Ciudad de México, 28 de mayo (SinEmbargo).- Los senadores de oposición tenían razón al presentar su propuesta de Reforma Política al margen del Pacto por México: la iniciativa emanada de las dirigencias de los partidos políticos y del Gobierno Federal se quedó corta si se compara con los 30 puntos que integran la suya.

Este lunes ambas partes adelantaron, por separado y con sólo tres horas de diferencia, lo que será la base central de su propuesta para consolidar un régimen democrático equitativo, funcional y representativo.

Quizá como una amable concesión a los legisladores que se quejaron de que los acuerdos del Pacto por México se operaban “en lo oscurito”, el Consejo Rector dio un giro de 180 grados en la forma de procesar su propuesta rumbo a una Reforma Político-Electoral en México.

A diferencia de las iniciativas en materia Educativa y de Telecomunicaciones, por primera vez, el Pacto por México instaló una mesa de diálogo que atenderá todas las propuestas en la materia, principalmente la de los legisladores, y no se limitó a entregar un documento previamente “palomeado” al cual deban allanarse la mayoría de diputados y senadores.

“La mesa que hoy se instala deberá partir por escuchar, por incorporar todas las propuestas que se han vertido por el tema, pero tratando de establecer un método para procesarlas y para construir los acuerdos mayoritarios referidos para su aprobación en el Congreso”, indicó Gustavo Madero Muñoz, presidente del Partido Acción Nacional.

En el Palacio de Minería de la Ciudad de México, el jefe de la oficina de la Presidencia de la República, Aurelio Nuño, el Secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong y los dirigentes partidistas instalaron la mesa de diálogo que permitirá integrar las propuestas de la Reforma Política, la cual está dividida en tres ejes: Reforma secundaria en materia electoral; Ley de partidos políticos y Régimen político.

En medio del fastuoso escenario, acudieron a la instalación de la mesa los líderes parlamentarios del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en las Cámaras de diputados y senadores, Silvano Aureoles Conejo y Miguel Barbosa Huerta, respectivamente. Por lo que no era de extrañar que en el evento hubiera presencia mayoritaria de legisladores perredistas, a los que se sumaron unos cuantos panistas.

Sin embargo, llamó mucho la atención las ausencias de los que deberían ser los principales interesados. A la cita faltaron Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa Patrón, coordinadores parlamentarios del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Tampoco estuvieron presentes Luis Alberto Villarreal líder de los diputados panistas, ni Jorge Luis Preciado, recién nombrado coordinador de los senadores albiazules.

REFORMA POLÍTICA DE SENADORES DEL PRD Y PAN

Tres horas antes de la presentación en Palacio de Minería, senadores perredistas y panistas presentaron el documento “Para defender y profundizar la democracia”, un primer borrador de la futura propuesta de Reforma Política que presentarán formalmente el 3 de julio ante la Comisión Permanente.

Si bien los principales promotores de la propuesta alterna al Pacto por México, los senadores Ernesto Cordero y Miguel Barbosa, se cansaron de repetir que su propuesta no es un desafío a sus dirigencias partidistas, ni intenta rivalizar con los compromisos con el Gobierno Federal, lo cierto es que sus propósitos y argumentos son más sólidos que los planteamientos del Pacto.

El bloque de izquierda senatorial va más allá de eliminar las condiciones de inequidad en los procesos electorales, propone un cambio de fondo en el régimen de gobierno y la relación de la ciudadanía con las instituciones del Estado mexicano.

“Nos sirven para tres cosas. Primero para que las próximas elecciones sean libres y equitativas; segundo, para que podamos democratizar el régimen presidencial que es un régimen autoritario; y tercero, para que sometamos al conjunto de los poderes al control social, de los ciudadanos”, afirmó en entrevista el Senador perredista Manuel Camacho Solís.

En el rubro electoral, para evitar que el dinero sea quien defina el ganador de una contienda electoral, diputados y senadores plantean la fiscalización anticipada de todos los recursos del que dispongan partidos políticos y sus candidatos.

También piden “encarecer severamente la ilegalidad” y castigar con la nulidad de la elección e inhabilitación del candidato que rebase topes de gasto de campaña. Para el partido político, pérdida del registro y cárcel para los que participen en difundir propaganda o publicidad encubierta.

Para evitar que las encuestas favorezcan a un candidato en particular, proponen que los encuestadores revelen obligatoriamente la metodología, las fuentes de financiamiento y potenciales intereses económicos o mediáticos involucrados.

