¿Deben irse los maestros de la CNTE del Distrito Federal? Escritores y periodistas responden

30/08/2013 - 12:00 am
"El ruido opaca las reivindicaciones", dice Jorge Zepeda Patterson (Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo)
“El ruido opaca las reivindicaciones”, dice Jorge Zepeda Patterson. Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo

Ciudad de México, 30 agosto (SinEmbargo).– La suspensión del ciclotón y de los partidos de futbol en la esfera metropolitana son apenas dos de los numerosos contratiempos que ha generado en la ciudad de México la manifestación de los maestros de la CNTE.

Se suma a ello la lectura del Primer Informe de Gobierno de Enrique Peña Nieto, el domingo, día en que los docentes han prometido reforzar las marchas para protestar contra la Reforma Educativa planteada por el mandatario priísta.

Más allá de los debates o la ausencia de ellos en torno a un tema específico como el de la educación, ¿deben irse los maestros del DF?

Desde el ámbito de la cultura, ¿hay un pensamiento generalizado o también conviven las opiniones encontradas?

Frente a la pregunta directa, la respuesta del periodista y escritor Jorge Zepeda Patterson también es contundente. “Sí, por supuesto”, afirma.

“Me parece que el ruido ensordecedor de lo que han provocado opaca el pedido de las reivindicaciones que desde mi punto de vista son válidas. El proyecto de la Reforma Educativa fue apresurado, puede tener buenas intenciones, pero creo que tiene varios yerros. Quizás los maestros de la CNTE han aprovechado tales yerros para tratar de incorporar su propia agenda, pero eso no quita que la ley tenga que ser revisada, enriquecida y que está lejos de haberse agotado el diálogo de los involucrados. De eso, a la violencia de la CNTE contra los ciudadanos normales hay un trecho largo, es decir, las marchas han sido violentas no tanto por la infraestructura destruida, que la ha habido, sino por la enorme lesión producida a los intereses de los ciudadanos. Millones de personas se han visto afectadas por un conflicto que es importante, pero que finalmente es gremial”, agrega el director de sinembargo.mx.

Las manifestaciones han hecho de la ciudad un caos (Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo)
Las manifestaciones han hecho de la ciudad un caos. Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo

Para el director de la Compañía Nacional del Teatro, Luis de Tavira, “lo importante es el diálogo, la discusión, exponer todos los puntos de vista, pero hay formas. No creo que a los maestros de la CNTE les esté funcionando la estrategia, frente a la opinión de la gente que es hostil a sus reclamos y que sufre toda la alteración producida por las marchas y las concentraciones. Me parece que sus adversarios políticos deben de estar felices ante el disgusto de la ciudadanía. El ruido que provocan los maestros no permite escuchar sus razones”, dice.

Guillermo Quijas, editor de Almadía y de la Proveedora Escolar, una importante empresa de Oaxaca ligada al sector estudiantil, considera que “sin cuestionar sus demandas, porque uno que no está en el movimiento desconoce cuáles son legítimas y cuáles no, las acciones que están implementando golpean de manera muy dura a la sociedad en general”.

“Los maestros de la CNTE deben irse del DF, que se ha convertido en un caos absoluto a causa de las manifestaciones”, agrega.

SOMOS MUCHOS LOS MAESTROS QUE AMAMOS NUESTRO TRABAJO

Cuenta la escritora Sandra Lorenzano, autora entre otras de la reciente novela Fuga en Mí Menor (Tusquets), que el día en  que festejaron en el Claustro Sor Juana los tres años de su programa radial En busca del tiempo perdido, una señora se le acercó para pedirle que diga que son muchos los maestros que aman su trabajo.

“No necesitan recordármelo, desde siempre amo y admiro a los maestros. Mi abuela era maestra y yo desde chiquita dije que quería serlo también. Hace más de 30 años que paso mis días dentro de un salón de clases. Sé de memoria los nombres de todos mis maestros, desde jardín de infantes a doctorado. Les tengo especial agradecimiento a aquellos que me han marcado; a aquellos por los cuales he decidido mi vocación y mis complicidades. Mis afinidades electivas”, dice la autora.

"Sus adversarios políticos deben de estar felices ante el disgusto de la ciudadanía", dice Luis de Tavira (Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo)
“Sus adversarios políticos deben de estar felices ante el disgusto de la ciudadanía”, dice Luis de Tavira. Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo

“El monstruo era el SNTE y su “lideresa”. Ahora es la CNTE. Hay cosas positivas y cosas deplorables en la reforma educativa. Analicemos, discutamos, propongamos. No nos sumemos a la polarización que nos proponen. ¿No será que en el “modelo de país” la educación no tiene lugar? ¿No estaremos buscando hacer de nuestros jóvenes sólo mano de obra dizque calificada para la maquila?”, se pregunta.

