Ciudad de México, 5 de septiembre (SinEmbargo).– A unos días de que el Gobierno federal presente su proyecto de presupuesto para el 2016, la expectativa de una modificación en la tasa de interés de Estados Unidos se incrementó con los datos de empleo que el país gobernado por Barack Obama dio a conocer este viernes.
Aunque la moneda mexicana no sufrió variaciones graves durante la semana, analistas esperan que aumente la volatilidad conforme se acerca la tan esperada reunión de la Reserva Federal (Fed, por su siglas en inglés) a mediados de septiembre. Este viernes continúo en los 17.30 pesos por dólar en promedio.
Por lo pronto, durante esta semana parece haber desaparecido la volatilidad financiera que se convirtió en una constante durante los últimos meses primero por la deuda de Grecia, luego por la preocupación del frenón en el ritmo económico de China, aunque aún prevalece el fantasma de la tasa de interés estadounidense.
Sin embargo, tanto la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) como otros mercados financieros sí tuvieron repercusiones tras el anuncio de los 173 mil nuevos empleos creados en EU. Aunque la cifra fue inferior a lo que esperaban los analistas y la más baja durante los últimos cinco meses, la tasa de desempleo estadunidense registró su nivel más bajo en siete años; es decir desde 2008 cuando la Fed ajustó su tasa de interés a entre 0. y 0.25 para fortalecer su economía.
Así, en la última jornada de la semana, la BMV cerró con una baja de 1.25 por ciento y el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) se ubicó en 42 mil 742.86 unidades, con una pérdida de 540.61 enteros respecto al nivel previo, presionado por la baja de emisoras como América Móvil, Cemex, Grupo México y Televisa.
El Wall Street cerró con fuertes pérdidas y el Dow Jones, su principal indicador, cayó un 1.66 por ciento. Las principales bolsas de valores europeas concluyeron la semana con pronunciadas pérdidas, encabezadas por el mercado accionario de Milán (3.18 por ciento menos) y París (2.81 por ciento).
Algunos economistas consideran que la bajada del paro en agosto ayudará a decantar la balanza por subir las tasas en septiembre, pero otros creen que la creación de empleo el mes pasado fue demasiado modesta y el ascenso sería mejor en octubre.
Actualmente, las apuestas en Wall Street giran sobre el alza de las tasas de la Fed. La estimación del mercado de que el aumento ocurrirá este mes subió un poco, de 30 por ciento del jueves al 34 por ciento al viernes.
El presidente de la Fed en Richmond, Jeffrey Lacker, afirmó que la economía estadounidense no necesita ya mantener los tipos en cerca de cero.
“Es hora de que alineemos nuestra política monetaria con el significativo progreso que hemos hecho”, comentó Lacker en declaraciones preparadas tituladas “El motivo contra un mayor aplazamiento”.
Sin embargo, el Fondo Monetario Internacional (FMI) insistió en que EU debe analizar mejor su alza en la tasa de interés y pidió medidas para evitar un patinazo de la economía mundial.
Por su parte, el precio de petróleo continuó un comportamiento débil, lo que fue negativo para el peso. El crudo tipo West Texas Intermediate bajó 0.51 por ciento a 46.51 dólares por barril y el tipo Brent disminuyó 1.01 a 50.17 dólares.
La mezcla mexicana cerró en 41.41 dólares por barril, 0.93 centavos menos que la jornada anterior cuando mostró una leve recuperación al ofertarse en 42.34 dólares, de acuerdo con Petróleos Mexicanos (Pemex).
EL RIESGO PARA EL PRESUPUESTO 2016
En este panorama de volatilidad del mercado del petróleo y el cambiario, así como la desaceleración de la economía global, el Presidente Enrique Peña Nieto presentó esta semana su Tercer Informe de Gobierno en el que los factores internos y externos jugaron en su contra.
El mandatario mexicano reconoció que tras la caída de la producción de crudo y su precio, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) tuvo que recortar su proyección de crecimiento a entre 2 y 2.8 por ciento desde un 2.2 – 3.2 por ciento.
Además, pese a que aseguró que las reformas estructurales generarían un crecimiento sostenido, la realidad es que a partir del segundo semestre del año pasado los precios del petróleo iniciaron una tendencia a la baja que forzó a la Secretaría de Hacienda a recortar este año en 124 mil 300 millones de pesos el gasto, equivalente al 0.7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB).
Aunque, este año el hundimiento de los precios del crudo no se resintió por la contratación de coberturas en 76.4 dólares contra un precio presupuestado de 79 dólares el barril. De acuerdo con el Secretario de Hacienda Luis Videgaray Caso para el próximo año el precio promedio de la mezcla no estará más allá de los 50 dólares.
La Secretaría de Hacienda planteó mantener el esfuerzo contracíclico de las finanzas públicas para apuntalar el crecimiento, así planteó para este año un déficit presupuestario de 1 por ciento del PIB, el cual es menor en 0.5 por ciento; si bien cumplió la meta del déficit no con la de crecimiento que en el PEF de este año fue de 3.7 por ciento.
En ese contexto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer que el estado general de la economía mexicana continúa a la baja y previó una disminución de la misma al no encontrar señales de recuperación.
Por su parte, la percepción de los mexicanos en agosto ante la situación económica actual y esperada del país provocó la caída de la confianza de los consumidores a la cifra más baja en un año.
