Ciudad de México, 22 de octubre (SinEmbargo).- Hasta los alimentos más comunes como las manzanas y las papas, tienen entre sus variantes algunas que aportan mayores beneficios a la salud, y desde el punto de vista científico su modo de prepararse es también determinante para que conserven o pierdan sus propiedades.
Hay muchos factores que impactan la carga de nutrientes que se le pueden sacar a una comida, tales como la forma de cocinarse y maridarse, los alimentos con los que se les acompaña o hasta la flora intestinal de cada persona.
La experta en nutrición de la Clínica de Cleveland, Kristin Kirkpatrick, escribe en su blog de The Huffington Post los mejores consejos según la ciencia para preparar de la mejor forma los alimentos.
1. Té
Si quieres una alta absorción de nutrientes debes olvidarte de hacer lo que hacen los británicos, pues múltiples estudios han demostrado que agregar leche al té puede llevarse algunos de los beneficios cardiovasculares de los que provee.
¿Tomas té verde? Agrega un poco de jugo de limón en lugar de azúcar, pues la vitamina C presente en él puede ayudar a aumentar la biodisponibilidad de los nutrientes del té verde.
2. Ajo
La mejor manera de aprovechar los beneficios del ajo es triturarlo, pues investigaciones indican que hacer esto y permitir que se asiente por 10 minutos una enzima llamada alicina, la cual se ha demostrado que ayuda a reducir el riesgo de enfermedad cardiovascular al hacer las plaquetas de la sangre menos pegajosas para que fluyan con mayor libertad a través del sistema circulatorio.
3. Brócoli
El brócoli es sin duda una de las mejores comidas para alimentar tu cuerpo. Es parte de la familia brassica (un tipo de plantas) que ha demostrado ser muy eficaz en la prevención de ciertos tipos de cáncer, desde el de mama hasta el de piel, pero el modo de prepararse hace la diferencia.
Un estudio realizado en 2008 encontró que cocinarlo al vapor es el único método de cocción que conservó en su totalidad, e incluso aumentó, los componentes de lucha contra el cáncer del brócoli, mientras que freírlo era la peor manera de prepararlo.
Si aún no te convences de comerlo, puedes acompañarlo de picante, pues un estudio del 2012 indicó que añadir comida enchilosa al brócoli incrementa sus poderes contra el cáncer, y entre más pique mejor, de acuerdo con los autores.
4. Aderezos para ensalada
Los aderezos bajos en grasa parecen ser una buena idea en teoría, pero no cuando nos damos cuenta de lo que estamos sacrificando.
Varios estudios han demostrado los beneficios que la grasa tiene a la hora de vestir los alimentos verdes, como mantenerte lleno y más satisfecho después de su consumo para conseguir la absolución de nutrientes de la ensalada (específicamente de la luteína, el licopeno, beta-caroteno y zeaxantina).
5. Mostaza
La mostaza en cualquiera de sus presentaciones es un buen condimento para añadir a aderezos, ensaladas y sándwiches, pero si estás interesado en la disminución de la inflamación general, así como reducir el riesgo de ciertos tipos de cáncer, entonces es mejor mantener entre tus elecciones la mostaza simple.
La mostaza amarilla, que suele ser la más económica es también la que tiene mayores beneficios, ¿por qué? Debido a que contienen un compuesto llamado curcumina (que es el ingrediente activo de la cúrcuma) que no sólo da color amarillo a a este aderezo, si no que además le da todos sus beneficios a la salud.
6. Manzanas y Peras
Deja que tu fruta madure un poco. Un estudio encontró que el proceso de maduración permite la descomposición de la clorofila en las manzanas y peras que, a su vez, producen más antioxidantes “altamente activos” en ellas.
7. Papas
¿Crees que estás tomando los beneficios de este tubérculo cuando consumes papas a la francesa, en puré o al horno? Pues piénsalo dos veces, porque un estudio encontró que son las papas moradas las que ofrecen los mejores beneficios, como reducir la presión arterial, así como el riesgo de cáncer.
Además, en 2014, otra investigación reveló que esta variante de papas superaron a sus contrapartes de color blanco y más comunes, cuando se trata de grandes cantidades de polifenoles y disminuir el efecto sobre la respuesta global de azúcar en la sangre.
Mientras que los factores discutidos en este post tienen un impacto en las mejores maneras de consumir tus comidas, la verdad es que simplemente añadirlas a tu dieta ya es un gran paso en la dirección correcta. Una vez que le tomes el gusto a estas opciones saludables, el siguiente paso lógico sería prepararlas de la mejor manera para sacarle el máximo provecho a sus nutrientes.