“No tengo respuestas a ninguna de estas cuestiones. Sólo más y más preguntas. Y una feroz angustia ante un país que se descompone a pasos acelerados”, concluye.

ANIQUILAMIENTO DE LOS DERECHOS LABORALES

"La reforma educativa busca chingarse a la banda", dice Octavio Rivera (Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo)
“La reforma educativa busca chingarse a la banda”, dice Octavio Rivera. Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo

Para el periodista Octavio Rivera, subdirector de la revista GENTE Y LA ACTUALIDAD, “Desde hace algunos años México (PRIAN) está metido en una dinámica de aniquilamiento de los derechos laborales que llega a su culmen con la reciente reforma en la materia. En cierto sentido la reforma educativa busca lo mismo, chingarse a la banda”.

“Ahora, si alguien anda buscando por la vida movilizaciones inmaculadas y sin mancha, es decir, que no estén impregnadas de intereses gremiales y porquería de esa, pues está perdiendo el tiempo. Los maestros fueron por muchos años ejemplo del corporativismo que le permitió al PRI durante décadas mantener en la pendeja al pueblo, manipulado, silenciado, inmóvil”, dice.

“El sistema educativo nacional de mierda que tenemos (las dirigencias sindicales, la corrupción al interior de la vida docente nacional, etc.) se lo debemos, principalmente, a la clase política de mierda que lo hizo lo que es. Por lo demás, que alguien proteste en este país de antipatía rampante, siempre me parecerá bien.

Los gobernantes, y esto se sabe desde Trasímaco con toda claridad, siempre buscarán su beneficio. Es la esencia del poder. Ellos están en lo suyo, enriqueciéndose y adquiriendo más poder cada vez, más impunidad…. bueno, no podría yo no tener simpatía por un gremio que les interrumpe un poco el saqueo. Por un gobierno que encabeza un iletrado que se agenció con dineros públicos un avión cuyo costo podría pagar la construcción y equipamiento de decenas (quizás cientos) de escuelas, no merece otra cosa que se lo mande directo y sin escalas derechito a la chingada”, agrega.

¿SIENTES QUE TIENES DERECHO A HEREDAR TU PLAZA?

“¡Por supuesto que creo que deberían irse! La gente de a pie no tenemos responsabilidad alguna en sus reclamos y somos, sin duda alguna, quien los padece”, afirma la periodista Marisa Zannie, editora de Estilos del periódico El Universal.

“Alguien me contó que el día de lo del aeropuerto una persona de Aeroméxico se acercó a una señora para decirle que la empresa los apoyaría con el 50% del boleto en otro día, la señora respondió que lo agradecía pero que bastante trabajo había pasado para pagar su boleto original, que de ninguna manera le alcanzaría para un 50% adicional y creo que muchos estaríamos en la misma situación.

Por otra parte, ¿tú, o cualquiera que no sea un maestro mexicano, se sentiría ultrajado porque pretenden evaluar su desempeño? ¿sientes que tienes derecho a heredar tu plaza? ¿a santo de qué? Yo sé de varios casos de personas que cobran sueldos (dobles) de maestros sin trabajar y para evaluar la calidad de la educación en México, basta con ver como se “expresan” muchos jóvenes enTwitter y en Facebook”, afirma.

"Hay cosas positivas y cosas deplorables en la reforma educativa. Analicemos, discutamos, propongamos", dice Sandra Lorenzano (Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo)
“Hay cosas positivas y cosas deplorables en la reforma educativa. Analicemos, discutamos, propongamos”, dice Sandra Lorenzano. Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo

El músico y escritor Alonso Arreola se pronuncia en idéntico sentido: “Nada justifica que los niños del sur se queden sin clases; menos la ambición por heredar plazas, controlar presupuestos federales o negarse a una evaluación obligada. Tampoco se justifica afectar la libertad de tránsito y trabajo de terceros.

Tristemente México se ha acostumbrado a que en el desacuerdo se puede soslayar la ley y aplastar los derechos del prójimo. En el DF en particular se han fundido la tolerancia y el desgobierno para no pagar costos políticos, pues hay demasiados oportunistas esperando la represión”, dice.

“Fuera los maestros del DF. Detrás de sus reclamos existen intereses políticos de muchos años, razones varias, ocultas que no tienen que ver sólo con sus reclamos, entonces es lamentable ver como el país sigue estancado en lo primordial y la ciudad, atrapada”, dice la cantante Tonana.

EL DERECHO A MANIFESTARSE

¿Deben irse los maestros del DF? (Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo)
¿Deben irse los maestros del DF? Foto: Antonio Cruz, SinEmbargo

Para el periodista, escritor, columnista de Proceso y sinembargo.mx Juan Pablo Proal, autor del reciente Vivir en el cuerpo equivocado, los maestros tienen derecho a manifestarse.

