El Gobierno de la Ciudad de México otorgó una partida extra de recursos para contratar a trabajadores eventuales en las seis delegaciones que gobierna el PRD, tres secretarías y el Sistema de Aguas durante el periodo electoral de 2016. La oposición acusa que ese dinero fue para operar un “ejército electoral” y exige que la Controlaría abra las carpetas y trasparente los nombres de los contratados.

 

Ciudad de México, 5 de septiembre (SinEmbargo).– El Gobierno que encabeza Miguel Ángel Mancera Espinosa en la Ciudad de México erogó 686 millones 880 mil pesos para contratar trabajadores temporales en las seis delegaciones que gobierna el Partido de la Revolución Democrática (PRD), en tres Secretarías y en el Sistema de Aguas durante el periodo electoral de 2016, aseguró Vidal Llerenas Morales, Diputado federal del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), en entrevista con SinEmbargo.

Al cierre de esta edición, el Gobierno de la Ciudad de México no había respondido a distintas solicitudes de entrevista, hechas por SinEmbargo desde el viernes 2 de septiembre, para aclarar o refutar la acusación.

El Diputado de Morena explicó que de acuerdo con el análisis de los datos otorgados el pasado 14 de julio de 2016 por la Secretaría de Finanzas del Distrito Federal, a través del Instituto de Transparencia, Acceso a la Información Pública, Protección de Datos Personales y Rendición de Cuentas de la Ciudad de México (InfoDF), los trabajadores eventuales de la partida 1221, fueron contratados bajo la posición presupuestal 12211115, con el Destino de Gasto 15.

En la información entregada a este medio digital por el legislador –que corresponde al segundo trimestre de 2016– se pudo constatar que únicamente las delegaciones que gobierna el PRD, la Secretaría de Medio Ambiente, la Secretaría de Obras y Servicios, Secretaría de Desarrollo Social (Sedeso) y el Sistema de Aguas de la Ciudad de México tienen cero pesos en el presupuesto original en la posición presupuestal que Llerenas asegura es la referente a los sueldos de los trabajadores eventuales, pero cuentan con recursos en el presupuesto modificado, programado y ejercido.

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De acuerdo con el cotejo de claves en el Catálogo de Centros Gestores de la Secretaría de Finanzas, la Delegación Álvaro Obregón recibió 11 millones 440 mil pesos; Coyoacán, 10 millones 770 mil; Gustavo A. Madero, 21 mil 700; Iztacalco, 8 millones 070 mil; Iztapalapa, 24 millones 820 mil, y Venustiano Carranza, 10 millones 80 mil pesos.

Mientras, la Secretaría de Medio Ambiente obtuvo una partida extra de 129 millones 680 mil pesos; la Secretaría de Obras y Servicios, 137 millones 700 mil; la Secretaría de Desarrollo Social, 140 millones 410 mil, y el Sistema de Aguas de la Ciudad de México, 192 millones 210 mil pesos.

En las elecciones de este año en la capital del país se votaron a los miembros que conforman la Asamblea Constituyente, y que se encargará de redactar la Constitución Política de la Ciudad de México.

La información fue entregada con base en una solicitud de información realizada por la oficina de Llerenas Morales sobre el analítico de claves de la Cuenta Pública de 2016, precisó el Diputado.

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La respuesta, de la cual tiene copia SinEmbargo, fue firmada por Carlos Córdova Castañeda, director de Integración e Información Presupuestal del Sector Paraestatal de la Secretaría de Finanzas del Gobierno capitalino.

Llerenas Morales dijo que “llamaba la atención” que las seis delegaciones y secretarías no contaban originalmente con un presupuesto para empleo eventual, pero durante el primer semestre de 2016 se les asignó el recurso.

Este medio solicitó su versión al Gobierno de la Ciudad de México, pero al cierre de la edición no había ningún posicionamiento al respecto.

 

CONTRALORÍA DEBE ABRIR EXPEDIENTES

“Ante la sospecha, la Contraloría de la Ciudad de México debe abrir los expedientes y decirnos a quiénes contrataron y para qué los contrataron. Lo raro es que hayan pasado dos cosas: que se haya incrementado esta partida de trabajadores eventuales en el momento de las elecciones. Dos, que solamente se la haya dado recursos a las delegaciones del PRD lo hace sospechoso”, precisó Vidal Llerenas.

El Diputado federal aclaró que tuvo información de primera mano en torno a que la contratación de trabajadores temporales se daría a través de tres pagos. Es decir, se esperaba que se erogaran mil 800 millones de pesos.

“Hay irregularidades. Es difícil que todas las personas que contrataron cubrieran los requisitos de contratación, porque lo hicieron en un periodo muy corto de tiempo”, agregó.

No es la primera vez que Vidal Llerenas y Morena, a través de Martí Batres Guadarrama, presidente de esa fuerza política en la capital, acusan al Gobierno de Mancera Espinosa de utilizar recursos públicos para uso electoral en favor del PRD.

En mayo de este año, Martí Batres acusó que el Gobierno de la Ciudad de México contrató un “ejército electoral” a través de una “Acción Institucional de Ingreso Económico Temporal”.

Según la versión del presidente estatal de Morena, el GDF contrató alrededor de 40 mil trabajadores eventuales durante la veda electoral.

De acuerdo con una publicación en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México emitida el 31 de marzo de 2016, la Oficialía Mayor solicitó la partida presupuestal 1221 denominada “Sueldos de Base al Personal Eventual”.

“El Gobierno de la ciudad abrió una Acción Institucional de Empleo Temporal como una forma de burlar las obligaciones de expedir un programa en forma, porque esta acción institucional no tiene reglas de operación, no se sabe cuántos son los beneficiarios, las metas físicas, qué presupuesto se le va a destinar, es la opacidad absoluta. Es un asunto muy delicado porque se han de estar transfiriendo más o menos unos 500 millones de pesos por lo menos a esta decisión. La información que tenemos es que se trata de un cuatro por cuatro y la ventaja que ellos tienen es enorme, cuando el tope de campaña para los partidos es de 20 millones de pesos”, dijo Batres Guadarrama en una entrevista con SinEmbargo, realizada en mayo pasado.

Martí Batres explicó que cada una de las “tribus” del PRD debía cumplir con una cantidad asignada de votos y de plazas que se cubrirían con los trabajadores eventuales.