La candidata pidió este viernes la colaboración de las autoridades locales del país para hacer frente a la crisis migratoria que atraviesa Europa.

El alcalde de Bristol, el antiguo liberaldemócrata George Ferguson, llamó a los ciudadanos a utilizar “habitaciones libres” en sus hogares para dar cobijo a algunos de los “desesperados” refugiados y aseguró que la ciudad acogerá a un número de personas aún por determinar, mientras que el alcalde de Liverpool, el laborista Joe Anderson, ha ofrecido acoger a cien refugiados.

Una encuesta divulgada hoy por el diario “The Times” indica que la opinión pública británica está dividida sobre cuál es la respuesta adecuada a la crisis.

Una estrecha mayoría del 51 % cree que el Gobierno no debería tomar más medidas para ayudar a los refugiados y un 47 % afirma que las fotografías publicadas esta semana del niño kurdo-sirio Aylan Kurdi ahogado en una playa de Turquía no han cambiado su postura sobre la necesidad de acoger a más refugiados en el Reino Unido.

Un 36 %, en cambio, señaló que las imágenes han contribuido a cambiar su opinión en favor de dar asilo a más ciudadanos que huyen del conflicto en Siria.

Cooper sostuvo que “hay una determinación real y un sentido moral cada vez mayor en el Reino Unido para ayudar a familias desesperadas”, y pidió al primer ministro, David Cameron, que el país esté “a la altura” de esas convicciones.

Según el ministerio de Interior, en los doce meses previos a junio 25.771 personas pidieron asilo en el Reino Unido, de las cuales 2.204 eran ciudadanos sirios.

En los últimos cuatro años, el país ha concedido protección a cerca de 5.000 refugiados de Siria.