Cinco relaciones de amor y odio en la política mexicana: de la amistad filial al insulto y la denostación

14/02/2014 - 12:02 am

Ciudad de México, 14 de febrero (SinEmbargo).– Las relaciones de apego no sólo se dan entre la familia, los amigos o  los amantes… también se establecen entre miembros de la clase política de México que por temporadas, por años o para siempre comparten su amor por la misma ideología. Sin embargo, esa felicidad no siempre es duradera pues, como en todas las relaciones, hay acuerdos, desacuerdos, conflictos y, por supuesto, rupturas.

Estas son cinco relaciones famosas de políticos mexicanos que alguna vez fueron grandes amigos o aliados, y que de una fuerte amistad y de la fidelidad absoluta pasaron a los insultos.

SALINAS DE GORTARI Y CAMACHO SOLÍS

El ex Presidente Carlos Salina de Gortari y Manuel Camacho Solís. Foto: Cuartoscuro
Manuel Camacho Solís y El ex Presidente Carlos Salina de Gortari y Foto: Cuartoscuro

Manuel Camacho Solís y Carlos Salinas de Gortari fueron entrañables compañeros desde la universidad. Su  amistad se vio refrendada por sus ideologías políticas de derecha hasta llegar a ser militantes del Partido Revolucionario Institucional (PRI). Siempre se les vio juntos en todos lados y así, un día de 1988, llegaron hasta la Presidencia de México.

En ese año, Carlos Salinas de Gortari fue declarado el primer mandatario de los Estados Unidos Mexicanos y de inmediato nombró a Manuel Camacho como el Jefe del entonces Departamento del Distrito Federal; el primero gobernaría al país y el segundo, a su capital. Esa mancuerna manejaría el rumbo de los mexicanos, ya que el ex Regente de la metrópoli más importante de México se convirtió en los ojos del Presidente, y su principal negociador con los partidos de oposición.

Sin embargo, el golpe que fracturó esa relación lo recibió Camacho Solís en 1993, cuando el PRI reveló que su candidato a la Presidencia era Luis Donaldo Colosio Murrieta y no él. Esa inconformidad la expresó de manera pública. Sin embargo, Salinas de Gortari lo nombró de inmediato titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), y posteriormente pasó a ser Coordinador por el Diálogo y Reconciliación por Chiapas, tras el levantamiento armado  del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN). Ese cargo, se especuló, le permitiría ser candidato en lugar de Colosio, según señalaron fuentes gubernamentales del aquel entonces, pero Camacho negó una nueva postulación.

Todo salió mal. El 23 de marzo de 1994, Colosio fue asesinado. En México se sospechó sobre la presunta culpabilidad de Camacho Solís y un año después dio el portazo final a su viejo amigo y compañero, Salinas de Gortari, así como al propio PRI . En 2003 buscó a la oposición, pues conocía bien Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano por  sus negociaciones como el Regente de la Ciudad de México, y fue postulado Diputado del Partido de la Revolución Democrática (PRD).

Algunos analistas de la política señalaron a José Córdoba Montoya, quien fuera Jefe de la Oficina de la Presidencia de México, como “la manzana de la discordia”, que manchó la imagen de Manuel Camacho ante los ojos del ex Presidente de la República.

Camacho Solís dejó al PRI y todos sus fantasmas atrás. Actualmente es Senador del PRD; sin embargo, algunos especialistas considera que sigue actuando como un priísta.

LOS HERMANOS MOREIRA

Rubén Morerira Valdés y  Humberto Moreira Valdés. Foto: Cuartoscuro
Rubén Morerira Valdés y Humberto Moreira Valdés. Foto: Cuartoscuro

Cualquier relación sufre desgastes y eso sucede  “hasta en las mejores las mejores familias”. Es el caso de los hermanos Moreira Valdés, quienes fueron protagonistas –y se dice que aún lo son– de una guerra abiertamente declarada.

La hermandad que unía a los Moreira, más allá de la sangre, se hizo notar cuando Humberto, Gobernador de Coahuila de 2005 a 2011 y ex dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), dio paso a su hermano Rubén para que sucediera en ese cargo. Sin embargo, no todo fue “mil sobre hojuelas”….

Todo inició cuando el hijo de Humberto Moreira, José Eduardo, quien era coordinador regional de programas sociales en el gobierno de Rubén Moreira, su tío, fue asesinado el 3 de octubre de 2012 en Ciudad Acuña, Coahuila. Luego de ese hecho comenzaron una serie de declaraciones entre los hermanos que dejaron ver una fractura familiar por conflictos políticos que, se dice, los ha llevado incluso al desprecio.

