En el mundo sólo quedan 6 rinocerontes blancos del norte tras la muerte de Suni

21/10/2014 - 12:00 am
Suni, de 34 años falleció el viernes en una reserva cerca de Narobi. Era uno de los dos rinocerontes blancos del norte machos que quedaban. Foto: Shutterstock.
Suni de 34 años falleció el viernes en una reserva cerca de Nairobi. Era uno de los dos rinocerontes machos blancos del norte que quedaban. Foto: Ol Pejeta Conservancy

Ciudad de México, 21 de octubre (SinEmbargo).– La muerte de Suni, un rinoceronte blanco del norte de 34 años, supone la próxima y casi segura extinción de esta especie de África. Los guardias de la reserva animal Ol Pejeta en Nairobi descubrieron a Suni muerto el viernes y los primeros reportes indicaron que fue por causas naturales.

El rinoceronte era uno de los dos machos que quedaban junto a otras 5 hembras, por lo que los encargados de la reserva aseguraron que las posibilidades de que esta especie continúe su reproducción es escasa.

Suni pasó de una vida en cautiverio en el zoológico Dvur Kralove de la República Checa a su hábitat natural en el parque Ol Pejeta de Kenya junto con otro macho y dos hembras (Najin, Fatu y Sudan) en el 2009, precisamente con la esperanza de que pudieran reproducirse y salvar a los de su especie.

Suni fue el primer rinoceronte blanco del norte en nacer en cautiverio por lo que la reserva aseguró que desconocía la existencia de otros rinocerontes blancos del norte que sobrevivieran dentro de sus hábitat naturales. “Consecuentemente, la especie enfrenta el borde de la extinción: una evidencia lamentable de la codicia de la raza humana”, declaró el personal de la reserva Ol Pejeta.

La reserva aseguró mediante un comunicado que continuará trabajando para que exista pronto alguna cría de esta especie. También informó que el padre de Suni, Suit falleció por causas naturales a los 34 años de edad en 2006.

LA CAZA, EL GRAN PELIGRO

“La Reserva Ol Pejeta está por recibir un regalo muy especial de Navidad”, anunciaron en diciembre de 2009 cuando, gracias al proyecto llamado “La última oportunidad de sobrevivir”, llegaron los cuatro rinocerontes blancos del norte a la reserva desde la República Checa.

El proyecto fue un esfuerzo conjunto de Fauna y Flora Internacional, Servicio de Vida Silvestre de Kenia y las organizaciones Lewa Wildlife y Back to Africa, además del zoológico en país europeo.

El rinoceronte blanco del norte continúa en la lista de las subespecies mamíferas en peligro de extinción. Estos ejemplares solían extenderse a lo largo de Uganda, Chad, Sudán y la República Democrática del Congo en 1960 cuando se reportaba la existencia de más de 2 mil rinocerontes blancos del norte, sin embargo, la caza furtiva fue la principal causa que lo diezmó.

En 1984 se tenían registrados 15 rinocerontes blancos del norte sobrevivientes de la caza furtiva en El Congo y para el 2004 se registró un aumento de 22 ejemplares, pero la actividad ilegal humana dejó únicamente el número de rinocerontes blancos del norte que hasta hoy se conoce.

Las personas encargadas del cuidado de los rinocerontes blancos del norte enfrentan graves peligros al arriesgar sus vidas para proteger a esta especie de las bandas armadas dedicadas a la caza de estos animales.

Por si fuera poco, los rinocerontes negros y blancos enfrentan riesgos como la caza furtiva, ya que sus cuernos alcanzan altos precios en el mercado de medicina alternativa. Foto: Shutterstock.
Por si fuera poco, los rinocerontes negros y blancos enfrentan riesgos como la caza furtiva, ya que sus cuernos alcanzan altos precios en el mercado de la medicina alternativa. Foto: Shutterstock.

Según el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF por sus siglas en inglés) la falta de legislaciones en la parte este de la República del Congo deriva en los continuos ataques al Parque Nacional de Garamba, que actualmente se encuentra en la lista de patrimonio mundial de la humanidad. Tres de los rinocerontes que quedan en el santuario Ol Pejeta fueron trasladados en 2005 desde Garamba, tras enfrentar múltiples riesgos.

Aunque no existe evidencia científica que compruebe su efectividad, el cuerno de los rinocerontes está altamente cotizado en el mercado de medicina tradicional de Asia, donde se tritura y se vende en tabletas. Los cuernos sirven, supuestamente, para curar enfermedades como hemorragias nasales, accidentes cerebrovasculares, convulsiones y fiebres.

El kilogramo de cuerno de rinoceronte puede llegar a costar más de 65 mil dólares, incluso más que el oro, los diamantes y la cocaína, según información de la Convención sobre el Comercio Internacional de Flora y Fauna (CITES).

La matanza de rinocerontes en África del Sur fue en aumento desde el 2009, según cifras del Ministerio del Medio Ambiente nacionales. Al menos 122 rinocerontes fueron asesinados en 2009, 333 en 2010 y 388 en 2012.

Por otro lado existen cifras que reportan que la conservación del rinoceronte blanco del sur es un éxito, pues en 1960 existían únicamente dos mil especies de este tipo y en la actualidad reportan 20 mil 140 rinocerontes blancos del sur en Sudáfrica, Namibia, Zimbabwe y Kenia.

en Sinembargo al Aire

Opinión

Opinión en video