Ciudad de México, 20 de agosto (SinEmbargo).– Los estudiantes de Oaxaca pierden una cuarta parte del ciclo escolar debido a los paros magisteriales, no están recibiendo una educación de calidad y más del 80 por ciento de los jóvenes de 15 años reprueban o pasan de panzazo un examen riguroso, aseveró el presidente de la organización Mexicanos Primero, Claudio X. González Guajardo.
González Guajardo envió una carta abierta a los diputados de Oaxaca para pedirles que no se rindan ante la Sección 22, de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) y que no aprueben la Ley Estatal en materia de educación que incluye el proyecto del magisterio.
Y detalló que los niños y jóvenes oaxaqueños no están recibiendo una preparación de calidad. “El promedio de escolaridad en la entidad es de primero de secundaria y más del 80% de los jóvenes de 15 años reprueban o pasan de panzazo una evaluación rigurosa”, refirió.
Dijo que año con año los alumnos pierden cerca de una cuarta parte del ciclo escolar por paros magisteriales, que deja a los niños y jóvenes de Oaxaca en una “profunda desventaja frente a otros mexicanos y frente a los jóvenes de otras nacionalidades”, advirtió.
Destacó que las próximas horas son cruciales para la educación en Oaxaca y, por lo tanto, para el futuro bienestar, progreso y equidad del estado.
“En las próximas horas ustedes van a votar una iniciativa de ley que es una afrenta al Artículo 3º Constitucional y su legislación secundaria. Tiene graves omisiones y francas contradicciones con la ley federal que se detallan en los documentos que se anexan.
“Si la avalan, sería tanto como crear un estado de excepción para la implementación de la reforma educativa en Oaxaca. No serían aplicables políticas tan importantes como los concursos para plazas, la evaluación universal de maestros y la Carrera Profesional Docente. Peor todavía, se legitimaría el poder abusivo, casi omnímodo, de que goza la sección XXII en la educación del estado”, señaló Claudio González.
Instó a los legisladores a romper viciosos y atavismos para poner a los niños y jóvenes de la entidad primero, pues aseguró que por demasiados años y décadas, han imperado los intereses de los adultos sobre el derecho de los menores. “Eso ha resultado en una pauperización del sistema educativo, en una amplísima corrupción y en el abandono de los niños, las escuelas y los verdaderos maestros”, reiteró.
Finalmente aseveró que “si de verdad quieren avanzar, deben de modificar la iniciativa y armonizarla con la legislación federal”.
