¡Odio mi cuerpo!

05/12/2013 - 12:03 am

Sol es una adolescente adorable, hija de una amiga querida a quien amo profundamente. Allí estaba sentada frente a mi con una escualidez que sólo vemos en personas con enfermedades graves. Los brazos delgaditos, la quijada marcada por la piel que perdió su lozanía por falta de alimentos. Las piernas como las de una niña de diez años; lo ojos hermosos y maquillados pero la mirada triste.

Ella tiene claro que su incursión a las prácticas de bulimia (comer y vomitar los alimentos) comenzó por una amiga de la secundaria. Le convenció de que es una buena idea parecer modelo y logró incidir en tres amigas con el argumento de que esto era temporal.

Sol lleva años en terapia y haciendo trabajo personal cada día para abatir la obsesión/adicción a la delgadez y el temor a la grasa corporal. La batalla no ha sido fácil, ha recaído varias veces, la disciplina  y el afecto son la mejor medicina, pero su entorno no la ayuda.

Ella es una, entre millones de mujeres jóvenes, que sin darse cuenta, comenzó a odiar su cuerpo, y junto a sus desórdenes alimenticios, llegaron también prácticas sexuales de riesgo.

En un estudio llevado a cabo por el Instituto Nacional de salud cardiaco-pulmonar en Estados Unidos el 40% de niñas de entre 9 y 10 años han intentado por primera vez bajar de peso para parecerse a las modelos o artistas que admiran. En ese mismo país un estudio muestra que el 78% de adolescentes de 16 y 17 años dicen odiar su cuerpo y mientras más tiempo pasan mirando videos musicales con cantantes hiper-delgadas y series de televisión con modelos y artistas con rasgos casi cadavéricos, más angustia sobre su cuerpo desarrollan. Mientras que el 56% de los comerciales llaman a las mujeres de todas las edades a ocuparse de su apariencia, delgadez y belleza sólo el 3% se dirige en ese tema a los hombres, según el estudio que la Kaiser Foundation llevó a cabo para entender cómo los medios de comunicación incluidas la televisión y las revistas de todo tipo, inciden en la construcción de la autoimagen corporal. Sólo en este país promedio de mil mujeres jóvenes mueren cada año en  como resultado de Anorexia/Bulimia no atendida a tiempo.

Es normal que en la adolescencia, cuando sus cuerpos comienzan a cambiar radicalmente, tanto niñas como niños desarrollan inseguridades basadas en sus propios cambios físicos y hormonales, pero también en la persistente -y a veces insidiosa- comparación y competitividad generada por el mundo del entretenimiento. Las adolescentes comienzan a imitar comportamientos actuados en el cine y la televisión; las chicas se obsesionan en su apariencia, los chicos comienzan a juzgar muy duramente a las niñas por su estética, las tiendas venden ropa talla 4 como si fuese la más normal. En varios países los anunciantes que falsifican estructura corporal para vender cosméticos son multados y las autoridades han comenzado a exigir que se ponga en las fotografías de las revistas una leyenda que diga que la modelo ha sido reconstruida. Mire este video y sabrá por qué se intenta develar la manipulación estética:

En Inglaterra se hizo un estudio para conocer la auto concepción de cuerpo que tienen las adolescentes que han comenzado su vida sexual; el 92% dijo estar descontentas o avergonzadas con su cuerpo: Al mostrarles revistas “femeninas” para que manifestaran cuál es su prototipo de estética femenina ideal, la gran mayoría eligió a modelos que claramente están reconstruidas como programas que falsean no sólo la piel y las facciones, sino las dimensiones del cuerpo. Las chicas cuyas madres se han hecho cirugías plásticas tienen 200% más inseguridades que aquellas cuyas madres no tienen obsesiones transformadoras con su apariencia. Las televisoras promueven cada vez más la delgadez en sus artistas.

En un programa de sexualidad para adolescentes que se lleva a cabo en Inglaterra, las especialistas han podido demostrar que mientras más insegura sobre su cuerpo es una adolescente, más probabilidades tiene de ponerse en situación de riesgo en las que decide aceptar sexo que no desea para sentirse socialmente aceptada, o termina expuesta a una violación por no saber cómo evaluar ciertas situaciones.

Las especialistas se preguntan ¿qué hacemos ante esta situación?.

Funciona muy bien que el padre, tutor o algún hombre cercano a la familia, se prepare para hablar con la chica sobre cómo los hombres de verdad perciben la belleza femenina. Aterrizar la diferencia entre la ficción y la realidad. Las madres y abuelas de chicas con desórdenes alimenticios como anorexia y bulimia, deben pensar que decidir hacerse cirugías plásticas mientras su hija pasa por un proceso terapéutico puede mandarle el mensaje equivocado.

No importa cuantas veces se repita, la educación sexual es indispensable para niñas y niños desde los diez años. Dado que la edad promedio en que experimentan su primer coito es a los trece años, sabemos que comienzan los escarceos, besos y en ocasiones el sexo oral desde los once años aproximadamente. Si una niña que está justo en la fase de desarrollo físico se siente incómoda e insegura con su cuerpo, necesita que quienes la educan le ayuden a apropiarse de su cuerpo, que entienda qué es el sexo y que sepa que ella puede tomar decisiones a la edad que deseo y no cuando las amigas o amigos le digan que debe hacerlo. Las y los adolescentes que han recibido educación sexual y emocional adecuada tardan mucho más en empezar su vida erótica, porque toman decisiones informadas y sólidas que les dan seguridad emocional. Aquí algunas preguntas que podemos entregar a las adolescentes para discutir y ayudarles a elaborar sus propias respuestas:

¿Qué hago si una amiga me dice que es bueno vomitar o dejar de comer para estar delgada como las modelos?

¿Cuántas modelos/ actrices de las revistas de ven así en la vida real?

¿Qué es lo que más me gusta de mi personalidad? (pega tu lista en la pared de la habitación o junto a un espejo)

¿Cuáles son las cualidades que más admiro en las mujeres?

¿Me siento cómoda besando a  alguien en la primera cita?

¿Hasta dónde yo quiero llegar cuando salgo con alguien?

¿Tengo derecho a decir que sólo quiero besar y abrazar pero no que me toquen en otros lugares?

¿Cuándo creo que sería la mejor edad para que yo tenga sexo por primera vez?

¿Qué haría yo si un niño quiere tocar mis senos o genitales y yo no quiero?

¿Si un chico me dice que no será mi novio si no tengo sexo con él, que debo hacer?

¿Puedo distinguir la diferencia entre el sexo oral, el sexo anal y el sexo vaginal?

¿Qué digo si un niño me pide que le haga sexo oral y no sé si quiero?

Vea el video con adolescentes, es una buena pieza para discutir la falsa construcción de la estética femenina. Entre en la computadora y googlée imágenes de las actrices y cantantes tomadas por paparazzis en lugares como la playa, o escenas de la vida cotidiana. Mírelas con las adolescentes y compárelas con las imágenes falseadas de las revistas.

Descalificar a las chicas y acusarlas de superficiales sólo les hace más daño, es importante que hombres y mujeres adultas les hagan saber lo que es una mujer real, segura de si misma ¿no cree?

Artículo relacionado: http://www.sinembargo.mx/10-09-2011/37977

Lydia Cacho
Es una periodista mexicana y activista defensora de los Derechos Humanos. También es autora del libro Los demonios del Edén, en el que denunció una trama de pornografía y prostitución infantil que implicaba a empresarios cercanos al entonces Gobernador de Puebla, Mario Marín.
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