Humberto Moreira pidió que el gobierno de su hermano actuara de manera contundente en el esclarecimiento del asesinato de su hijo, y Rubén respondió que se realizaban las investigaciones pertinentes. Sin embargo, al no tener respuesta pronta, Lucero Davis, esposa del difunto, publicó  a través de su cuenta de Twitter: “@rubenmoreiravdz. No sabes gobernar!!! Esto es tu culpa maldito!!!! Renuncia”; también trascendió en los diarios nacionales que el tío de José Eduardo no se apareció en sus funerales, lo que dejó en claro la mala relación de los hermanos Moreira.

Posteriormente, Rubén se encargó de difundir la pésima administración que le había heredado su hermano al otorgarle un estado endeudado por 35 mil millones de pesos, de los cuales, cerca de 5 mil se obtuvieron de manera ilegal, según informó el 1 de diciembre del año pasado.

“Fue su opción al desarrollo. Pero una cosa que no se puede justificar de la deuda es la forma en que se pidieron los créditos”, declaró.

Además, en noviembre pasado, el mandatario de Coahuila, Rubén Moreira Valdez, admitió que durante el gobierno de su hermano Humberto, la delincuencia organizada logró el dominio casi total del estado.

“(En 2011) estábamos a punto –si no es que ya había sucedido–, de que el monopolio de la autoridad no lo tuviera el gobierno, sino lo tuviera la delincuencia”, dijo en una entrevista con el diario Vanguardia.

ELBA ESTHER, CHUAYFFET Y EL PRI

Elba Esther Gordillo, Roberto Madrazo, Emilio Chuayffet. Foto. Cuartoscuro
Elba Esther Gordillo Morales, Roberto Madrazo, Emilio Chuayffet. Foto. Cuartoscuro

Pese a que eran hijos de la misma casa, Elba Esther Gordillo Morales, ex lideresa del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), y Emilio Chuayffet Chemor, ahora titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), encabezaron una batalla que terminó con la expulsión de la “Maestra” del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y, años después, en febrero de 2013m con su encarcelamiento ordenado ya en el sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto.

En 2003, Emillio Chuayffet logró quitarle a Gordillo la Coordinación del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados, porque ella deseaba la aprobación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en medicinas y alimentos, cuestión a la que sus compañeros se opusieron rotundamente. Ese movimiento fue una de las tantas agravantes para la expulsión de la líder del SNTE del Revolucionario Institucional, en el que además participaron sus compañeros legisladores de Oaxaca.

De acuerdo con la revista Proceso, Elba Esther dijo en 2005: “Chuayffet declaró que estaba excomulgada. En efecto: me ‘excomulgarán’ de una secta cuyo credo es la mentira, la simulación, la traición y la ambición desmedida (…) Yo no profeso la religión de la mentira, por ello, nunca estaré de rodillas en el altar de Roberto Madrazo. Esa es tarea de individuos como Emilio Chuayffet”.

Los priístas echaron de su partido a la líder sindical en julio de 2006 cuando la Comisión de Justicia Partidaria aprobó el dictamen respectivo, el cual argumentó que la “Maestra” promovió “la formación de un partido antagónico” y respaldó a “candidatos de partidos distintos” al tricolor.

Algunas fuentes señalaron que la expulsión de la profesora se debió a que llamó “traidor” a Roberto Madrazo Pintado, además del respaldo que otorgó al Partido Acción Nacional (PAN) al apoyar a Felipe Calderón Hinojosa como candidato a la Presidencia en 2006, lo que comprobó tras difundirse una conversación telefónica que sostuvo con el entonces Gobernador de Tamaulipas, Eugenio Hernández Flores.

“Hay que saber cómo actuar, y aquí sí viene la decisión de fondo, porque la información que hay acá, en los estados de nuestros amigos, Tamaulipas y Coahuila, están con todo por el PRI y van a hablar. No sé si ya hablaron. Vale más que ustedes se adelanten, si así lo deciden, con Felipe, para vender lo que tengan. El PRI ya se cayó, ¿eh?”, le dijo la profesora Gordillo al mandatario tamaulipeco.

–No, eso nos queda muy claro –le dijo el Gobernador.

–No sé por dónde andes, por azul o por amarillo, pero si va por azul es lo que pensamos, vale más hablarle a Felipe y decirle algo para no quedar mal.

