Ciudad de México, 7 de julio (SinEmbargo).– Un grupo de ahorradores de Ficrea pidió el 14 de mayo que el proceso de liquidación de la sociedad financiera entre a concurso mercantil por abstenerse de “realizar el pago”.
El dos de julio un juez federal procedió al análisis de la demanda. Lo que se pretende es que Ficrea se declare en quiebra y, ya monetizado el capital, finalmente pague a los defraudados.
Guillermo Campos Osorio, juez Décimo Cuarto de Distrito en Materia Civil, comentó que los ahorradores tienen la legitimidad de solicitarlo: a pesar de que la Ley de Ahorro y Crédito Popular y la Ley de Concursos Mercantiles reserva esa medida jurisdiccional a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), “los acreedores también pueden demandar en concurso cuando se incumpla con la obligación pactada”, detallan sus artículos.
De acuerdo con Adrián González, uno de los ahorradores afectados, este recurso es una de las pocas acciones judiciales que a lo largo de ocho meses se ha dictaminado a su favor y que en términos generales es un fallo que los aproxima a recuperar el 100 por ciento de dinero, además de que tema Ficrea ya no estará en manos de la CNBV.
“En el concurso mercantil entra el total de recursos para ser distribuidos de manera proporcional con los ahorradores […] también se incluyen los impuestos que se han generado en todo este tiempo, los costos con los proveedores a los que no se les deben más de seis millones; también se incluyen a los trabajadores, pero la mayoría de éstos estaban contratados por outsourcing, así que no hay recursos que se le vayan a quitar a Ficrea”, explicó González.
Desde que salió a la luz el desfalco de Ficrea, un caso más en la lista de ahorradores defraudados por entidades de ahorro popular, las autoridades concentraron la atención en la figura de Antonio Rafael Olvera Amezcua, el socio mayoritario de esa Sociedad Financiera Popular (Sofipo), y quien fue señalado por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) como el culpable de la desviación de 2 mil 700 millones de pesos, en una maniobra de triangulación de varias de sus empresas, entre éstas Baus & Jackman Leasing, Monka Comercial y Leadman Trade.
La CNBV argumentó que dicho monto fue utilizado para transferencias internacionales, para la nómina de 781 empleados de diferentes empresas y para comprar dos inmuebles –uno de ellos un edificio en Londres, Inglaterra–, 52 propiedades más, 104 automóviles (de marcas como BMW, General Motors y Porsche) y gastos en eventos de box, teatro y de la Serie Nascar de automovilismo.
El expediente del caso expone que “se consideró que los promoventes en su calidad de acreedores cuentan con legitimación para demandar la declaración de concurso que pretenden como derecho fundamental de acceso a la impartición de justicia”.
El juez también dictó medidas cautelares para proteger los bienes de Ficrea. Las oficinas y sucursales de Ficrea se cerrarán temporalmente, y tiene prohibido hacer cualquier pago de obligaciones vencidas con anterioridad al presente año.
Otras medidas son la suspensión de todo procedimiento de mandato de embargo o ejecución en contra de los bienes y derechos de Ficrea.
