Ciudad de México, 13 de diciembre (SinEmbargo).– No fue fácil, tampoco barato en términos políticos y económicos, pero el Congreso de la Unión aprobó la Reforma Constitucional en materia Energética del Presidente Enrique Peña Nieto, la llamada “madre de todas las reformas”.
Fue sin debate real. También fue, a pesar de las miles de peticiones por escrito –y la insistencia de los líderes de la izquierda–, sin consultar a los mexicanos.
La Energética ha sido la reforma de “mayor calado” y que más polémica, interés y rechazo social ha causado entre las 16 enmiendas constitucionales (educativa, telecomunicaciones, derechos humanos, transparencia, libertad de expresión, competitividad, y en temas políticos y electorales) que se han aprobado en la presente legislatura. Es también, la mayor apuesta del Presidente Peña Nieto para, de acuerdo con sus metas, darle viabilidad económica al país.
Una vez que las aguas han dejado de agitarse, es posible observar cómo se fue construyendo el dictamen aprobado por una mayoría aplastante en el Congreso, que fue repudiado por la oposición y que provocó que se calificara como “traidores a la patria” a quienes los avalaron con su voto.
La Reforma Energética empezó su ruta final el pasado 14 de agosto, cuando el Presidente Peña Nieto envió su propuesta al Senado de la República.
La iniciativa gubernamental planteó reformar los artículos 27 y 28 de la Constitución para abrir la participación de la iniciativa privada en contratos de utilidad compartida, en los sectores de exploración y extracción del petróleo y gas, así como en refinación, transporte y almacenamiento.
En materia de electricidad, la propuesta oficial permitiría la participación de particulares para generar o vender energía, utilizando la red pública nacional.
CONSTRUCCIÓN EN EL SENADO
Para ser aprobada, la Reforma Energética tuvo que sortear diversos obstáculos.
El primero fue la fuerte presión del Partido Acción Nacional (PAN), que condicionó sus votos a cambio de que el Senado aprobara primero la Reforma Político-Electoral, una serie de modificaciones a la forma de gobierno y al sistema electoral, que incluyó varias demandas panistas, como la sustitución del IFE por el Instituto Nacional Electoral y la reelección legislativa.
El segundo gran impedimento en el Senado fue un cerco ciudadano convocado por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), colocado alrededor del recinto de Reforma e Insurgentes, como medida de presión para que los legisladores no aprobaran la enmienda peñista.
Los manifestantes consideraron que la Reforma Energética dejaría al mejor postor los hidrocarburos nacionales, que provocaría la privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex) y que generaría el encarecimiento de los energéticos en el país.
El tercer obstáculo fue la oposición enconada de los senadores del Partido de la Revolución Democrática (PRD). Los perredistas fueron ignorados durante todo el proceso de creación y negociación de la Reforma Energética. Respondieron orillando a su dirigencia nacional a salirse del Pacto por México.
EL DOCUMENTO
Para evitar el abandono de los perredistas a las sesiones posteriores, los líderes parlamentarios del PRI y PAN cedieron a realizar una maratónica reunión de comisiones unidas, previo a dar a conocer el documento oficial.
Por fin se presentó el texto. Incluía la reforma a los artículos 25, 27 y 28 constitucionales, así como 21 artículos transitorios con la mayoría de las propuestas generadas en la iniciativa de Reforma Energética del PAN.
Así empezó la pasarela de oradores a favor y en contra de la reforma integral a sector energético nacional. Fueron 11 horas y 15 minutos de debates que se escucharon el primer día. Nueve horas prácticamente sólo de participaciones perredistas el segundo día.
LA TOMA DE TRIBUNA DEL SENADO
Los perredistas emplearon la exposición infinita de su postura contra la supuesta privatización de Pemex como táctica dilatoria. Aseguraron que el dictamen no estaba lo suficientemente discutido ni se había dado la publicidad suficiente para que la sociedad mexicana conociera sus detalles y alcances.
Ante su inminente aprobación, los perredistas optaron por tomar la tribuna de la comisión permanente del Senado como medida de presión, para que se aprobaran la Ley Federal de Consulta Popular y la Reforma Política del Distrito Federal previo a la dictaminación de la Energética.
