Robert Irwin es el hijo de Steve Irwin, fallecido a los 44 años en 2006, víctima de una raya mientras filmaba un especial de los más peligrosos del océano. No sólo se parece mucho a su padre, sino que como él ha heredado la pasión por la fotografía y por la vida natural.
Ciudad de México, 6 de diciembre (SinEmbargo).- Es el hijo del recordado Steve Irwin, el cazador de cocodrilos. Tiene apenas 14 años y sin embargo se parece tanto a su padre y como él ama la naturaleza, viviendo desde ya en el zoológico australiano que heredó luego de la muerte temprana de su progenitor.
Como Steve, Robert viaja por el mundo dando mensajes acerca de las reservas y la flora y la fauna que él retrata como un fotógrafo experto, a pesar de su corta edad. Recientemente, el muchacho viajó a Washington, D.C (Estados Unidos) para recibir su primer premio Wildlife Photographer of the Year (Fotógrafo de Vida Salvaje del Año en español) de la revista Nature’s Best Photography.
Publica sus mejores fotografías en Instagram y tiene una página propia, donde además intenta hacer un homenaje a Steve, quien “era un gran fotógrafo”.
Hay que recordar que El cazador de cocodrilos falleció tempranamente en 2006, durante un ataque de una raya, una noticia que causó gran impacto en todo el mundo. Steve Irwin era muy famoso y su vestimenta beige, su pelo rubio en contacto siempre con la naturaleza, fueron el símbolo de la defensa de la vida con los animales.
En el momento del accidente se estaba filmando un capítulo llamado “Los más mortíferos del océano” (“Ocean’s Deadliest”) cuando Irwin, que tenía 44 años, nadó cerca de una de las mantarrayas, que tienen una ponzoña venenosa en sus colas. Según su amigo John Staton, quien trabajaba con Irwin en ese momento, “él pasó por encima de la mantarraya, la ponzoña se levantó y entró en su pecho y le hizo un agujero en el corazón”, cuenta Wikipedia.
Mira la galería con las geniales fotos de Robert Irwin, que seguirá sin duda el destino de su padre.
Robert alaba ser hijo de Steve. Cuando era un bebé su padre lo llevaba alzado con un brazo y con el otro le daba de comer a un cocodrilo. En ese tiempo, Irwin fue bastante criticado por las asociaciones que defienden los derechos de los niños, pero él lo ve como algo natural, de acuerdo a las costumbres que llevaban.
Nació en un zoológico, dice: “Soy el hombre más afortunado del mundo” y lo mismo siente su hermana Bindi, quien tuvo un mensaje para Steve al cumplirse 10 años de su muerte, en 2016: “Serás mi héroe durante toda mi existencia. Te amo más que lo que las palabras pueden describir”.
A 12 años de su muerte, El cazador de cocodrilos recibió una estrella póstuma en el Paseo de la Fama de Hollywood, en Los Ángeles. Allí fueron su viuda Terri, su hija Bindi y su hijo Robert.
