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El PRD, de mal en peor: Basave se va y su renuncia es “irrevocable”; no aguantó la presión de “tribus”

18/06/2016 - 1:40 pm

El PRD vive su peor crisis desde su fundación. La aparición de Morena, liderado por Andrés Manuel López Obrador, le ha provocado una serie de derrotas no sólo en la elección de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) sino también en la del Constituyente. A esta cadena de derrotas se le suma la baja popularidad del Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera Espinosa, cuya aceptación entre los capitalinos alcanzó en meses pasados mínimos históricos.

El ahora ex líder nacional del PRD. Foto: Luis Barrón, SInEmbargo
El ahora ex líder nacional del PRD. Foto: Luis Barrón, SinEmbargo.

Ciudad de México, 18 de junio (SinEmbargo).– Agustín Basave Benítez presentó en conferencia de prensa su renuncia irrevocable a la dirigencia nacional del Partido de la Revolución Democrática (PRD), ante las pugnas entre los grupos políticos, conocidos como “tribus”, que se disputan las posiciones al interior de esa fuerza de izquierda.

“Pensé que podía situarme por encima de las corrientes y ser una suerte de árbitro, pero el tiempo me demostró no ser posible”, dijo.

Asimismo, por medio de una carta dirigida al Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRD, Basave expresa que “en virtud de que no estoy dispuesto a afiliarme a una corriente ni a formar parte de un bloque y dado que en estas circunstancias la gobernabilidad es más que precaria, he decidido renunciar a la presidencia del Comité Ejecutivo Nacional del PRD. Mi decisión es irrevocable”.

Basave también manifiesta que fue el PRD el que, debido a que las corrientes internas del partido “actúan en más de un sentido como si cada una de ellas fuera un partido político”, que el partido “siempre ha sido difícil de dirigir”, y debido a que presentaba “problemas de gobernabilidad”, fue que “el partido intentó una nueva movilidad de liderazgo: un presidente ‘externo’, sin corriente, que se situara por encima de los grupos y arbitrara sus conflictos”.

En ese sentido, el líder perredista explicó que aceptó el desafío “movido por mi anhelo de forjar una opción socialdemócrata que a mi juicio le hace mucha falta a México y por mi determinación de combatir la restauración autoritaria y la corrupción rampante del actual régimen priísta”.

Sin embargo, de acuerdo con él, la normatividad interna y la cultura política imperante obstaculizaron su presidencia, a tal grado que, a tan sólo dos meses de haber asumido el cargo, tuvo que proponer su renuncia para afianzar su autoridad y sacar adelante las alianzas que consideró indispensables para derrotar al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y “crear buenos gobiernos para los mexicanos”.

Además, detalla, sus acciones “provocaron francas agresiones y actitudes carentes de una mínima institucionalidad de parte de algunos de los miembros del CEN y una serie de desencuentros con el jefe de Nueva Izquierda, todo lo cual llevó soterrada y paulatinamente al PRD a rondar la ingobernabilidad y a un desgaste de mi dirigencia que no puede revertirse”.

Ante la circunstancia, Basave pidió a Ángel Ávila, presidente del Consejo Nacional del PRD, que convoque a sesión el próximo sábado 2 de julio para dar a conocer su renuncia y para que elijan a quien habrá de sustituirlo.

El politólogo también mencionó que el partido requiere de una reforma a su Estatuto y sus demás documentos básicos para fortalecer las facultades de su presidencia, acote las corrientes y permita el acercamiento a la ciudadanía.

Finalmente, aprovechó para expresar que puso todo su esfuerzo en el partido en cumplimiento de sus responsabilidades, y que sirvió a México “al contribuir a poner fin a tres saturarías priístas y a propiciar la alternancia y la transición a la democracia” en los estados de Veracruz, Quintana Roo y Durango.

Sus declaraciones se dan luego de que el día de ayer Jesús Ortega Martínez, líder nacional de la corriente perredista Nueva Izquierda, adelantara que Basave renunciaría formalmente a la presidencia del Sol Azteca.

El PRD vive su peor crisis desde su fundación. La aparición del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), liderado por Andrés Manuel López Obrador, le ha provocado una serie de derrotas no sólo en la elección de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) sino también en la del Constituyente.

A esta cadena de derrotas se le suma la baja popularidad del Jefe de Gobierno Miguel Ángel Mancera Espinosa, cuya aceptación entre los capitalinos alcanzó en meses pasados mínimos históricos.

Agustín Basave representaba una oportunidad para recuperar el rumbo de ese partido de izquierda, después de un proceso degenerativo que coincide con el poder hegemónico que adquirieron “Los Chuchos”, corriente liderada por Jesús Zambrano, Jesús Ortega, frecuentemente relacionada con corrupción.

 

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