año en el que abandonó las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), después de ganar las elecciones locales abanderando a la llamada “Coalición por el Bien de Todos”, conformada por los partidos PRD, del Trabajo y Convergencia.
Durante el ultimo año de Sabines Guerrero al frente del ejecutivo estatal el escándalo de la Deuda Pública de Chiapas estaba surgiendo tras los prestamos de cuantiosas que recibió su administración.
“La deuda pública de la administración de Juan Sabines como Gobernador de Chiapas ascenderá a 40 mil millones de pesos”, publicó el diario Reforma. Es la deuda más grande en la historia del estado.
Según el “Acta de Formalización y Cierre de Auditoría” de la Secretaría de la Función Pública (SFP), cuya copia obtuvo el diario, el Gobierno de Sabines (2006-2012) habría cometido excesos superiores a mil millones de pesos.
“Otras irregularidades detectadas a la Administración de Sabines fueron pagos por trabajos en los que no se cumplieron las condiciones establecidas, deficiencias en la justificación y comprobación del gasto, mala supervisión en la calidad de los trabajos realizados que redundaron en pérdidas para el erario, retención de impuestos y otras subvenciones que no fueron reintegradas a la Tesorería de la Federación”, cita el diario.
Según el documento, se detectaron anomalías en al menos cuatro fondos y fideicomisos manejados por el estado, entre ellos, el Fondo Regional.
El 8 de abril de este año, la Procuraduría General de la República (PGR) admitió la querella interpuesta por el abogado Horacio Culebro Borrayas, contra el ex Gobernador chiapaneco y 50 de sus ex colaboradores, acusados de asociación delictuosa, delincuencia organizada, enriquecimiento ilícito, delitos cometidos por servidores públicos, tortura e incomunicación, coalición de servidores públicos, delitos contra la dignidad de las personas y fraude procesal y el endeudamiento y desfalco de 40 mil millones de pesos.
Una solicitud de transparencia hecha por un ciudadano reveló que en su último año de Gobierno, Sabines Guerrero gastó 427 millones 400 mil pesos en publicidad, 393 millones 200 mil pesos más que en 2007, cuando erogó 34 millones 200 mil pesos para promover sus acciones y proyectos.
Noticias MVS reveló en febrero pasado que su administración gastó 113 millones 462 mil pesos en la supuesta adquisición de reactivos para la detección de VIH-sida.
Según las notas de remisión número PC113-11, a las cuales tuvo acceso, el 12 de marzo de 2012 el Instituto de Salud de Chiapas recibió un pedido de una empresa llamada TopChem, descrito como “ensayo inmunoenzimático rápido para la detección cualitativa en suero y plasma de anticuerpos contra el Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH) tipos 1 y 2. Ensayo inmunoenzimático de reconocimiento dual, basado en la detección específica de anticuerpos”.
La compra fue aceptada por el ex Secretario de Salud de Chiapas, James Gómez Montes. Sin embargo, el ex funcionario justificó el millonario monto al asegurar que no sólo se adquirieron reactivos para la detección del virus, sino reactivos de laboratorio en general. Según Gómez Montes, la compra total de pruebas de detección fue de 1 millón 531 mil 498 pesos.
Pero de acuerdo con Gustavo Reyes Terán, jefe del Departamento de Investigación del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, la única descripción que figura en los recibos corresponde a pruebas rápidas para la detección del virus.
Según la cuenta pública al tercer trimestre del 2012, entregada por Sabines al Congreso local para su revisión, en el apartado de Deuda Pública se detalla que con los préstamos obtenidos con la banca comercial y de desarrollo, se remodelaron edificios gubernamentales y otros recintos públicos, así como la construcción de un área de juegos en la Casa de Gobierno –residencia oficial– por 2.4 millones de pesos.
También remodeló las instalaciones de la Feria Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez, obra que costó más de 7 millones de pesos.
Gastó 12 millones de pesos en mantenimiento, suministro y rehabilitación de sistemas de aire acondicionado, impermeabilización, red eléctrica y otros, a edificios como el Auditorio Polyfórum, teatro Emilio Rabasa, Estadio Víctor Manuel Reina, Palacio de Gobierno, Secretaria de Infraestructura, por mencionar algunos.
Sólo para el mantenimiento preventivo y correctivo a equipos de aire acondicionado en la Secretaria de Infraestructura pagó dos millones de pesos.
Para la emblemática Torre Chiapas, la cual tuvo un costo superior a los mil 100 millones de pesos, también ejerció gastos adicionales con recursos de la deuda.
UN TRANVÍA LLAMADO EBRARD
La capital del país y su ex Jefe de Gobierno, el perredista Marcelo Ebrard, no están alejados de la polémica.
Desde mediados de 2011, asambleístas del Partido Acción Nacional (PAN) advirtieron que la Ciudad de México era la entidad más endeudada del país con 52 mil 578 millones de pesos.
El grupo parlamentario del PAN denunció que la gestión arrastraba entonces un adeudo de mil 500 millones de pesos con proveedores y contratistas.
El 5 de diciembre de 2006, Ebrard Casaubón asumió la jefatura de Gobierno como abanderado del Partido de la Revolución Democrática (PRD), a decir de la oposición, cuando asumió el puesto ya tenía una deuda heredada superior a los 40 mil millones de pesos, resultado las dos administraciones anteriores también encabezadas por la izquierda.
El estudio titulado “Gasto en Comunicación Social y Publicidad en las Entidades Federativas”, realizado por el centro de Análisis e Investigación Fundar, ubicó a la capital de la República como una de las entidades que más recursos destinaron a la promoción de imagen.