Tras cuatro horas de negociación, la vicecoordinadora perredista regresó bajó el brazo sólo con promesas del líder parlamentario del PRI, Emilio Gamboa Patrón, de que sus demandas serían atendidas al día siguiente. Los perredistas aceptaron el intercambio y la sesión de comisiones se reanudó.
ROMERO DESCHAMPS, MANZANA DE DISCORDIA
Carlos Romero Deschamps, Senador del PRI y líder del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), estuvo en el ojo del huracán durante la discusión de los artículos reservados de la Reforma Energética, en las comisiones del Senado.
El Senador panista, Francisco Domínguez, declaró que el voto del albiazul a favor de Reforma Energética implicó el compromiso pactado con sus homólogos del PRI para sacar al sindicato petrolero del Consejo de Administración de Pemex.
“Por eso votamos a favor en lo general, hubiera sido irrisorio votar a favor si no nos hubieran aceptado esa propuesta”, dijo Domínguez.
El legislador panista precisó que la salida de los cinco representantes sindicales del órgano de Gobierno de Pemex quedaría establecida en uno de los transitorios, cuya redacción sería definida posteriormente.
La revelación cobró fuerza luego de que el Senador priista Carlos Romero Deschamps, visiblemente molesto no votó en lo general el documento y salió sin dar explicaciones del salón de sesiones.
Posteriormente el PRI cobijó a Romero Deschamps y reconoció su labor, a pesar de ser uno de los líderes sindicales más cuestionados por la opinión pública, señalado por presunto enriquecimiento ilícito, gracias a las continuas demostraciones de opulencia él y de su familia.
“Carlos Romero es nuestro compañero. Nuestro respeto, nuestra solidaridad y nuestro reconocimiento a don Carlos Romero, compañero, senador; no sólo como senador, sino como líder del sindicato, que se ha portado a la altura y que ha estado colaborando para que haya una nueva reforma energética en México”, afirmó el Senador David Penchyna Gruyb, presidente de la Comisión de Energía.
APRUEBAN DICTAMEN MANOSEADO
A todos sorprendió que el mismo día de la votación en el Pleno de la Reforma Energética, apareció publicado un adéndum al dictamen en la Gaceta del Senado. El documento acordado por los presidentes de las comisiones unidas de Puntos Constitucionales, Energía y Estudios Legislativos contenía cambios al documento original agregados durante la madrugada, sin el consentimiento de los integrantes de las comisiones.
La Senadora Dolores Padierna Luna denunció que los cambios realizados violentaban el proceso legislativo, pasaban por encima de la legalidad y sobre todo, habían sido redactados, no por legisladores, sino por cabilderos de mineras canadienses.
“Hoy [martes] en la madrugada, hubo la presencia de las mineras canadienses haciendo una presión enorme para modificar el octavo transitorio”, afirmó la Senadora del PRD, Dolores Padierna.
Sin embargo, la denuncia perredista fue tomada como un nuevo intento del Sol Azteca por dilatar la dictaminación de la Reforma Energética.
El dictamen fue presentado al pleno el martes 10 de diciembre y se aprobó en lo general con 95 votos a favor, 28 en contra y cero abstenciones. Fue aprobado en su totalidad hasta el miércoles 11 de diciembre pasado, tras 19 horas continuas de exposición de artículos impugnados por parte de los senadores del PRD. Ninguna de sus reservas fue aceptada.
LA TOMA DEL SALÓN DE SESIONES DE SAN LÁZARO
Una vez que fue aprobado el dictamen de la Reforma Energética, el texto se envió como minuta a la Cámara de Diputados y el cerco ciudadano trasladó su campamento a las inmediaciones del Palacio Legislativo de San Lázaro.
Al interior del recinto, los líderes parlamentarios sostenían una reunión privada para acordar el proceso legislativo para su dictaminación. Mientras tanto, un grupo de legisladores del PRD, PT y Movimiento Ciudadano, afines a Morena, se atrincheraron en el Salón de Sesiones. Encadenaron puertas y utilizaron curules para usarlas como barricadas,
Con esta toma simbólica, no sólo de la tribuna sino de todo el saló del pleno, los perredistas exigieron detener el proceso de la Reforma Energética.
“Nos manifestamos contra la privatización que a través de la reforma energética pretende Enrique Peña Nieto, a través del PRI”, anunció Alejandro Sánchez Camacho, secretario general del PRD.
