Ciudad de México, 18 de octubre (SinEmbargo/Noroeste).– Everard Meade, investigador de la Universidad de San Diego, aseguró que un nuevo desplazamiento de personas podría registrarse en Sinaloa, sólo que éste sería de niños huérfanos de padres asesinados o desaparecidos, los cuales, dijo, no son reconocidos ni tratados por el Gobernador Mario López Valdez cuya administración, manifestó, no cuenta con una correcta política pública de prevención de violencia.
El académico, especializado en tránsito de niños migrantes en Estados Unidos, declaró que el fenómeno de migración infantil es el resultado de un alto índice de violencia que no ha podido ser erradicado por los gabinetes de los estados.
De acuerdo con un estudio realizado por la Universidad de San Diego, de 10 mil niños migrantes que se registraron en Estados Unidos en 2013, la mayoría corresponde a estados como Michoacán, Guerrero y Tamaulipas, estados que se colocan como las principales entidades con mayor número de homicidios y desapariciones.
Sin embargo, la investigación indica que otros estados como Sinaloa, Baja California y Veracruz podrían tener el mismo resultado de migración infantil por no tener una correcta política pública de prevención de la violencia, económica y educativa que impulse el desarrollo de los niños desde su lugar de origen.
“En las historias que nos cuentan los niños migrantes, están huyendo por razones muy parecidas a las de los centroamericanos, están huyendo porque son de Michoacán y los narcos llegaron a su pueblo, porque sus padres fueron asesinados o desaparecidos, sus padres están en Estados Unidos con familiares”, afirmó Meade.
“Los niños están sujetos a extorsiones, corrupción local o falta de empleo y educación mezclada con la violencia, son historias muy parecidas”, dijo.
El fenómeno de migración infantil, agregó, ha generado en Estados Unidos un debate extenso sobre el tipo de trato que se debe otorgar, esto a partir de que los tratados internacionales que se tiene en ese país no incluyen el recibimiento y alojo de menores como factor de ayuda colateral.