Durante sus primeros cuatro años de gobierno, Marcelo Ebrard Casaubon, destinó más de mil 500 millones de pesos a gasto en publicidad e imagen pública de su administración.
En octubre de 2012, Ebrard fue nuevamente criticado por los legisladores de oposición, luego que la Comisión de Hacienda de la Asamblea Legislativa revelara que había aumentado en casi 30 mil millones de pesos el gasto corriente del Gobierno del Distrito Federal durante su sexenio y 50% de este monto (15 mil 700 millones de pesos) correspondía a la nómina del gobierno de la ciudad. 75 centavos de cada peso correspondían al pago de nómina.
Los últimos días de Marcelo Ebrard Casaubon al frente del GDF estuvieron llenos de descalabros.
El 5 de diciembre de 2012 entregó la administración a Miguel Ángel Mancera Espinosa, otro Jefe de Gobierno emanado de la izquierda, y con ella una serie de problemas como una deuda pública de 54 mil 590.6 millones de pesos, según el presidente de la Comisión de Hacienda de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, el panista Héctor Saúl Téllez.
A pesar de la austeridad que ha sido la bandera de los gobiernos de izquierda, en el Distrito Federal, en 1997, cuando llegó al poder Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, los pasivos financieros del GDF eran equivalentes a 11 mil 789 millones de pesos. Y según Téllez, durante el más reciente gobierno perredista la deuda creció 20 por ciento.
El problema de la administración de Ebrard, según el legislador blanquiazul, es el elevado gasto corriente, ya que de cada 10 pesos que se gastó, 8 pesos fueron utilizados para cubrir los gastos de operación del Gobierno. Además, hay que sumar a la cuenta obras como la Línea 12 del Metro, en la cual se invirtieron entre recursos locales y federales 24 mil 512 millones de pesos.
GODOY SALE EN SU DEFENSA EN MICHOACÁN
Leonol Godoy Rangel tomó posesión como Gobernador de Michoacán el 14 de febrero de 2008 por un periodo extraordinario de solo cuatro años. Recibió la administración de manos del también perredista Lázaro Cárdenas Batel.
Durante la gestión de Batel se realizaron cambios constitucionales en los que se acordó que existieran dos periodos cortos de cuatro años para lograr una concurrencia entre las elecciones federales y locales en 2015.
En su periodo, Godoy enfrentó de todo: la embestida del Gobierno Federal con el llamado “Michoacanozo”, el estallido de una bomba durante los festejos del Día de la Independencia en la plaza principal de Morelia, la capital, el 15 de septiembre de 2008, y la amenaza de los grupos criminales de La Familia y los Caballeros Templarios.
El 15 de febrero de 2012 entregó la administración al priista Fausto Vallejo, quien inmediatamente lo acusó de haber dejado en quiebra al estado con una deuda superior a los 38 mil millones de pesos.
En distintos foros, como el realizado el 11 de marzo de este año con el Grupo Morelos –periodistas de Michocán- Godoy ha rechazado que la deuda heredada alcance tal monto.
Se dice víctima de un linchamiento político basado en “la mentira y la calumnia”.
Expuso que él y su familia están limpios de cualquier señalamiento de posible corrupción, así como la mayoría de los funcionarios que formaron parte de su administración.
El 1 de mayo envió al Congreso de Michoacán una carta en la que expone su versión sobre la deuda del estado.
En la misiva rechaza el monto deuda que se le atribuye. “Si hubieran solicitado información de la deuda pública a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, autoridad competente en el tema, les habrían contestado lo que siempre afirmé: que en mi gobierno, la deuda pública adquirida fue de 8 mil 559.5 millones y la recibimos en 2007 con 6 mil 581.1 millones.
Junto con la carta, envió a los legisladores un anexo con documentos obtenidos de la pagina de Internet de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) donde se aprecia la evolución histórica de la deuda pública de las 32 entidades, desde 1993 a la fecha (año por año). “Verá usted que la deuda por ejemplo de Coahuila, se dijo públicamente que era de 36 mil millones. Y así lo consigna la Secretaría de Hacienda en dicha página. También observará que Michoacán nunca ha superado los 16 mil millones, sumando las deudas públicas del 2007, 2008-2011 y diciembre del 2012”.
Acusa al Gobernador con licencia, Fausto Vallejo Figueroa, quien en su Primer Informe de Gobierno, aseguró que la deuda pública más otros pasivos, sumaba 32 mil millones de pesos, de quererlo desprestigiar.
“La suma de acreedores diversos mas la deuda pública en 2011 da un pasivo total de 21 mil millones 354 mil 221 pesos. Y la suma de acreedores diversos y deuda pública en 2012 (diciembre) da un pasivo total de 23 mil millones 968 mil 677 pesos. Esta última cifra, como apreciará fácilmente, queda muy lejos de los 32 mil millones que mencionó el Gobernador en su informe, y aún más de los casi 39 mil millones que “denunciara” el ex Secretario Luis Miranda. En cambio las cifras de ambas cuentas públicas son muy similares.
El también ex Senador asegura que la supuesta megadeuda estatal ha sido un pretexto para hacerlo objeto de ataques “injuriosos” que buscan dañar su imagen y la de sus colaboradores.
“Lo reitero, trabajé 32 años continuos (del 15 de septiembre de 1980 al 31 de agosto del 2012) y no tengo empresas, ranchos o comercios, tampoco mis hijos. Nunca hice negocios, vivo de mi trabajo. El orgullo de ser de izquierda y de ser una persona honrada, nadie me lo quitará”, señaló en su misiva.
