Ciudad de México, 16 de ene (SinEmbargo).- El Partido de la Revolución Democrática (PRD), que ha iniciado un proceso interno de reafiliación, enfrenta este año el desafío de demostrar si es la mejor opción partidista de la izquierda mexicana.

El panorama del PRD es complejo. Es la segunda fuerza electoral en el país, pero esta posición inédita, alcanzada en 2012  mientras el derechista Partido Acción Nacional (PAN) se desplomaba, se logró cuando Andrés Manuel López Obrador, un hombre que acumula cerca de 32 millones de votos en su carrera, estaba de su lado.

Además, el PRD se enfrenta a la misma esencia de la metodología de su proceso de afiliación-reafiliación que inició ayer: busca refrendar la militancia de un millón 928 mil individuos y sumar un millón más en el preciso momento en el que el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) hace lo mismo.

El PRD pretende ir por cada uno de los militantes; quiere que, credencial en mano, le refrenden su compromiso con el partido.

Un ejercicio similar realizado en meses pasados por el PAN desinfló el padrón al 80%.

A esto se suma la sombra ineludible Morena, que se registró como partido político la semana pasada y que inició su proceso de afiliación con López Obrador a la cabeza. A pesar de haberse declarado muerto políticamente en varias ocasiones, el político tabasqueño ha venido acumulando votos desde el 2000, cuando fue candidato a la jefatura del Distrito Federal, y en las subsecuentes elecciones presidenciales de 2006 y 2012. Estos registros no los tiene ningún líder izquierdista, y difícilmente los acumula otro político mexicano.

Jesús Zambrano Grijalva, Presidente Nacional del partido, aseguró ayer en el marco del arranque la campaña de reafiliación en el Polyforum Siquieiros, que no compite con Morena. Minimizó la militancia que el PRD perdió en los últimos meses al decir que “sólo son 300” los que desertaron.

De hecho, para el dirigente, el partido es “más fuerte que nunca”; prueba de ello son los 16 millones de votos que se obtuvieron en las elecciones del 2 de julio y que ratificaron a esta fuerza política como el segundo partido en las preferencias electorales, dijo.

Foto: Cuartoscuro

Sin embargo, Zambrano pasó por alto que estos votos los obtuvo Andrés Manuel, quien después de las elecciones decidió fundar en Morena, otro partido político de izquierda junto con los izquierdistas  calificados como los más radicales.

El PRD enfrenta también el desafío de lidiar con las críticas de que desertaron y dejaron su militancia al partido los perredistas radicales y que se quedaron personajes como René Bejarano, Joel Ortega y Dolores Padierna,  ligados a escándalos de corrupción.

Por si fuera poco, el partido libra una lucha interna entre sus diversas corrientes desatada por la participación de Jesús Zambrano en la firma del Pacto por México al lado del presidente Enrique Peña Nieto y del Partido Acción Nacional (PAN).

La imagen del dirigente nacional del PRD junto a Peña Nieto fracturó el ya desgastado partido y polarizó las opiniones al grado de que algunos líderes se deslindaron del Pacto y aseguraron que Zambrano acudió por cuenta propia.

Alejandro Sánchez Camacho, secretario general del PRD, al ser cuestionado sobre el motivo de la ausencia en el inicio de campaña de reafiliación de Cuauhtémoc Cárdenas y Marcelo Ebrard, a pesar de que se les hizo una invitación, aceptó que la firma del Pacto por México polarizó a los distintos líderes de la izquierda perredista.

A pesar de esta división, el perredista descartó que su partido viva una debacle y que compita por afiliados contra Morena.

“No estamos jugando vencidas con nadie… en este país hay mucha tela de donde cortar”, declaró.

Aunque los dirigentes del partido descartan que el PRD  esté perdiendo fuerza, un síntoma más de su debilitamiento es el resultado de las elecciones durante los últimos tres años en estados clave donde mantenía su liderazgo.

En 2010 perdió Zacatecas frente a Miguel Alonso Reyes del PRI y en 2011 al estado de Michoacán ante el candidato priista Fausto Vallejo.

Hoy gobierna Morelos y Tabasco,  este último gracias a la coalición PRD-PT y Morena y  el primero con Graco Ramírez, nominado por PRD y que actualmente enfrenta acusaciones por soborno en el caso Walmart.

Pese a estos síntomas, los perredistas se niegan ante la posibilidad de vivir una desbandada similar o peor que la ocurrida a los panistas.

LA LECCIÓN DEL PAN

El pasado 6 de enero, el PAN presentó su padrón depurado. Sus números hablaron de una debacle. Y esta situación, hasta por razones metodológicas, se podrían podría repetir con el PRD.

Las cifras del PAN fueron contundentes. Ocho de cada 10 militantes abandonaron las filas de la institución política. Acción Nacional pasó en los últimos 12 años de concentrar el poder presidencial a ser la tercera fuerza en el país.

No sólo cientos de militantes dejaron el partido, también figuras políticas como el ex candidato presidencial, Diego Fernández de Cevallos, el ex Presidente Vicente Fox y el ex dirigente nacional del PAN, César Nava, mostraron una postura renuente para renovar su membresía en el partido.

Tras no reafiliarse, Cevallos declaró: “Es como si la iglesia católica me dijera que para seguir siendo católico me tienen que volver a bautizar, no me bautizo pero sigo siendo católico”.

Un día después de presentar el padrón actualizado, el dirigente nacional blanquiazul Gustavo Madero Muñoz negó “una desbandada”. De acuerdo con los datos actualizados, el  total de militantes activos y adherentes es de 367 mil 828 ciudadanos; cifra lejana al millón 800 mil que ostentaba hasta el año pasado.

De acuerdo con el registro actual, son grandes las diferencias entre los que estaban y quienes se quedaron después del proceso de refrendo de militancia. Los casos más notables se registraron en Tabasco, donde la lista de adherentes pasó de 33 mil 783 a sólo 960; Colima, que cayó de 14 mil 931 ciudadanos a 451; Morelos, que pasó de 29 mil 143 a mil 517, así como Jalisco, que de 125 mil 962 descendió a 9 mil 527.

En el PAN del Distrito Federal, por ejemplo, sólo 10 mil 784 de los 93 mil 55 miembros activos y adherentes que tenía el partido refrendaron su militancia, según cifras del proceso de refrendo a nivel nacional. Es decir, que en la Ciudad de México casi 90% de los militantes han abandonado las filas de ese organismo político.

BUSCAN AFILIAR A MANCERA

Jesús Zambrano dijo al final del evento de presentación de la campaña de reafiliación que durante esta semana buscará a Miguel Ángel Mancera para conocer si está interesado en sumarse a las filas perredistas.

Al ser cuestionado  sobre la ausencia de Cuauhtémoc  Cárdenas, líder moral y fundador del partido y de Marcelo Ebrard, señaló que confía en que refrendarán su militancia en los próximos días.

La campaña de afiliación arrancó  con dos módulos por estado, con la meta de llegar a los 300 conforme avance el proceso.