De acuerdo con la aprobación, la Reforma al Poder Judicial propone la elección por voto directo de todos los jueces en México, incluidos los de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que se llevará a cabo en 2025 y 2027.
Ciudad de México, 17 de septiembre (SinEmbargo).- Estados Unidos reiteró este martes que respalda los argumentos de su Embajador en México, Ken Salazar, asegurando que comparte “sus preocupaciones” por la polémica Reforma Judicial, impulsada por el Presidente Andrés Manuel López Obrador, y que ayer entró en vigor. Sin embargo, apostó por continuar con los diálogos para “su aplicación”.
En conferencia de prensa, el Vocero del Departamento de Estado, Matthew Miller, sostuvo que el Gobierno estadounidense continuará las conversaciones con sus colegas en México sobre la iniciativa al Poder Judicial de la Federación (PJF), que incluye, entre otras cosas, la elección de jueces, magistrados y ministros a través del voto popular.
“Mantenemos todo lo que dijo el Embajador”, afirmó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en su rueda de prensa diaria. “Seguiremos dialogando con nuestros colegas mexicanos sobre la Ley y su aplicación”, añadió.
De acuerdo con la aprobación, la reforma impuso la elección por voto directo de todos los jueces en México, incluidos los de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que se llevará a cabo en 2025 y 2027, donde se podrán postular los actuales titulares.
Previo al dictamen final, el diplomático Ken Salazar estimó que la reforma “amenaza” la relación comercial entre ambos países y es un “riesgo” para la democracia mexicana. Afirmación que refutó el Presidente López Obrador, quien la promulgó el domingo.
Según el mandatario del Ejecutivo, la nueva Ley pemitirá limpiar de corrupción al poder judicial y dará “ejemplo” al mundo. Hecho que intervino el Vocero estadounidense durante su rueda de prensa al asegurar que mantendrá un diálogo entre ambas naciones sobre la reciente iniciativa.
“Consideramos sobre todo la promulgación de esta Ley a la luz de nuestros esfuerzos conjuntos para promover nuestra competitividad e integración económicas (…) lo que vamos a hacer ahora es tener un diálogo con nuestros colegas mexicanos sobre cómo se implementará esta reforma”, declaró Miller.
Anteriormente, Ken Salazar aseguró que, a pesar de la aprobación de la Reforma al Poder Judicial, avalada por la Cámara de Diputados, la relación económica con México seguirá adelante, pues prevalece una “relación muy fuerte” en ambos países.
Sin embargo, declaró que existen “preocupaciones” en los próximos cambios al Poder Judicial de la Federación y que si estos “no se hacen de la mejor forma” pueden acarrear “muchísimos daños” en el actual lazo bilateral, por lo que rechazó que hablar de ello sea una intromisión en la soberanía mexicana.
“Lo de la reforma judicial, muy claramente, es decisión del Gobierno de México y respetamos la soberanía de México (…) estoy en acuerdo en que sí se tienen que hacer reformas para fortalecer la Corte (sin embargo) se ha hecho tanto debate que no entiendo, es que si no se hace de la mejor manera, puede traer muchísimo daño en la relación. Eso no lo digo yo, nada más como embajador, eso lo digo por todas las preocupaciones que me están llegando de gente que de verdad quiere lo mejor para México y Estados Unidos”, subrayó.
Ken Salazar aseguró que la relación entre México y su país continuará, pese a la “pausa” que interpuso el Presidente Andrés Manuel López Obrador en ambos países ante los comentarios del diplomático sobre la Reforma Judicial, en el que aseguró que la relación no puede parar “porque alguien se enoje”, luego de la respuesta de López Obrador ante sus declaraciones.
“Tenemos preocupaciones y no por decir nuestras preocupaciones le estamos quitando de ninguna manera la soberanía a México, (pero) esas preocupaciones me llegan de muchísimos y es importante que los que vayan a ser esas decisiones sepan que son esas preocupaciones”, dijo.
Ken Salazar pidió Morena y al mandatario ejecutivo de revisar otras alternativas en la redacción de la Ley, donde destacó el ejemplo de su natal Colorado, en donde se permite ir por la revocación de mandato de funcionarios judiciales en las urnas, pero no su elección directa.
Finalmente, el diplomático aseguró que su opinión no debe ser motivo de ruptura entre ambas naciones, sino de un encuentro de socios que dialoguen como iguales; sin embargo, continuó con su posición en contra de la elección de jueces por voto popular al asegurar que minaría la democracia en México y “pondría en riesgo el espíritu del T-MEC”.