Ciudad de México, 26 de octubre (SinEmbargo).– La crisis financiera es como una gota de agua: provoca un impacto pero termina por desvanecerse; el sistema financiero actual no es diferente al que teníamos en 2008 cuando todos creyeron que sería el fin del mundo, aseguró Steven Levitt, coautor de los libros Freakonomics y Superfreakonomics.
En su visita a México con motivo de su participación en el World Bussines Forum México, el profesor emérito de Economía de la Universidad de Chicago, habló en entrevista para SinEmbargo sobre el impacto de la actual crisis económica y si los constantes giros en la materia permitirán que en un futuro sigan existiendo los llamados multimillonarios.
Levitt, reconocido como una de las 100 personas más influyentes del mundo por la revista Time, revolucionó la forma de pensar en economía a partir de su co-autoría en Freakonomics, en 2005, libro realizado a partir de la visión de “un economista políticamente incorrecto” y el periodista Stephen J. Dubner. Durante cuatro años, el libro se mantuvo en la lista de best sellers de The New York Times, los números en ventas rebasaron los cinco millones de ejemplares y se tradujo en 35 idiomas, convirtiéndose así en un fenómeno cultural.
El libro es una compilación de artículos relacionados con la economía escritos por Levitt, y orientados a un segmento amplio de la población. Steve Levitt ya era reconocido en el medio académico por aplicar la teoría económica a diversos temas de los que no suelen ocuparse los economistas ortodoxos.
UN MUNDO DE MULTIMILLONARIOS
— Actualmente, cuando un país cae en crisis, arrastras a todos, ¿la crisis económica europea debe ser ejemplo de que debe replantearse el modelo de globalización?
— No conozco muy bien la crisis económica europea, pero cuando fue la crisis en Estados Unidos, las personas la vieron como el fin del mundo. Al final de cuentas no fue tan mala como se pensaba. Es complicado saber si el hecho de preocuparse fue lo que provocó la crisis o si gracias a eso la crisis no fue tan dura.
Hay una excesiva preocupación por la situación financiera en el mundo, pero cuando realmente observamos y analizamos, el sistema financiero actual no es muy diferente al que teníamos en 2008. La crisis financiera es como una gota, provoca un impacto, pero termina por desvanecerse.
— ¿La situación económica actual permitirá que sigan existiendo los multimillonarios?
— Sí, indudablemente. La economía actual a nivel global provoca muchas desigualdades y por otro lado, en el mercado, una buena idea te da mucho dinero y así se crean los millonarios.
Todo tiene sus cosas buenas y malas. Lo positivo está en que hay personas con buenas ideas y eso ayuda a que pueden mejorar muchas cuestiones y al mismo tiempo, iniciamos a darle valor a otras cosas. En lo negativo, nos encontramos que es muy difícil gestionar una sociedad en la que se contraponen muchos individuos ricos con muchos pobres.
— ¿Qué opina de los multimillonarios?
— Son personas que se enriquecen a través de buenas ideas y yo siempre estaré a favor de eso. Sin embargo, la pregunta es más difícil de responder cuando se trata de personas que hacen mucho dinero con cosas que realmente no son productivas y que no sirven a la sociedad.
Lo que habría que preguntarse realmente es, si me pusieran a elegir entre lo que realmente quiero: un mundo donde hay un mercado con ideas interesantes, pero en el que hay desigualdad, o un mundo sin innovación, pero con igualdad, elegiría el primero. Ya tuvimos el ejemplo de la Unión Soviética, el socialismo y el comunismo y no funcionó.
— ¿Es de mal gusto tener tanto dinero en un país con millones de pobres?
— Es difícil, yo no lo llamaría de mal gusto, la cuestión es determinar cuáles son las responsabilidades sociales de una persona que tiene mucho dinero, porque deberían tenerlas.
Yo sé ayudar a las personas para que hagan y en consecuencia ganen mucho dinero. Eso sí, los millonarios tienen la opción de decidir cómo gastarán su dinero, si quieren comprarse un carro lujoso o quizá contemplar la posibilidad de hacer donaciones a un hospital o una ONG.
EL ÉXITO ESTÁ EN LO OBVIO
Durante su ponencia, Levitt compartió con los líderes empresariales algunas ideas sobre el camino que lleva a las personas a encontrar proyectos exitosos.
“La brillantez está en la lógica, en cosas pequeñas y obvias (…) cosas en las que la gente no se detiene a pensar; eso puede convertirse en ideas transformadoras”.
Añadió que la cultura del “nunca renuncies” debería borrarse, “es falsa, se vale renunciar para buscar algo mejor”.
Finalmente, platicó sobre freakonomicsexperiments.com, su proyecto más reciente. Esta página ayuda a las personas a tomar decisiones y al mismo tiempo, para Levitt es su nuevo experimento.
“Nos dimos cuenta que la gente seguía lo que le recomendábamos que hiciera, si tenía que renunciar o dejar a su actual pareja, por ejemplo; en un seguimiento que hicimos seis meses después, tuvimos como resultado que la gente que nos hizo caso era más feliz y estaba satisfecha con la decisión, al contrario de la que no lo hacía”.