–Aquí estamos haciendo la chamba, eh, por ahí…. este…

–Por eso quise hablar, porque el informe que tienen es que todo para el PRI, y no es verdad, porque eso es institucional. Ante la caída, creo que lo interesante es hablar con Felipe y vendérselo.

El 26 de febrero del año pasado, la Procuraduría General de la República detuvo a Elba Esther Gordillo por el de presunto desvío de fondos para su uso personal, procedentes de las recaudaciones del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Educación. Actualmente permanece recluida en la cárcel de Tepepan, en la Ciudad de México.

 VICENTE FOX: DE HÉROE A “CÍNICO”

Vicente Fox Quesada, ex Presidente de México (2000-2006).  Foto: Cuartoscuro
Vicente Fox Quesada, ex Presidente de México (2000-2006). Foto: Cuartoscuro

Vicente Fox Quesada, ex Presidente de México, le dio gloria a los panistas luego de convertirse en el primer mandatario de México del Partido Acción Nacional (PAN) en 2000, y quien derrocara al Partido Revolucionario Institucional (PRI) tras un reinado de 70 años.

En aquel entonces, Vicente Fox no sólo se echó al bolsillo a miles de mexicanos, sino también a cientos de militantes del PAN que vieron con buenos ojos la entrada a Los Pinos de quien calificaban como un “líder carismático y sencillo”. Sin embargo, luego del saldo que dejara su sexenio y acciones posteriores a éste, como el respaldo que le dio a la campaña presidencial del priista Enrique Peña Nieto, hoy el ex mandatario está lejos del PAN y es incluso una de las figuras más repudiadas entre sus ex compañeros de partido.

El 4 de julio de 2012, el Diputado Óscar Marín Arce Paniagua entregó una solicitud formal a la Oficialía de Partes para que Fox Quesada fuera expulsado del PAN. En dicha solicitud se reunieron diversas pruebas, incluso una entrevista al diario El País, en las que ex Presidente evidenciaba su apoyo a Peña Nieto, y olvidaba el trabajo de la ex candidata a la Presidencia, Josefina Vázquez Mota, por lo que, según los diputados panistas, violaba el Artículo 16 de Sanciones del PAN.

En junio de 2012, el vocero del partido panista, Javier Lozano Alarcón, calificó a Fox de “cínico, cobarde, miserable, convenenciero y porro” de Peña Nieto, y agregó: “Hoy Calderón ha tenido que recoger el tiradero de lustros de irresponsabilidad y cobardía de Presidencias anteriores, incluida la suya (la de Fox)”.

 ROSARIO ROBLES Y EL PRD

Rosario Robles, Secretaria de Desarrollo Social Foto: Cuartoscuro
Rosario Robles, Secretaria de Desarrollo Social Foto: Cuartoscuro

Rosario Robles Berlanga, actual titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), fue fundadora del Partido de la Revolución Democrática (PRD), instancia política que le permitió en 1997 ser la única mujer que hasta ahora se ha desempeñado como Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, y presidenta de ese partido en 2003.

Robles Berlanga y el PRD tuvieron por muchos años una relación muy estrecha, hasta que el panorama se volvió turbio. Los videoescándalos de marzo de 2004, donde apareció el empresario argentino Carlos Ahumada Kurtz, entonces novio de Robles Berlanga, sobornando con fajos de billetes a perredistas, encabezados por René Bejarano Martínez, la cubrió de críticas por parte de la opinión pública y, en especial, de los militantes de su partido.

Semanas después de esos hechos que evidenciaron corrupción y tráfico de influencias, renunció al PRD y por muchos años estuvo lejos de los reflectores de la política.

Pero, cuando Enrique Peña Nieto asumió la Presidencia de México en 2012, la colocó como encargada del desarrollo social de los mexicanos, acción que la volvió a poner en el ojo del huracán y por la que fue calificada de “traidora”.

El 5 de septiembre usuarios de la red social Twitter manifestaron su desacuerdo por la integración de Robles Berlanga al gabinete priísta.

@La_War: “La que traiciona una vez… es como el cuento de la rana y el alacrán donde Rosario Robles, obvio, es el alacrán”.

“[El nombramiento de Rosario Robles] es una vergüenza para todos, también para Peña, en donde también la lógica de la cooptación, de la compra de conciencias, pues va a querer volverse a instalar como una vieja práctica de los mexiquenses ahora en la Presidencia”, comentó uno de sus viejos camaradas, Alejandro Encinas.

 

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