Eso sí, “deberían ser más cuidadosos con no afectar a los ciudadanos en sus inconformidades. Estoy de acuerdo con su reclamo, pues el gobierno federal no los tomó en cuenta en la elaboración de la reforma y faltó a su palabra de ofrecerles incluir su posición en la iniciativa de ley”, dice.

Para el periodista de rock David Cortés Arce, autor del libro 100 discos esenciales del rock mexicano, “los reclamos son justos, pero eso no justifica los hechos vandálicos que algunos de ellos hacen y que empañan la justicia de sus demandas. Hay otras instancias a las cuales deben recurrir. Claro, siempre y cuando esas instancias funcionaran. Para un capitalino, es difícil entender sus pedimentos porque, al hacerlo nos generan problemas, muchos irrumpen en nuestra vida cotidiana de manera brutal y allí es cuando resulta difícil solidarizarse con ellos. Si, deberían irse”, afirma.

LA HISTORIA DE UNA MAESTRA RURAL

“Digo esto no como periodista ni como ciudadano afectado por las manifestaciones de los maestros, cuya legitimidad daría para una discusión muy larga. Lo digo como hijo de una maestra rural, que nació y creció en un caserío llamado Ahuijullo, en la sierra de Jalisco.

Ahí nació y fue educada por unos padres analfabetos para los que el trabajo, por humilde que este fuera, era más que un modo de vida, una razón para vivir.

Mi madre estudió y desde su adolescencia encontró en la educación su vocación, comenzando a dar clases siendo casi una niña. Ya convertida en una joven maestra veinteañera, mamá nunca se detuvo cuando se trató de buscar mejores opciones para los cinco hijos que procreó con papá.

Cambió de residencia muchas veces y dejó opciones seguras con tal de buscar un mejor nivel de vida para ella y su familia. Entre esos múltiples cambios, y precisamente por ellos, la vi levantarse todos los días a las 5 am para ir a enseñar en escuelas hundidas en oscuras cañadas, valles desolados o ricos campos agrícolas.

Ninguna de las escuelas en las que laboró, perdió nunca un día de clases porque ella faltara cuando era directora, profesora de 25 niños de 6 distintos grados escolares, conserje, pintora, albañil y encargada del huerto escolar.

Ninguna de esas humildes escuelas de una sola aula a las que llegó, terminó igual cuando ella las dejó. Las heredó siempre impecables, ampliadas, llenas de chiquillos sonrientes a los que de adultos vi con los ojos húmedos al recordar a la dura, inflexible, estricta, entrañable, cariñosa, ocupada y preocupada Maestra Graciela o seño Chela, siempre pendiente de sus niños, miles de niños que durante 45 años pasaron por las aulas en las que impartió conocimiento, pero sobre todo, amor por su trabajo.

Cuando le faltaron recursos se rajó la espalda para conseguirlos, aunque eso implicara cargar con sus hijos a maratónicas jornadas esperando a lídercillos sindicales a los que a fuerza de tenacidad o necedad, terminaba convenciendo para que se los otorgaran; no te puedo contar cuántas antesalas hice en oficinas de gobierno a las que iba en sus vacaciones de verano para solicitar materiales de construcción, semillas para huertos escolares o plazas para nuevos maestros; imposible contabilizar los litros de gasolina consumidos por su inseparable Combi, cargada a veces con las donaciones en especie de empresarios que por genuina solidaridad o por hartazgo ante la insistente Profesora, cooperaban con pintura para las aulas y los pizarrones, tejas o impermeabilizantes para los techos.

La vi enojarse y cambiar el tono verde de sus ojos por un amarillo encendido mientras enfrentaba lo mismo a caudillos caciquiles que pomposas y reaccionarias primeras damas; los mismos con los que después, la vi codo a codo trabajando por mejorar no sólo su escuela sino su comunidad.

¿Conozco la situación de los maestros rurales? No la conozco LA VIVÍ… sé que muchas de las demandas de los maestros son legítimas porque, lamentablemente, son las mismas desde antes de que yo naciera. Pero nunca, nunca, nunca, me pidas simpatía por un maestro que deja atrás a sus alumnos, porque no está pensando en ellos. Está pensando en sí mismo y ese no es maestro, es un obrero del sistema educativo”, (Eduardo Aragón Valencia, periodista, productor de CNN En Español)

El escritor Benito Taibo pone a este debate una cuota de humor que no viene mal en tiempos tan turbulentos. “”Nunca te enamores de una maestra oaxaqueña, porque, tarde o temprano, se va a marchar”, dice. Reír un poco, ¿qué otra nos queda?

Mónica Maristain
Es editora, periodista y escritora. Nació en Argentina y desde el 2000 reside en México. Ha escrito para distintos medios nacionales e internacionales, entre ellos la revista Playboy, de la que fue editora en jefe para Latinoamérica. Actualmente es editora de Cultura y Espectáculos en SinEmbargo.mx. Tiene 12 libros publicados.
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