El motivo de la reducción de la tasa de mortalidad se debe principalmente a que los adultos tienen menor probabilidad de ser asintomáticos, reduciendo el nivel contagio al ser puestos en cuarentena desde los primeros días.
Ciudad de México, 12 de noviembre (RT).- Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Haifa (Israel), indica que si las personas socializan dentro de sus propios grupos etarios las muertes por COVID-19 se podrían reducir significativamente.
Los resultados de la investigación, publicada este miércoles en la revista Open Biology, sostienen que la tasa de mortalidad por coronavirus podría reducirse entre el 62 y el 93 por ciento si los mayores de 55 años sólo socializaran con coetáneos.
Los científicos realizaron una simulación por computadora a gran escala, que evaluó diferentes escenarios que podrían ser útiles para aliviar las medidas de bloqueo impuestas en varias partes del mundo para evitar la propagación de la enfermedad.
En la simulación se evaluaron cinco tipos de liberación de bloqueos parciales, restringiendo las conexiones entre diferentes grupos de edad en todos ellos, en concreto la población mayor.
𝗧𝗶𝘁𝗹𝗲: Age separation dramatically reduces COVID-19 mortality rate in a computational model of a large population.
𝗔𝘂𝘁𝗵𝗼𝗿𝘀: Liron Mizrahi, Shani Sternhttps://t.co/cdM7oLOsRF pic.twitter.com/eDwabmqnot— COVID-19_arXiv (@COVID19arXiv) May 31, 2020
Sin embargo, dado que las conexiones sociales se consideran de gran importancia en los adultos, los investigadores agregaron nuevas conexiones con su propio grupo de edad.
La investigación estima que el motivo de la reducción de la tasa de mortalidad se debe principalmente a que las personas más jóvenes tienen una mayor probabilidad de ser asintomáticas, y manteniendo sus interacciones sociales llegarían a infectar a muchas personas durante mucho tiempo.
Las personas mayores, por su parte, tienen menos probabilidades de ser asintomáticas, lo que significa que durante el período en el que pueden ser contagiosos (cinco a seis días, aproximadamente) ya saben que están enfermos y son puestos en cuarentena.
“En general, nuestro estudio muestra que la separación por edades es extremadamente beneficiosa y puede imponerse en un período intermedio importante hasta reanudar la vida normal al encontrar una cura o una vacuna para la COVID-19”, reza el estudio.
