El BID suspende préstamos para Venezuela tras el retraso en el pago de una deuda de 88.3 millones de dólares

23/05/2018 - 9:58 am

El Banco Interamericano de Desarrollo anunció la suspensión de préstamos para Venezuela debido al retraso en el pago de una deuda mayor a 88 millones de dólares, esto deja sin una importante fuente financiera al país suramericano.

El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acompañado por su esposa Cilia Flores. Foto: Ariana Cubillos, AP.

Washington, 23 de mayo (EFE).- El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) anunció hoy la suspensión inmediata de sus préstamos a Venezuela por incumplir unos pagos atrasados de 88.3 millones de dólares, lo que cierra el acceso a una fuente de financiación clave en la región y refleja la difícil situación económica de Caracas.

“El lunes 14 de mayo, Venezuela llegó al límite de 180 días que el Banco Interamericano de Desarrollo contempla para pagos en mora por un importe de 88.3 millones, quedando en condición de no devengamiento”, indicó el BID en un comunicado remitido hoy a Efe.

Como consecuencia, agregó, “bajo las normas del BID sobre pagos en mora, el Banco no puede realizar ninguna actividad de préstamo con Venezuela hasta que salde su mora”.

La deuda total de préstamos de Venezuela con la institución financiera regional es de 2.011 millones de dólares, y de ellos 212.4 millones están en mora, aunque solo una porción de ellos han superado el límite de retraso de 180 días.

La deuda de Venezuela representa 1.6 por ciento de los activos totales del BID.

Esta suspensión constata las dificultades del gobierno de Nicolás Maduro para hacer frente a sus obligaciones internacionales, en un momento de agravada crisis económica.

Los atrasos en los pagos de Caracas al BID se suman, asimismo, a la crítica formal la pasada semana del Fondo Monetario Internacional (FMI) por la falta de información económica detallada, una obligación que tienen todos los países miembros de la institución.

A comienzos de este mes, el FMI emitió una “declaración de censura” contra Venezuela, sumida en una profunda recesión, por no suministrar datos oficiales sobre la evolución económica del país.

Como consecuencia, Venezuela no podrá acceder a recursos del Fondo y de proseguir sin entregar los datos requeridos podría perder su derecho de voto y verse ante una eventual salida del organismo.

En su reciente asamblea de primavera, el Fondo catalogó de “dramática” la situación que se vive en Venezuela, cuya economía se contraerá este año un 15 por ciento y un 6 por ciento más en 2019.

Además, prevé que la inflación en Venezuela ronde el 14 mil por ciento en 2018, alimentada por la pérdida de confianza en la moneda nacional, una situación acrecentada por el colapso en la producción de petróleo y su exportación.

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