Luego de la renuncia de Arturo Zaldívar, inició el proceso para elegir quién ocuparía su lugar. El Presidente López Obrador decidió que sería, de entrada, una mujer. Mandó dos ternas al Senado –de una a otra solo cambió un nombre– y éste decidió no elegir. Este jueves 14 de diciembre procedió a elegir a Lenia Batres, quien se desempeñaba en la Consejería Jurídica de Presidencia.
Ciudad de México, 14 de diciembre (SinEmbargo).- Lenia Batres Guadarrama, abogada, activista y fundadora de Morena, será Ministra en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) por los siguientes 15 años, una instancia a la que llegó por designación directa.
Así lo decidió el Presidente Andrés Manuel López Obrador luego de que el Senado de la República desechara dos ternas. La decisión de las y los senadores dio paso a lo que establece el Artículo 96 constitucional:
“En caso de que la Cámara de Senadores rechace la totalidad de la terna propuesta, el Presidente de la República someterá una nueva […] si esta segunda terna fuera rechazada, ocupará el cargo la persona que dentro de dicha terna, designe el Presidente de la República”.
Se trata de la quinta Ministra que llega a la Corte a propuesta de López Obrador, una mujer de toda su confianza que lo ha acompañado en su lucha y en la fundación de Morena.
Los otros cuatro ministros propuestos por el Presidente son Juan Luis González Alcántara, en 2018, Margarita Ríos-Farjat, en 2019, Yasmín Esquivel, en 2019, y Loretta Ortiz Ahlf, en 2021.
En el caso de González Alcántara y Ríos-Farjat ha sido notorio el distanciamiento que han tomado del titular del Ejecutivo federal, a diferencia de Esquivel y Ortiz Ahlf, cuyos votos han ido en línea con el Presidente, como se espera que ocurra con Batres Guadarrama.
Lenia Batres llegará al llamado “máximo tribunal” en medio de una crisis política generada por cuestionamientos directos del Poder Judicial y Legislativo, además de fuertes críticas contra los privilegios que goza un pequeño grupo.
En su comparecencia ante la Comisión de Justicia del Senado de la República el pasado 27 de noviembre, Batres habló sobre los retos y los cambios que necesita el Poder Judicial, entre ellos el derroche que existe en su interior.
Puso sobre la mesa que en el mundo hay una discusión sobre el papel de dicho poder que es considerado el “poseedor de la última palabra en la interpretación de los derechos humanos y en general de las normas constitucionales”, por lo que en el caso mexicano es necesario “reencauzar la actuación del Poder Judicial hacia el límite constitucional y legal. Es una necesidad republicana y democrática”.
En esa misma línea agregó que el Poder Judicial actual legisla y abroga leyes completas aprobadas por el Poder Legislativo: “el Poder Judicial, creo, invade doblemente la facultad del Poder Legislativo y me parece que viola el Artículo 49 constitucional. Por eso, violenta también el principio de actuación democrática, que ha dispuesto que sólo el Poder Legislativo, en tanto representación del pueblo produzca las normas”.
Puso como ejemplo el desacato para utilizar el dinero de los 13 fideicomisos en Acapulco, que fue una decisión del Legislativo y “sin ninguna justificación”, el Poder Judicial se negó.
En este mismo discurso también habló de las resistencias a bajarse el sueldo, ya que aseguró que desde 2010 se debió acatar el límite de las remuneraciones.
“Creo que a nuestro país ayudaría diversificar el origen de los jueces, juezas, para fortalecer el sentido común de la justicia; sobre todo el de la justicia social, que presupone que, por ejemplo, ninguna persona servidora pública gane como actualmente sucede, 54 veces más, tan sólo nominalmente, que lo que significa el salario promedio de cada mexicana o mexicano”, dijo.
El puesto que ella ocupará tiene contemplado una remuneración nominal anual bruta de 5 millones 529 mil 451 pesos.
Estos últimos temas la acercaron, todavía más, al discurso y a las batallas del Presidente Andrés Manuel López Obrador.
LOS OTROS PUESTOS DE LENIA
Lenia Batres, de 54 años de edad, es oriunda de la Ciudad de México. Además de activista militó en los partidos de la Revolución Democrática (PRD) desde su fundación en 1989 hasta 2014, año en que participó en la fundación de Morena, su actual partido.
De acuerdo con su declaración patrimonial, estudió su licenciatura en Derecho en la Universidad Humanitas; cuenta con tres maestrías, una en Gestión Pública y Buen Gobierno, otra en Derecho Penal y en Estudios de la Ciudad. Del doctorado que cursó en la Universidad Nacional Autónoma de México, también de Estudios de la Ciudad cuenta con su certificado.
Los empleos que reporta en su declaración muestran que se ha desempeñado como asesora en Cámara de Diputados y también en la Ciudad de México, en donde trabajó en dos ocasiones en el equipo de Claudia Sheinbaum, precandidata única a la Presidencia de la República por parte de Morena.
De 2006 a 2009, Batres fue Secretaria Técnica en Diputados para la Comisión del Distrito Federal; de 2012 a 2015 fue asesora en la misma cámara en la Comisión de Vivienda, en donde se dedicó a elaborar proyectos de iniciativas y de 2016 a 2019 fue profesora en la Escuela de Derecho Ponciano Arriaga.
En ese periodo es cuando colaboró en el equipo de Sheinbaum, ya que de 2015 a 2018 fue asesora en la Delegación Tlalpan. Trabajó en la elaboración de propuestas para solucionar problemas administrativos.
Ya con Claudia en la Jefatura de Gobierno, estuvo menos de un mes al frente de la Autoridad del Espacio Público para pasar de inmediato, el primer día de enero de 2019, como asesora de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda.
En septiembre de 2021 empezó sus labores en la Consejería Adjunta de Legislación y Estudios Normativos de Presidencia. Su labor fue la elaboración o revisión de proyectos legislativos que llevaron la firma del Presidente.
En cuanto a sus bienes, la nueva Ministra declaró poseer aparatos eléctricos y electrodomésticos, como un refrigerador de 9 mil pesos y dos libreros de 5 mil pesos.
No reportó vehículos ni bienes inmueble ni tampoco posibles conflictos de interés.