Proponen otorgar al Senado la facultad de desaparecer los órganos electorales estatales y entregar al Instituto Federal Electoral (IFE) la encomienda de organizar elecciones locales, cuando exista la sospecha de que los gobernadores están involucrados en favorecer a un candidato o partido político.

Para garantizar la legitimidad del Presidente de la República y de gobernadores electos, plantean instala la segunda vuelta electoral. Asimismo, plantean crear los gobiernos de coalición, a fin de garantizar gobiernos plurales, basados en programas incluyentes y de largo plazo.

En el rubro de gobernabilidad, los legisladores proponen dotar de autonomía a la Procuraduría General de la República (PGR), la cual deberá rendir cuentas a las comisiones de Justicia de ambas cámaras del Congreso de la Unión. Asimismo, informará de sus gastos presupuestales a la Auditoría Superior de la Federación (ASF), órgano que también depende de la Cámara de Diputados.

Pide un “autentico federalismo democrático” con la Reforma Política del Distrito Federal, y crear un cuarto nivel de gobierno: el comunitario.

Finalmente exponen la urgencia de incrementar la rendición de cuentas y la participación ciudadana. En este rubro se integran las propuestas de crear candidaturas independientes, la iniciativa popular, el plebiscito, el referéndum y el derecho de réplica.

El Senador perredista Manuel Camacho Solís rechazó que su propuesta tenga una dedicatoria especial para el PRI. “Es para todos, nos mete a todos en un sistema mucho más ordenado, más transparente y pues si las irregularidades las cometen el PRD o el PAN, que paguen por ello, crep yo que las irregularidades les afectan más al PRI -sobre todo en estados gobernados por priistas-, porque sigue prevaleciendo un sistema autoritario con muchísimas broncas”, apuntó.

REFORMA POLÍTICA DE LOS SENADORES AFINES AL PACTO

A diferencia de sus senadores, los presidentes del PAN, Gustavo Madero, y del PRD, Jesús Zambrano, consideran como prioritario para consolidar la democracia en el país, establecer candados electorales que garanticen la equidad en los procesos electorales.

“En el PAN hemos identificado como focos rojos de la transición democrática, la intervención de los gobiernos en los procesos electorales, la falta de pluralidad y formación de mayorías democráticas en los Congresos locales que combatan precisamente las prácticas autoritarias, la impunidad de los gobernadores y el sometimiento de los medios de comunicación locales y de las autoridades electorales a los gobiernos estatales” afirmó el líder nacional panista.

Indicó que la inequidad es tal, que en 22 estados de la República no ha llegado la alternancia política. “En 13 estados de la República el PRI ha gobernado en 78 de los 84 años de vida democrática, en nueve estados de la República, sin embargo, el PRI sólo ha gobernado 84 de los 84 años de vida democrática de nuestro país”, apuntó Madero Muñoz.

La demanda de “cancha pareja” no cayó bien al líder nacional priista, quien en su intervención alegó que no es culpa de su partido hacer las cosas bien para que la gente los vea como la solución a sus problemas. Y para apuntalar su dicho, agregó que no es su culpa el que la oposición haga las cosas mal para que los electores no los vean como opción confiable.

La demanda de equidad quedó de manifiesto también en los tres ejes de la propuesta de Pacto por México, la cual se concentrará primeramente en intentar sacar adelante las reformas secundarias en materia electoral, es decir, las propuestas de candidaturas independigentes, iniciativas ciudadanas, preferentes y la consulta popular.

Asimismo, en la propuesta para consolidar una Ley de partidos políticos, que en términos generales privilegiará la transparencia de recursos de las instituciones políticas e impondrá mayores controles para evitar que partidos y candidatos rebasen topes de gasto de campaña.

Los líderes partidistas de oposición también indicaron que la Reforma Política terminará con el “ciclo perverso del autoritarismo en los estados”. Mediante el cual, gobernadores estatales se sirven de los congresos locales para que aprueben sus endeudamientos irresponsables.

Los virreyes del país designan integrantes de los órganos electorales obsecuentes, combaten el surgimiento de fuerzas democráticas o mayorías opositoras, a través de la cooptación o por artificios legales, y controlan los medios de comunicación locales.

Todo con dedicatoria simplemente a controlar y acotar la planadora electoral priista.