Adrián de la Vega habló sobre su novela de ciencia ficción Sideris, una aventura espacial con un profundo viaje hacia la esencia humana, sus fallas y su búsqueda de redención en un universo al borde del colapso. En entrevista, De la Vega expuso la materia de la que está hecho su complejo protagonista, Nico.
Ciudad de México, 25 de noviembre (SinEmbargo).– En Sideris, su primera novela, Adrián de la Vega construye, a través de una compleja narrativa de ciencia ficción, una crisis galáctica existencial, al tiempo que explora las profundidades del trauma y la evolución humana en la piel de su protagonista, el cazarrecompensas Nico Sideris.
Nico Sideris y su tripulación, mercenarios de la cuestionable Asociación Universal Espacial, se ven inmersos en el Big Freeze, un fenómeno cósmico que amenaza acabar con la humanidad. La trama se tensa con el surgimiento de la Nueva Iglesia Universal, un culto liderado por el antagonista Jack Zortek, quien, creyéndose un mesías, busca las coordenadas del Big Freeze para forzar una evolución.
En entrevista con SinEmbargo, el autor Adrián de la Vega explicó que dotó a Nico de "lugares oscuros" y contradicciones, convirtiendo su arco narrativo en un viaje de redención. El mensaje que busca transmitir es universal: "El viaje de este personaje es justamente la culpa, el trauma que ha vivido por ciertas situaciones dentro de su historia y cómo hay que abrazarla, entenderla y evolucionar para poder ser mejores humanos."
Esta profundidad psicológica se extiende a toda la tripulación. Pese a situarse en una era galáctica con cíborgs y viajes intergalácticos, los personajes conservan su esencia humana. El autor enfatiza: "Al final todos somos lo que hemos vivido... creo que es lo que nos hace humanos." Por ello, se aseguró de que los personajes secundarios también aportaran algo a la historia y no estuvieran "solamente de relleno".
A nivel temático, Sideris es una advertencia. La historia se desarrolla en un futuro donde la Tierra fue destruida, obligando a la humanidad a migrar al espacio. El libro explora "los ciclos de la humanidad" y la incapacidad de cambiar los patrones destructivos: "Quise explorar esa temática donde ya en el futuro no cambiamos la forma en que estábamos actuando. Realmente destruimos todo lo que nos daba el planeta Tierra y tuvimos que irnos al espacio. Entonces, ese es el mensaje principal que yo quería transmitir."
Respecto a sus influencias en el género, el autor menciona clásicos como La Máquina del tiempo y Veinte mil leguas de viaje submarino, además de autores como William Gibson, Isaac Asimov y Ray Bradbury. Sin embargo, su mayor inspiración para el oficio de escritor vino de la literatura más contemplativa: "Realmente los que me inspiraron mucho respecto a ser escritor fue Murakami y Zafón."
Aunque la historia de Nico y su tripulación está "cerrada", De la Vega dejó la puerta abierta para explorar otros relatos en el mismo universo: "Sí podría explorar otro tipo de libros o cuentos que salieran de Sideris, pero esta historia de Nico, el personaje principal y su tripulación, el antagonista, todo, creo que es un cierre."
