Ciudad de México, 18 de noviembre (SinEmbargo).- Autoridades del gobierno municipal de Ciudad Juárez aseguraron este día que la matanza de una familia de ocho miembros, que incluía a tres menores de edad, no está relacionada con el crimen organizado, pero no supieron explicar por qué. Los asesinos no están identificados, tampoco queda claro el móvil y han pedido a la ciudadanía su cooperación.
Por la información que lleve al arresto del “posible o posibles” involucrados, están ofreciendo 300 mil pesos de recompensa o incluso el monto podría incrementarse, de sumarse otros organismos para tal fin.
Esto fue anunciado en conferencia de prensa, donde estuvieron presentes el Alcalde de Ciudad Juárez, Enrique Serrano Escobar; el secretario interino de Seguridad Pública, César Omar Muñoz Morales, y el fiscal especial para la Persecución de los Delitos en la Zona Norte, Enrique Villarreal Macías.
La dirección de seguridad pública del municipio de Ciudad Juárez ya lleva poco más de un mes sin titular. Por eso, un interino asume el cargo mientras que el Congreso autoriza o decide a quién va a instaurar.
El Edil aseguró que este crimen no está relacionado con el crimen organizado, de acuerdo con las primeras investigaciones. De igual manera, anunció que la Policía preventiva se sumó a las pesquisas de este caso.
La Fiscalía General del Estado (FGE) de Chihuahua tiene dos líneas de investigación sobre el asesinato de las ocho personas. La más fuerte es una posible venganza de tipo familiar.
El Diario de Juárez informa que las autoridades estatales ya investigan a personas cercanas a las víctimas. Además tienen como segunda línea de investigación un posible robo, pues en la casa de la familia, los investigadores detectaron que faltaban algunos aparatos electrodomésticos.
Extraoficialmente, funcionarios de la Fiscalía revelaron a ese medio que ya hay un sospechosos detenido por este crimen.
Los ocho integrantes de la familia asesinada en Ciudad Juárez, Chihuahua, entre ellos tres niñas, fueron asesinados con arma blanca y no a balazos como se informó inicialmente, confirmaron ayer las autoridades policiacas.
También señalaron que tras revisar el lugar donde se cometió el crimen se dieron cuenta que faltaba una bebé de tres meses que aparentemente se llevaron los atacantes; sin embargo, horas más tarde se informó que la menor se localizaba en casa de una vecina.
Las víctimas son: María del Carmen Morales Infante de 60 años fue hallada en la cocina, Rosa María Castañeda Morales de 30 en una cama de una recámara y María del Carmen Castañeda Morales de 28 en una cuna.
Entre las víctimas se cuentan Daniel Romero Castañeda de 6 años, Valeria Lara Castañeda de 4 y Abril Romero Castañeda de 4.
Entre los adultos se cuenta Rubén Romero de 28 años y un hombre no identificado de entre 25 y 40.
Las autoridades dieron a conocer que los cuerpos tenían cinta adhesiva en boca y manos.
Los cuerpos de los niños fueron hallados sobre las camas, en las recámaras, lo mismo que las dos mujeres más jóvenes. Los dos hombres estaban en sillones, maniatados y amordazados.
Todos los asesinatos se cometieron con arma blanca y se cree que el ataque ocurrió la noche del pasado sábado, según publicó el Diario de Juárez.
Los vecinos dijeron haber escuchado una ráfaga de arma de fuego durante la noche, pero los cuerpos de las víctimas no presentan disparos.
Las primeras investigaciones revelaron que una de las chapas de la casa fue violentada. En el patio de la vivienda había cuatro vehículos en venta y en actualmente las autoridades investigan si tienen reporte de robo.
Los vecinos dijeron que quien se dedicaba a la venta de vehículos era un hombre al que conocen como “Max”, a quien podría corresponder el cuerpo no identificado.
El ataque se registró en una casa ubicada en el cruce de las calles Luciano Becerra y Fernando Montes de Oca de la colonia Morelos Zaragoza.
De acuerdo con información obtenida en el lugar de los hechos, la familia iba a acudir la mañana de este domingo a un evento del grupo religioso de la congregación Testigos de Jehová y no asistió ninguno.
Eso extrañó a sus conocidos del templo y entonces fueron a buscarlos, pero entonces encontraron muertos a todos, de modo que dieron aviso a las autoridades.
Recientemente, tras el asesinato a unas cuadras de distancia de una mujer que era madre de siete hijos, los vecinos pidieron vigilancia policiaca en ese sector y no la recibieron.
