Pekín, 7 sep (EFE).- Las autoridades chinas impidieron la salida del país de cinco abogados de derechos humanos este fin de semana, cuando se disponían a abandonarlo, al argumentar que su salida podía poner “en peligro” la seguridad del Estado, informa hoy Amnistía Internacional (AI).
Liu, Huang y Ge trataban de cruzar a Hong Kong por diferentes motivos cuando las autoridades les detuvieron, mientras se desconoce adónde pretendían ir los otros dos.
La decisión de las autoridades ha sido considerada por las organizaciones en defensa de los derechos humanos como “otro ataque” del Gobierno a este colectivo, después de que en julio el régimen iniciara una grave campaña de represión por la que fueron detenidos, perseguidos o “hechos desaparecer” 245 abogados de todo el país.
Treinta de ellos aún permanecen bajo custodia, según los datos de Amnistía Internacional.
El Gobierno chino ha defendido que las detenciones responden a la supuesta existencia de una banda criminal que operaba a través del bufete Fengrui de Pekín, para el que trabajan prominentes abogados de derechos humanos que han sido detenidos como Wang Yu, considerada una de las mejores abogadas en este campo del país.
Para AI, no obstante, el motivo real del Ejecutivo es otro. “Su objetivo es erradicar a toda la comunidad de abogados de derechos humanos, ya que ha sido el principal grupo de personas que combatían las violaciones de derechos humanos y los abusos con la ley en la mano”, sentenció a Efe Nee.
Cuando ya pasa más de un mes desde que comenzara la campaña de represión, aún se desconoce la ubicación o el estado de muchos de los abogados que siguen en manos de las autoridades, ya que el Gobierno no ha ofrecido ninguna información sobre ellos e incluso les han negado a que tengan representación legal.
Además, destaca Nee, familiares de letrados también han sido intimidados, así como los abogados que fueron interrogados en la campaña y puestos luego en libertad.
En este tiempo, las autoridades también han detenido a cuatro activistas que publicaron fotografías suyas vestidos con una camiseta con el rostro de la abogada Wang Yu en la que pedían su liberación.
