Por lo evidenciado tras los registros de las personas interesadas en contender por la candidatura de Morena a la Jefatura de la Ciudad de México hay claridad sobre dos aspectos centrales: nada está decidido y habrá un proceso de alta competencia democrática.

Desde algunos sectores, principalmente opositores al movimiento de izquierda predominante en el país y en la capital nacional, se ha insistido en desacreditar el proceso de selección interna bajo el argumento de ser una decisión ya tomada.

¿A quién favorece implantar esta percepción? ¿Quién resulta beneficiado del descrédito de un esquema del cual carecen aún en otros frentes o partidos?

Al interior del partido mayoritario está claro que hay competencia, solidez y certeza en el diseño del mecanismo de elección, tanto de la y los aspirantes como de sus simpatizantes.

Los estudios demoscópicos indican que cualquiera de los tres aspirantes —Clara Brugada, Omar García Harfuch o Hugo López-Gatell— presenta ventaja y ganará las elecciones del 2024 ante la abandera opositora.

Una tendencia manifestada también a nivel nacional. Un estudio de la encuestadora De las Heras, presentado en Sin Embargo, indica un nivel de aprobación del 78 por ciento para el presidente Andrés Manuel López Obrador, y un 68 por ciento de preferencia presidencial para Claudia Sheinbaum, por un 13 por ciento de la frentista Xóchitl Gálvez.

Datos que ayudan a comprender el interés por desacreditar la evidente competencia interna en Morena, evidenciada este lunes tras el registro de Brugada y Harfuch.

La ex alcaldesa de Iztapalapa reunió a decenas de simpatizantes y representantes de diversas comunidades —feministas, empresarios, afrodescendientes, artistas, políticos—, ante quienes reforzó su convicción de trabajar para servir, de fortalecer los derechos, la igualdad en todos los sentidos, y el tiempo de mujeres.

Trabajo desde la izquierda que consolida un proyecto de transformación iniciado en 2018, del cual se prevé, con toda claridad, continuidad en la CDMX —como la registrada y profundizada con Martí Batres— y en el país.

Compromiso con la ciudadanía, convicción de servicio, disposición al movimiento territorial, resultados en beneficio de la población son factores centrales en las consideraciones ciudadanas. Características presentes en Brugada.

Harfuch, de notables resultados en la seguridad de CDMX.

En la oposición se revela ausencia de propuesta y de método de selección. Falta de claridad. De ahí que impulsar la idea de un favorito en el proceso de Morena sea su mejor argumento.

Sin embargo, está claro: hay competencia.

Salvador Guerrero Chiprés

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Salvador Guerrero Chiprés es presidente del Consejo Ciudadano para la Seguridad y Justicia de la Ciudad de México. Es doctor en Teoría Política por la Universidad de Essex, Inglaterra; maestro en Comunicación por la Universidad Iberoamericana y licenciado en Derecho y en Comunicación por la UNAM. Fue asesor de la Secretaría de Seguridad Pública del entonces Distrito Federal y de la Comisión Nacional de Seguridad, y Comisionado Ciudadano de Transparencia en el InfoDF.

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