Revisando los datos estadísticos 2021-2022 de los casos de violencia contra la mujer, y los casos de violencia familiar, encontramos una agresión constante y en algunos casos incremento, tal como se muestra en el siguiente recuadro:

Delitos             2021      2022   Diferencia
Feminicidio    44          38          -6

Abuso sexual  1691     1,954      +263

Violación          1047      1,205   +158

Violencia         12968    13,513 +545
familiar

Violencia de        31        43        +12
género en otras
modalidades

Estos datos están tomados de informes del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.

Ahora bien, en el delito de feminicidios hay una disminución de seis durante el año, sin embargo, la cantidad de 38 feminicidios durante 2022 es una cantidad preocupante dada las características tan específicas de este delito y la forma en la cual está tipificado.

Treinta y ocho homicidios de mujeres “por el simple hecho de ser mujer” significa una verdadera tragedia para las mujeres chihuahuenses, y por lo cual yo les pregunto a mis pares varones, ¿qué grado de preocupación tendríamos si supieran que hay mujeres asesinando hombres por el solo hecho de haber nacido hombre?

En Ciudad Juárez en 2012, una mujer en dos ocasiones subió a unidades de transporte público y disparo contra los choferes que conducían  las mismas, se bajo y desapareció, bastaron dos casos para que se generará una alerta y alarma entre los hombres en la ciudad y específicamente los conductores de unidades de transporte público, los machos como siempre alardeando que bromean con la muerte querían tomar los sucesos con sorna, pero al mismo tiempo, exigían a la autoridad para que detuviera lo mas pronto posible a aquella mujer, porque los varones de repente nos sentimos vulnerables y caímos en la cuenta de que una mujer también puede disparar un arma de fuego, y hacerla a mansalva.

Al analizar los homicidios de masculinos, y aunque el número es enorme no encontramos ningún otro caso documentado en el cual una mujer haya privado de la vida a un hombre por el solo hecho de haber nacido hombre.

En este sentido agradezco al señor Antonio Piñón, del medio digital PuntoG de la Política, por haber evidenciado en su publicación la grave situación en que vive la mujer chihuahuense y haber arrojado una fuerte sospecha para investigar al Gobierno del Estado como provocador de los hechos violentos del 8 de marzo en la capital del Estado.

Cuando se propuso la reingeniería de la Fiscalía General del Estado, incorporando a la Fiscalía de la Mujer la unidad de delitos por violencia familiar, advertíamos que la Fiscalía de la mujer tiene un diseño de persecución de los delitos de alto impacto, y la unidad de violencia familiar, tiene otro diseño y otra operatividad para la persecución de los delitos.

Igualmente advertimos que la inversión millonaria en la Torre Centinela está colapsando el sistema de procuración de justicia, porque no se tienen los recursos suficientes para la operación de la Fiscalía General del Estado y la Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas por Razones de Género para enfrentar las circunstancias de violencia que están torturando a nuestro Estado.

Hemos visto que se le presupuestaron este año 945 millones de pesos para pagarle los servicios de vigilancia digital a Grupo SeguriTech, pero las torres de vigilancia que está instalando no superan un costo de 20 millones de pesos, y volvemos a preguntarnos, ¿dónde están los otros 925 millones de pesos, y para qué se le van a pagar?, ¿para hacer otra torre igual al búnker de García Luna?, una construcción inútil, que ni siquiera en la CdMx, fue necesaria.

El Estado, debe de reconsiderar la construcción de la Torre, que en el imaginario juarense se percibe como una gran cobra venenosa que se levantará para espiar a los ciudadanos y brindar informes ilegales a los vecinos de El Paso, según pacto de la Gobernadora y su homólogo de Texas.

Por respeto a las mujeres chihuahuenses, los recursos ya asignados ahí deben de aplicarse a la procuración de justicia, al fortalecimiento de las unidades de investigación y desde luego a la Fiscalía de la Mujer y a la Procuraduría de Defensa del Menor que ahí es dónde está la verdadera ausencia de recursos. Las verdaderas prioridades del Gobierno, no los negocios.

Si este Gobierno se ha declarado repetidamente defensor de los Derechos de las mujeres, debe ser congruente y unir a las palabras los recursos, los insumos necesarios, la capacitación, el apoyo real, políticas preventivas.

La violencia contra la mujer es una maldita herencia de 10 mil años de machismo y ese monstruo no se va a alejar con discursos ni con consignas, solo podremos superar la violencia contra las mujeres, jóvenes y niños atendiendo el problema con responsabilidad.

Gustavo De la Rosa

https://www.sinembargo.mx/author/delarosa

Es director del Despacho Obrero y Derechos Humanos desde 1974 y profesor investigador en educacion, de la UACJ en Ciudad Juárez.

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