La abuela de Carlos Alejandro, el presunto homicida, reprobó la actitud de su nieto, pero ahora teme por la seguridad de toda la familia ante más represalias.
Por Jetza Múzquiz
Satillo/Ciudad de México (Vanguardia/SinEmbargo).- Los parientes de Carlos Alejandro Reyna Vázquez, alias “El Borolas”, vivieron momentos de pánico poco antes de las 06:00 horas de ayer viernes, cuando personas desconocidas —se presume que eran amigos de José Blas, quien fue asesinado de certera puñalada en la calle Morelos casi esquina con Félix U. Gómez, en la zona centro de Saltillo, en Coahuila—. atacaron la vivienda en la calle Nicolás Regules, de la colonia Bellavista.
Vecinos del sector argumentan que en la vivienda se encontraban los abuelos del ahora detenido acusado de quitarle la vida de un navajazo a José Blas Alvarado García, de 30 años, en complicidad con otras dos personas.
“Ese ‘Borolas’ es toda una fichita, es hijo de un señor que nada más sé que le dicen ‘El Coreano’; se dedicaba hace mucho a la venta de droga, por eso lo metieron al penal y tiene poco de haber salido, pero siempre ha sido muy agresivo”, explicó Horacio, vecino del lugar desde hace 12 años.
La abuela de Carlos Alejandro menciona que reprueba la actitud de su nieto, quien ya está detenido y va a tener que pagar por lo que hizo, pero ahora teme por la seguridad de toda la familia ante más represalias.
Junto a Carlos Alejandro fueron detenidos Karina Iveth Calvillo Zacarías, de 33 años, y Martín Velázquez López, de 35 años, quienes están a disposición de la Unidad de Investigación de Homicidios por su participación en los hechos violentos.
Presuntamente “El Borolas” sería el autor material del homicidio, ayudado por los otros dos cómplices, siendo Martín quien lo acompañaba al momento de la agresión, mientras que Karina los quiso ayudar a escapar conduciendo un auto Topaz.
Las autoridades trabajan para integrar la carpeta de investigación por el delito de homicidio para poder judicializarlo en las próximas horas, contando hasta el mediodía de ayer con la declaración de al menos seis testigos.
En agosto pandilleros de la colonia La Palma incendiaron dos viviendas en venganza por el asesinato de “El Rolly”.
‘Infierno’. El domicilio ubicado en la calle Nicolás Régules, en la colonia Bellavista, fue incendiado presuntamente por conocidos del occiso José Blas Alvarado.