La toma del salón del Pleno fue interpretado como “secuestro” del recinto por parte del líder del PRI en San Lázaro, Manlio Fabio Beltrones Rivera, y utilizado como pretexto para avalar la dispensa de todos los tramites a la minuta y su análisis y votación en una sola sesión y no en dos, como marca la ley Orgánica del Congreso.
Beltrones Rivera rechazó que la decisión fuera acordada con días de anticipación. Por el contrario, aseguró que se determinó tras el “secuestro” legislativo realizado por algunos perredistas.
“Que nadie se atreva a mentir: estábamos en la conversación para el envío a comisiones de la minuta que llegó del Senado. Entonces, es la hora que el trámite y procedimiento legal y constitucional lo resuelva este Pleno, y que este Pleno sea el que diga lo que hay que hacer. No hay más autoridad que el Pleno”, afirmó el líder parlamentario.
FAST TRACK EN CÁMARA DE DIPUTADOS
Una vez que el acuerdo de urgente resolución fue avalado por el Pleno de la Cámara de Diputados, inició la discusión de la minuta de Reforma Energética en el auditorio “Aurora Jiménez de Palacios”, empleado como sede alterna.
En medio de gritos airados, burlas, abucheos y silbatinas que le propinaron legisladores priistas, Ricardo Monreal Ávila, líder parlamentario de Movimiento Ciudadano, reprochó la premura con la cual la mayoría aprobó en lo general el dictamen de la reforma más importante en lo que va del sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto.
“Cuando una simple mayoría numérica en el Congreso federal y en los congresos locales modifica alguno de los irreductibles fundamentales de la Constitución, no se produce una reforma constitucional de gran calado, se produce un agandalle legislativo de gran agravio, típico de una forma de gobierno conocido como una dictadura legislativa”, insistió Monreal Ávila.
Por otra parte, el coordinador de los diputados panistas, Luis Alberto Villarreal García, lamentó que las pésimas condiciones para sesionar una reforma trascendental para el país. Sin embargo, responsabilizó por esto a los diputados que tomaron el salón del pleno y a los manifestantes que cercaron el Palacio Legislativo de San Lázaro.
“Lo que sucedió en este transcurso de la mañana es algo de lo que nadie se puede sentir orgulloso. Hubo legisladoras y legisladores que no solamente fueron de alguna manera vitoreados o agredidos sino que además fueron golpeados físicamente y eso a nadie nos puede dar gusto y nadie lo podemos celebrar”, sostuvo el líder de la bancada blanquiazul.
REFORMA APROBADA EN MEDIO DE INSULTOS
La Reforma Energética se aprobó con 353 votos a favor, 134 en contra y cero abstenciones. La discusión en lo particular terminó jueves 12 de diciembre, alrededor del mediodía. Un total de 79 diputados hicieron uso de la palabra para la discusión de los artículos impugnados.
Con la Reforma Energética se permitirán los contratos con particulares en la exploración y extracción del petróleo y otros hidrocarburos que se encuentren en el subsuelo de la Nación, a fin de obtener ingresos que contribuyan al desarrollo del país en el largo plazo.
En los artículos transitorios se prevé que antes de dos años, los organismos descentralizados denominados Petróleos Mexicanos (Pemex) y Comisión Federal de Electricidad (CFE) se conviertan en empresas productivas del Estado.
En tanto se lleva a cabo esta transición, Pemex, sus organismos subsidiarios y CFE, “quedan facultados para recibir asignaciones y celebrar contratos, los cuales deberán ser: entre otras, de servicios, de utilidad o producción compartida, o de licencia.
Entre los esquemas de contraprestaciones que se deberán regular se encuentran: en efectivo para los contratos de servicio, con un porcentaje de utilidad y para los contratos de utilidad compartida.
La Reforma crea el Fondo Mexicano del Petróleo para la Estabilización y el Desarrollo, cuya institución fiduciaria será el Banco de México y tendrá como objetivo, recibir, administrar y distribuir los ingresos derivados de las asignaciones y contratos petroleros.
El texto explica que se podría incrementar la producción de petróleo en cerca de 1.5 millones de barriles de crudo diarios adicionales para 2025. En el caso del gas natural, la producción podría aumentar para ese mismo año, aproximadamente a 7.3 miles de millones de pies cúbicos diarios, más del doble de la producción actual.
