Ciudad de México, 29 de dic (SinEmbargo).- En medio de la lucha anticrimen encabezada por la anterior administración federal, la situación en Ciudad Juárez, Chihuahua, cambió drásticamente y afectó a los más jóvenes, convirtiéndolos en individuos “potencialmente corrompidos” y “vulnerables a las adicciones”, según expertos.
De acuerdo con una investigación realizada por Martín Orquiz para El Diario, los adolescentes, de entre los 12 y 17 años, “deben enfrentar la herencia que dejó la ola criminal, que empujó a muchos al consumo de estupefacientes, a comercializarlos o a cometer otro tipo de infracción relacionada con ese fenómeno”.
Según datos estadísticos citados por el rotativo local, al menos el 25 por ciento de los adolescentes que cometen un delito lo hicieron bajo la influencia de alguna sustancia, siendo el más frecuente el robo, en un 70% de los casos.
Por su parte, Guadalupe Muñoz, del Centro Vida y Misericordia para el Enfermo con Sida, señaló que es cada vez más común observar a niños menores de 14 años que ya consumen drogas, un fenómeno generado en medio de las batallas por el control del trasiego de enervantes en la ciudad fronteriza, dice.
Muñoz indica que desde 2008 la frontera ha vivido una lucha contra los consumidores de drogas, acompañada de asesinatos casi diariamente, situación que en muchos casos llevó a los menores sobrevivientes a enrolarse en la nómina del narcomenudeo o a cometer delitos para substituir a las insuficientes oportunidades.
La experta destacó que muchos niños ven como su forma de vida el vender drogas y para ellos, esto no tiene nada de “malo” o “negativo”.
En el reporte “Factores de Riesgo del Consumo de Drogas en Jóvenes Estudiantes Residentes en una Ciudad de Alto Riesgo, El Caso de Ciudad Juárez”, realizado en el 2011 por personal de los Centros de Integración Juvenil (CIJ), se estableció la presencia de consumo de alcohol, tabaco y drogas ilícitas, incluso más altas que las reportadas por encuestas como la Nacional de Adicciones (ENA) 2008 en adolescentes entre 12 y 17 años en la ciudad.
