México, junto con Reino Unido, Alemania y Canadá, presenta el rango más alto de reducción de emisiones debido a la pandemia. Sin embargo, sus inversiones públicas y subsidios en proyectos de fuentes fósiles “revertirán el decrecimiento de emisiones una vez que se reactive la economía”.
México, 30 nov (EFE).- Al no apostar por las energías renovables, México va rezagado en el cumplimiento de objetivos de reducción de emisiones del G20 a pesar de la caída de la actividad productiva y de la contaminación por la pandemia de COVID, señaló este lunes el Reporte de la Transparencia Climática.
México no está aprovechando la “oportunidades” y “va al contrario de lo que el reporte señala, que es la importancia de consolidar las políticas para mayor producción de energías renovables”, expresó a Efe el director de Política Climática y Transporte en Iniciativa Climática de México (ICM), Jorge Villarreal, tras presentar el informe en México.
ICM participa junto a otras organizaciones en la iniciativa Climate Transparency, a través de la cual se generó el reporte que toma en cuenta a diferentes países del G20.
De acuerdo con los datos del documento, México, junto con Reino Unido, Alemania y Canadá, presenta el rango más alto de reducción de emisiones debido a la pandemia. Sin embargo, sus inversiones públicas y subsidios en proyectos de fuentes fósiles “revertirán el decrecimiento de emisiones una vez que se reactive la economía”.
En contraste, la mayoría de países del G20 están promoviendo de forma activa las energías renovables en sus planes de recuperación aunque sigan invirtiendo en fuentes fósiles.
Sin embargo, consideró Villarreal, las políticas energéticas mexicanas no están tomando el mismo rumbo, tanto es así que el 73 por ciento del presupuesto dirigido a la acción del cambio climático está destinado a gasoductos.
“Las políticas orientadas a favorecer los combustibles fósiles obstaculizan que México aproveche la oportunidad para poder consolidar la tendencia global de mayor penetración de energías renovables y de los anuncios que las principales economías está haciendo para la neutralización del carbono para 2050, incluyendo los principales socios comerciales de México”, indicó el experto.
Por su parte, la investigadora asociada en el ICM Mariana Gutiérrez indicó en la presentación del reporte que todavía es posible un cambio de rumbo en las políticas mexicanas, pero de manera urgente.
“De acuerdo al reporte, los efectos del cambio climático están generando costos sociales y económicos. En 2019 hubo 126 fallecimientos en México a causa de efectos asociados al cambio climático y se pierden 25 mil millones de dólares cada año”, aseguró.
EL G20 AVANZA EN INTENCIONES
A nivel general, el reporte recoge que los países del G20 están avanzando en cuanto a los planes de recuperación verde y están incluyendo medidas contra la crisis climática en sus planes de recuperación tras la pandemia mundial de coronaviurs.
Esto es relevante porque los países del G20 reúnen el 80 por ciento de las emisiones globales de CO2 y dos terceras partes de la población mundial.
“El G20 se mueve en una dirección que apunta al crecimiento acelerado y a la permanencia de las energías renovables a la vez que avanza de manera pausada en descarbonización. Las decisiones en contexto de COVID-19 pueden cambiarlo todo”, terminó Gutiérrez.